Ratificando el conocido doble estándar de la UDI, en el sentido de que todo delito debe ser duramente condenado, salvo si lo cometen los propios, el directorio de la Fundación Jaime Guzmán ratificó al ex senador Jovino Novoa y actual convicto de una pena remitida por secretaría, en el marco del caso Penta, para que continúe presidiendo el organismo.
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La decisión se tomó el pasado 13 de junio, cuando se reunieron los integrantes del directorio, entre ellos, Andrés Chadwick, el senador Hernán Larraín, Edmundo Eluchans y el diputado José Antonio Kast.
Precisamente fue el ex UDI José Antonio Kast quien en abril pasado impulsó la idea de realizar la votación cuestionando la presidencia de Novoa debido a la sentencia que recibió el ex senador por delitos tributarios.
En tanto, el senador y presidente de la UDI, Hernán Larraín, defendió la permanencia de Novoa en el cargo y aseguró que esta situación no le hace ningún daño al gremialismo, argumentando que las instituciones son diferentes.
«Efectivamente, Novoa fue ratificado en la última sesión del directorio. Se estimó que no había razones para pedirle la salida», informó.
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Hace unas semanas atrás, Larraín ya había comentado que “me parecería muy lamentable que una persona que tiene una situación judicial quede impedida de desempeñar distintas funciones”. Salvo, por cierto, de que se trate de adversarios políticos, a los que hay que cortarles la puerta giratoria e inhabilitarlos ojalá a perpetuidad.
“Hay algunas que pueden ser limitadas, pero no podemos sancionar a las personas a la proscripción, a una suerte de muerte civil”, agregó el presidente de la UDI en mayo pasado.
Los otros directores son Andrés Chadwick, Edmundo Eluchans y Juan Eduardo Ibáñez.
