El rey camina desnudo, pero como su orgullo e ineptitud le impide aceptarlo, sigue campante y hasta con un aire de “aquí te las traigo” según la fábula del danés Hans Christian Andersen en el S XIX. Si el caso Dávalos mostró que los asesores directos de la Moneda tenían límites para opinar; lo de Soquimich escapa a toda lógica, salvo…. que tenga lógica!!! La única explicación de tanto retardo es que el cálculo de las eventuales pérdidas ante una eventual apertura judicial del caso Soquimich conduzca a un “costo” excesivo, irreparable y desmesurado. Es decir, a SQM no pueden llegar y sobre todo, “no pasarán”, como se dijo en las épicas de la revolución española.
Sin embargo, el director del SII cambia de lógica y ofrece los archivos a la fiscalía. Raya para la suma: el gobierno solo perdió credibilidad.
En efecto, siempre hay leones sordos -como en esta historia- que, en este caso, es el menos sordo de todos porque escucha un clamor popular demasiado evidente.
El fiscal Sabas Chahuán Sarrás –por razones que no corresponde tratar ahora- se las jugó para pasar a la historia con dos cartas buenas (la gente exige transparencia y el sistema exige que algún poder, al menos, no esté en la jugada de tirar la basura debajo de la alfombra) y la carta mala, es que las elites que controlan este Chile son muy poderosas y no están dispuestas a ceder un ápice de poder.
Chahuán pidió la información a Impuestos Internos (SII) para “abrir” la contabilidad y evitar el jueguito de pagar multas irrisorias sin más que, por lo demás, es la más desigual de las desigualdades de Chile: para los delitos de cuello y corbata equivale a algo así como que si alguien roba una gallina bastaría con devolver un pollo.
Para que esto haya pasado así parece que fue necesario que la elite económica coopte (compre, arriende o atraiga) a los honorables parlamentarios que son los que hacen y definen las leyes. Penta mostró cómo funciona esto. Habría de esta manera, delitos que deben ser castigados y otros que son sólo, y apenas, errores involuntarios y punto.
Chahuán amenazó con que si en 48 horas no obtiene la información solicitada apelará a la Corte Suprema poniendo en tensión al poder judicial y al Ejecutivo porque entre las múltiples cosas que ya no se les cree a los voceros de la Moneda es que no tengan nada que ver con las decisiones dilatorias del director del SII, Michel Jorrat, quien era conocido por ser una persona honesta, e incluso haber hasta calculado el gracioso valor de los regalos que hace el Estado a las grandes empresas a través del costo fiscal.
Jorrat, podria ser un gran perdedor en esto porque podría pasar –a ojos de la opinión pública de ser un profesional honesto a un operador político de causas poco claras. Algo le ayudará que este jueves informó que entregará la información, aunque el abogado, operador y con la primera mayoría de la comisión política del PPD, Samuel Donoso, se opone a toda apertura del dossier SQM.
En concreto, la elite política de Chile está en crisis, así como la elite económica.
Las situaciones de crisis se definen de múltiples maneras, pero hay un par de criterios coincidentes en todos los analistas: la élite en el poder pierde legitimidad y no encuentra propuestas convincentes para su perpetuación y “los de abajo” no creen más, ni en la élite ni en la institucionalidad que la mantiene. Esto es evidente en la actualidad.
No cabe duda que la derecha (los poderes económicos en esta coalición se confunden con los políticos) mal puede seguir diciendo que el modelo neoliberal es una panacea porque los abusos son múltiples y ellos mismos no respetan lo que defienden (competencia versus colusión; méritos versus pitutos; transparencia versus coimas, etc).
La Moneda tampoco tiene solución a la crisis. Lo que apareció como un caso aislado, claro que protagonizado por la nuera de la presidenta (el caso Caval), no tiene altura ética diferenciable frente a las “curiosas modalidades” con que se financió las campañas políticas de la UDI a través de Penta y que pueden amplificarse a otra empresas.
Las declaraciones de las autoridades se endurecieron justo cuando Soquimich se mencionó en la investigación, a diferencia de cuando comenzó el caso Penta. En el marco de un seminario de Icare, este miércoles los ministros Alberto Arenas (Hacienda) y Rodrigo Peñailillo (Interior) salieron a blindar a Jorrat. “El SII es una institución autónoma, seria y hay que terminar con las descalificaciones que no ha lugar respecto al trabajo serio que las instituciones en Chile realizan.
Impuestos Internos como institución seria y apegada a la ley ha realizado lo que corresponde y seguirá realizando lo que corresponde. En Chile las instituciones funcionan y el SII, lo reitero, ha hecho lo que corresponde y seguirá haciendo lo que corresponde”, dijo Arenas ante las preguntas insistentes de la prensa.
En dos días todo cambia y Jorrat acepta entregar los archivos. Es difícil hacer paralelos entre las atrocidades que la dictadura cometió en derechos humanos y lo que sucede hoy, pero hay un símil en la manera en que algunos pretenden resolver las cosas, es decir, en los procedimientos, y solo en eso. Los violadores de derechos humanos lucharon porque después del plebiscito en que fueron derrotados, se les otorgara amnistía sin más y Pinochet impuso una suerte de acuerdo respaldado por su propio poder, como comandante de esas FF. AA.
La historia, la gente, la ciudadanía insistieron en que eso no podía ser porque la historia no puede escribirse con páginas en blanco. Se logró con enormes dificultades y pocos apoyos, incluso de parte de la Nueva Mayoría, que se encontraran los resabios legales que permitirían saber la verdad (en un caso reabriendo los procesos de los desaparecidos, torturados y vejados); en la a ctualidad, se siente la necesidad de la UDI –pero, obviamente no solo de ellos- para “llegar a un acuerdo” para que nadie quede como culpable de las violaciones a las leyes de financiamiento de la política y a las leyes tributarias.
El objetivo explícito es “borrón y cuenta nueva” y con una nueva ley que apenas parche los excesos del pasado.
“Eso es lo racional, razonable o sensato, escuchamos decir a un alto dirigente de la NM. Hay que buscar un acuerdo que no parezca echar todo bajo la alfombra dice un alto dirigente pero es muy irresponsable criticar todo porque el problema es el populismo, dice un experimentado analista pro-bacheletista (sin siquiera reflexionar que el problema es lo que hoy ha creado el duopolio político, porque el supuesto populismo aun ni siquiera existe).
No cabe duda, que las lógicas de financiamiento de la política condujeron a prácticas diversas y a demandas a las empresas desde todas las tendencias. Algunas pueden ser muy claras, otras incluso ingenuas. Otras, en cambio pueden ser al nivel de una subordinación que incluye la defensa de intereses corporativos y el cohecho. Que define esto. Cuál es la prueba de una acción de cohecho!!! Muy fácil.
El cómo votó el parlamentario en los casos en que estaba en cuestión asuntos relacionados con su mecenas. Por lo demás, debió haberse abstenido de votar!! Impedir que la opinión pública sepa la verdad (como en los derechos humanos) es un enorme error. Al parecer esto está siendo comprendido por el gobierno. Lo que deben entender los parlamentarios (como en su momento los militares) es que la verdad no los condenará a todos por igual porque, sin duda, al igual que en los derechos humanos hay gradientes en las responsabilidades.
Allí, algunos lo hicieron con intención, alevosía y convicción y, es difícil equipararlos con los que quisieron no creer lo que de todos modos escuchaban. Hay diferentes beneficiarios y operadores de un sistema que tiene cabezas, dirigentes y operadores como en el caso Penta.
Hoy, no hay posibilidad de acuerditos como en la LOCE o incluso en lo llamado MOP-GATE que en realidad, trató de los sobresueldos generalizados en la función pública, sin que se sepa quiénes, cuando, cómo y dónde se trasgrede la ley. Saber esto, por lo demás, es útil para evitar que los mismos actos se repitan.
Fuente: Primera Piedra