La bancada de diputados del Partido Socialista declinó impugnar el control preventivo de identidad ante el Tribunal Constitucional, dado que no logró conseguir las 30 firmas necesarias. Sin perjuicio de que se puede compartir la finalidad, era un mayúsculo despropósito, que le hubiera dado una pátina de legitimidad al ilegítimo, estravagante y antidemocrático Tribunal Constitucional.
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El jefe de bancada, Juan Luis Castro, indicó que «en el día de hoy buscamos llegar a las 30 firmas que la ley exige, desgraciadamente no fue posible avanzar más allá de las 24 que existían».
«Lamento que hayan habido enormes presiones durante estos días, tanto de La Moneda como de las cúpulas partidarias que intentaron, ya sea bajar firmas de quienes estaban inscritos y apoyando o evitar que parlamentarios se agregaran», añadió.
La presidenta del partido, Isabel Allende, aclaró que «dialogué con ellos, esto no es un regimiento, aquí no hay orden de partido».
«Solamente agradecer a quienes me escucharon y entendieron que a mi juicio esto era un error y a mi juicio aquí la ley intenta garantizarle a los ciudadanos, con todas las medidas, la seguridad que todos están buscando», dijo.
«Si esto no resulta efectivo como lo que más queremos, que es combatir la delincuencia, evidentemente que se puede cambiar el día de mañana para mostrar más eficacia, así que tranquilos», precisó la senadora.
Desde el Gobierno, el vocero Marcelo Díaz planteó que «nos parecía que no era un buen camino recurrir a un proyecto presentado por el Ejecutivo y desde esa perspectiva esperamos que esto nos permita prontamente promulgar la agenda corta de seguridad ciudadana, porque como lo he dicho en muchas ocasiones, es mucho más que el control de identidad».
Los parlamentarios integrantes de la bancada indicaron que ya que no lograron evitar la puesta en marcha de la iniciativa, se dedicarán a fiscalizar el correcto cumplimiento de la ley.
Diputado Soto (PS): «En la defensa de las libertades no caben cálculos políticos»
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El diputado PS Leonardo Soto se refirió a la frustrada intención de su bancada de recurrir al Tribunal Constitucional contra el control preventivo de identidad, luego de que se oficializara que no alcanzaron las 30 firmas necesarias para ingresar el requerimiento:
«Corresponde a quienes, pese a mostrarse en un inicio favorables a esta iniciativa, explicar por qué cambiaron de opinión y retiraron su firma o simplemente no firmaron, porque al iniciar esta acción contábamos con los compromisos necesarios para darle viabilidad».
«De nuestra parte, vamos a seguir haciendo el máximo esfuerzo para cerrar una brecha de arbitrariedad que persiste en este instrumento policial, porque cuando están en juego los derechos de las personas, y en la defensa de las libertades, no caben cálculos políticos circunstanciales, sino convicciones profundas sobre cómo valorizamos la democracia», añadió el diputado.
En esa línea, Soto indicó que «ahora queda el campo abierto para que esta norma sea promulgada y en las próximas semanas se ponga en práctica, por lo que seremos rigurosos observantes de cómo se aplica sobre ciudadanos que no tienen ninguna vinculación con delitos».
«Nuestra preocupación está puesta en las personas inocentes que puedan ser objeto de arbitrariedades y abusos policiales, en consecuencia, nos reservamos la posibilidad de recurrir a los organismos que correspondan para cautelar sus derechos», concluyó.
