lunes, septiembre 9, 2024
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El Golpe de Estado de Pinochet y las Heridas que No Cierran

La escasa vida nocturna de Chile es tal vez una señal de las secuelas de 17 años de férrea dictadura militar de Augusto Pinochet, con heridas sin restañar que afloran cada año en vísperas del 11 de septiembre. Todavía hay mucha gente marcada con los toques de queda y los desaparecidos. Pese al sabotaje de elementos encapuchados y grupos anarquistas, más de cinco mil personas desfilaron por las calles de la capital con fotos y carteles, en recuerdo de los desaparecidos y asesinados por la dictadura de Pinochet, pero también reiterando la demanda de justicia y no a la impunidad..

Si bien el tema de la sangrienta asonada militar liderada por el general Pinochet en 1973 ya no es tabú, tampoco todos los sectores de la nación sudamericana parecen abiertos a reconocer las atrocidades cometidas desde ese año hasta 1990.

El domingo, familiares de víctimas de la dictadura exigieron justicia a 41 años del Golpe de Estado, en una marcha pacífica que culminó en el Cementerio General de Santiago. Pero se repitieron problemas.

De acuerdo con el Movimiento del Socialismo Allendista, durante la manifestación «se vivieron momento de extrema tensión por la represión que fuimos objeto por parte de carabineros».

Las fuerzas de la policía con alrededor de ocho mil efectivos, enfrentaron intentos de actos de sabotajes de elementos encapuchados de grupos al parecer anarquistas, que lanzaron cocteles molotov contra los carabineros y prensa.

Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, subrayó que no es momento de cerrar capítulos, «queremos justicia, porque todos los criminales de la Junta Militar estén encarcelados y paguen por sus atrocidades».

Pizarro, hija del detenido desaparecido Waldo Pizarro y de la ex dirigente de derechos humanos Sola Sierra, lamentó que la Intendencia de Santiago y el Gobierno impidan que la tradicional romería pase por las inmediaciones del Palacio de La Moneda.

En el año 2006, encapuchados lanzaron una bomba molotov contra la puerta lateral de La Moneda en la calle Morandé, por donde habitualmente salía el derrocado mandatario Salvador Allende, muy cerca de donde se ubica el busto a su memoria.

Sin embargo, el asunto que quizá tuvo la mayor coincidencia entre los participantes en el desfile se refiere a los privilegios de los militares encarcelados, en prisiones con ciertos lujos.

La diputada Karol Cariola (Partido Comunista) subrayó que es hora de que el país entero asuma estas jornadas luctuosas previas al 11 de septiembre con la frente en alto y exigiendo la verdad.

Pero no podemos seguir permitiendo que los criminales y culpables de los sucesos que llenaron de sangre a Chile disfruten de comodidades especiales en los centros penitenciarios, entre ellos Punta Peuca, reiteró hoy Cariola. «No se puede enterrar un pasado que costó tantas vidas y sufrimiento al pueblo chileno, sentenció Cariola.

La diputada del Partido Comunista, Karol Cariola, presente en la marcha, llamó a que se “rompa el pacto de silencio”.

“Siempre se puede mirar hacia adelante, pero que no nos pidan reconciliación y perdón mientas los militares sigan guardando un pacto de silencio del que la derecha chilena es cómplice. Que no nos pidan reconciliación porque la familia chilena que tienen todavía en sus corazones  a sus víctimas sin poder enterrarlos, sin poder desarrollarles una ceremonia fúnebre de manera digna, nosotros la verdad es que no vamos a poder echar pie atrás con esta demanda tan sentida que es el término de la impunidad”, dijo.

El ministro de Gobierno, Alvaro Elizalde, declaró que estas fechas deben servir «para reflexionar y aprender de las lecciones del pasado doloroso para construir un Chile en el que nunca más se violen los Derechos Humanos».

Familiares de las víctimas de la dictadura chilena reclaman justicia

Familiares de víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) reclamaron justicia a 41 años del Golpe de Estado, en una marcha pacífica que culminó en el Cementerio General de Santiago de Chile.

Pese a sabotajes de elementos encapuchados de grupos anarquistas, más de cinco mil personas desfilaron por las calles de la capital chilena con fotos y carteles en recordación de desaparecidos y asesinados por la dictadura de Pinochet.

La marcha se inició a media mañana en la Plaza de Los Héroes, a cierta distancia del Palacio de La Moneda y aunque transcurrió en calma en su cola se agregaron decenas de agresivos encapuchados que chocaron con la policía.

Fueron necesarios el uso de gases lacrimógenos y camiones lanza aguas, pero así y todo en la calle Recoleta, un centro médico privado y dentro del propio Camposanto se dieron disturbios.

Alicia Lira, presidenta del colectivo de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP), destacó el deber ciudadano y patriótico de los chilenos de rememorar la triste época de la asonada golpista y del régimen de Pinochet.

Activista de los derechos humanos desde el arresto de su hermano y asesinato de su esposo en 1986, Lira se pronunció por un mayor compromiso desde el Estado para que el 11 de septiembre sea una fecha más especial para Chile.

Por otro lado, ministro y portavoz del Gobierno, Álvaro Elizalde, participó en la ceremonia de conmemoración de la muerte del periodista José Carrasco Tapia, asesinado hace 28 años por organismos de seguridad de la dictadura.

«Debemos aprender de las lecciones de un pasado doloroso para que nunca más en Chile se cometan crímenes atroces como los de la dictadura», apostilló Elizalde.

Junto a familiares, parlamentarios y amigos de Carrasco Tapia, el titular recalcó que las sociedades que no aprenden de sus errores no progresan. «La memoria, el recuerdo, son siempre necesarios para construir un futuro mejor en democracia».

Marcha por los derechos humanos es interrumpida por enfrentamientos entre Carabineros y encapuchados.

Enfrentamiento entre Carabineros de Chile y encapuchados lograron interrumpir una manifestación masiva en la capital chilena para recordar a las víctimas de la dictadura (1973-1990) y exigir verdad y justicia.

En vísperas de conmemorarse el 41 aniversario del golpe de Estado en Chile, cientos de personas participaron en la llamada “Marcha por los derechos humanos”, que pasó por el centro de Santiago en dirección al Cementerio General.

La movilización comenzó a las 10:00 horas locales (13:00 GMT) de manera pacífica, pero dos horas después comenzaron a producirse los primeros incidentes que provocaron enfrentamientos entre encapuchados y la fuerza pública.

En medio de los incidentes, un periodista del canal Chilevisión resultó herido por el golpe de un objeto contundente en la cabeza, además fue rociado con gasolina, por lo que debió ser trasladado hasta un centro de salud.

Un reducido grupo de encapuchados con la clara disposición de interrumpir la marcha, bloquearon con barricadas una avenida próxima al camposanto, lo que obligó a la intervención de personal de Fuerzas Especiales de Carabineros.

“Hasta cuando se permite que gente infiltrada de clara filiación ultra derechista, probablemente ligadas a grupos pinochetistas, interrumpa una manifestación democrática y produzca desordenes y daño”  relató un concurrente. “La autoridad debe terminar con este tipo de acciones que de seguro son los mismos que colocan bombas en el Metro y lugares públicos para producir un ambiente de terror”.

En medio de la marcha, la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, envió un mensaje a quienes han instalado una “campaña del terror” contra las manifestaciones y los cambios en el país.

“A esos bravucones que amenazan incluso con que si la gente se moviliza o hay cambios puede peligrar la democracia, a esa gente es a la que hay que anular y encarcelar, a esa gente que lo único que le ha dado a nuestro pueblo es dolor”, enfatizó.

Agrupaciones de DD.HH critican desinterés del Gobierno por agilizar la justicia

La tradicional marcha organizada por la Asamblea Nacional por los Derechos Humanos para conmemorar los 41 años del Golpe Militar, se realizó este domingo con discursos centrados en las deudas pendientes bajo la consigna “Verdad y Justicia Ahora”.

Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), envió un enfático mensaje de disconformidad al Gobierno por sus gestiones en materia de Derechos Humanos. “Si a seis meses del Gobierno el tema estaba ausente, si la Presidenta Bachelet no lo habló en el mensaje del 21 de mayo, es muy lamentable”, señaló Pizarro.

A las deudas históricas de reparación y justicia, también se suman demandas para que aceleren los mecanismos legales y los violadores de Derechos Humanos que estén con vida sean sancionados. Además se insiste en que éstos cumplan sus condenas en penales comunes y no en cárceles especiales.

En este sentido el abogado experto en la materia, Alberto Espinoza, señaló que efectivamente “existe una deuda de gran magnitud” lo que se refleja en la demanda de verdad y justicia que en este nuevo once de septiembre levantan los familiares de las víctimas de la dictadura.

“Creo que todavía hay una deuda pendiente de gran magnitud, partiendo con el tema de la verdad y justicia en el caso de los detenidos y torturados políticos y también de los asesinados y desaparecidos. Aún andan violadores de los Derechos Humanos sueltos por las calles, prueba de ellos es que la semana pasada vimos que se sometió a proceso a los responsables de la muerte de Víctor Jara, lo que demuestra que la transición pactada está vigente y la impunidad sobrevive”.

El abogado agregó que estas deudas provocan efectos en la actualidad herencia de la dictadura, como lo es el hecho que no exista una calificación de la tortura o que aún esté vigente la constitución hecha por Pinochet.

“Los pactos establecidos, no sé si de forma expresa o tácita, pero que le han dado una continuidad al fenómeno de violación a los DD.HH. ya que se sigue apreciando tortura en las cárceles, carabineros también sigue actuando en la lógica de un cuerpo militarizado como se ve en el caso del pueblo mapuche, entre otros eventos. En fin, se puede hacer un listado enorme de asuntos pendientes que reflejan esta transición a la democracias”, comentó Espinoza.

La romería no tuvo permiso para pasar por afuera de Morandé 80, debido principalmente a que durante la marcha de 2006 un grupo de personas arrojará una bomba molotov hacia La Moneda.  Alicia Lira, Presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP) criticó la decisión.

“Le quitaron el derecho a los familiares, a los chilenos que quieren rendirle tributo a Salvador Allende, de pasar por Morandé 80, pero aquí les estamos demostrando a los gobiernos, que están las mujeres, los jóvenes, en un acto conmemorativo, lleno de cariño y de alegría

La marcha, que estaba autorizada por la Intendencia Metropolitana, al término de su recorrido registró enfrentamientos entre encapuchados y Carabineros.

Además, la Intendencia anunció que presentará una querella contra quienes resulten responsables por la agresión que sufrió el periodista de Chilevisión, Fernando Sánchez, quien recibió un golpe en la cabeza y tuvo que ser trasladado al Hospital del trabajador, donde luego se informó que estaba en buen estado.

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