En el juicio abreviado que se realizó contra de tres trabajadores del fundo El Refugio, de propiedad de Broder Redlefsen, aledaño a la comunidad mapuche Ramón Millapán, reconocieron haber atacado a la comunidad, encapuchados, agredir a una dirigenta y amenazarla de muerte, por orden del conocido latifundista, autor de varias agresiones del mismo tipo.
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Según explicó Verónica Henríquez, presidenta de la comunidad Ramón Millapán en la localidad de Itropulli, y quien fue víctima de las agresiones, finalmente se llegó a un acuerdo, donde dos de los tres imputados decidieron confesar que eran los responsables de lo ocurrido y que habían sido pagados por Redlefsen.
Según la dirigente, pese a que no era lo que en un comienzo quería, la confesión les servirá de evidencia para el juicio que se realizará contra el dueño del fundo, quien asegura ordenaba distintos ataques, tal como la quema de siembras y destrucción de las propiedades de la comunidad.
La mujer dijo que ahora lo que espera es justicia y que los jóvenes oriundos de Hualpén no continúen trabajando como sicarios contra la comunidad mapuche.
La dirigente agregó que esperan que la confesión finalmente sea una prueba contundente para que los tribunales fallen a favor de la comunidad en el juicio contra el ciudadano alemán fijado a fin de mes, y se terminen los ataques que han consumido sus siembras y construcciones, reconociéndose además las tierras que aseguran son de ellos por derecho ancestral.
Sicarios reconocen ataque a comunidad mapuche por orden de Broder Redlefsen
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Durante la mañana del jueves 9 de junio, en el Tribunal de Garantía de Paillaco, los imputados por amenazas de muerte, daños y agresión en contra de de Verónica Henríquez, comunera mapuche de Paillaco, pidieron disculpas públicas a la víctima y reconocieron ser los autores de los delitos imputados, señalando de paso que las acciones que cometieron y de la cual se arrepienten, fueron ordenadas por el dueño del Fundo “El Refugio”, el colono Broder Redlefsen, quien también había sido formalizado por esta misma causa.
De este modo, los imputados Ángel Custodio Villagra Ferrada y Juan Ignacio Fernández Flores señalaron:
“Bueno, yo quiero pedirle disculpas a usted (Verónica Henríquez) y a la comunidad, si cometimos un error, Don Broder fue quien mandó esto, nosotros en ningún momento… no fue voluntad nuestra y eso.
Yo igual le quiero dar disculpas a su comunidad, si yo mismo cometí un error, puta, pido mil disculpas a todos y usted sabe que fue Don Broder el que nos mandó a nosotros“.
El ataque a la Comunidad Román Millapán
Los hechos se remontan al pasado 25 de noviembre en la localidad de Itropulli, comuna de Paillaco, Región de Los Ríos, cuando el propietario del fundo “El Refugio”, Broder Redlefsen junto a sus trabajadores irrumpieron nuevamente en la comunidad mapuche “Román Millapán” violando la medida cautelar que le impedía aproximarse al predio.
Fue debido a esta violación de la cautelar, que el latifundista Redlefsen y sus trabajadores fueron detenidos y formalizados al día siguiente.
Comunidad mapuche acepta disculpas pero busca condena para el colono Broder Redlefsen
Por su parte, Verónica Henríquez aceptó las disculpas de los imputados, señalando que ellos como comunidad mapuche (Román Millapán) tenían la certeza de que precisamente el latifundista Redlefsen había sido quien le había mandado a ocasionar daños en la siembras, cercos y predios en general.
Así Henríquez a la salida del Tribunal señaló:
“Llegamos a un acuerdo con los señores, estos sicarios que había contratado el señor Broder, siempre que ellos reconocieran quien era quien les había pagado, quien era quien los había mandado al hostigamiento dentro de nuestros territorios, donde ellos reconocieron que el señor Broder les había pagado, que el señor Broder era el encargado del hostigamiento, que él era quien mandaba a hacer todos esos daños que le habían hecho a las papas, tanto a las casas, los cercos, cortarnos los puentes y que él fue quien los mandó a amenazarme de muerte porque como él tiene plata él todo lo paga no mas“.
Por su parte, la abogada de los imputados, de la defensoría penal pública, Valeria Arriagada, señaló conformidad con el proceso y acuerdo reparatorio, de paso, reconoció la voluntad de la víctima (Verónica Henríquez y la Comunidad “Román Millapán) para dicho acuerdo, previo reconocimiento de las responsabilidad que le cabía a sus representados en los ilícitos que investiga el Ministerio Público.
Durante el proceso se pudo acreditar que los hombres, contratados por Broder Redlefsen, eran oriundos de la localidad de Hualpén, Región del Bío Bio, y habían sido contactados por el empresario agrícola específicamente para generar dichos ataques, además, según se consignó en el proceso, esta decisión se habría dado por los supuestos conocimientos de artes marciales que estos tendrían.
De este modo la causa queda sobreseída (en contra de los dos imputados) pero sigue la causa judicial en contra del empresario Broder Redlefsen. Por su parte Verónica Henríquez señaló que “espera que ambos hombres, que hoy pidieron disculpas, no trabajen más como sicarios y que regresen a su región en donde esperan no vuelvan a trabajar como sicarios en contra de una comunidad mapuche“.
