Al concluir el año, el Partido Comunista emitió una declaración pública en la que hace un balance de lo realizado en los primeros dos años del Gobierno de Michelle Bachelet, analiza los retos y desafíos para el año 2016, entre los cuales destaca el proceso constituyente y las elecciones muncicipales, y formula un llamado a la participación popular activa.
El Partido Comunista de Chile, que se encuentra realizando su Congreso Nacional, hace llegar al pueblo y a los trabajadores, un fraternal saludo de Año Nuevo, con la esperanza cierta de que el 2016 seguiremos avanzando en el logro de reformas y objetivos que permitan garantizar y reforzar derechos sociales, laborales, económicos y democráticos, y que los próximos doce meses serán de nuevas y renovadas luchas para avanzar hacia un Chile donde disminuya la desigualdad, se progrese socialmente, se mejore el sistema democrático y se consoliden las reformas destinadas a mejorar la calidad de vida de chilenas y chilenos.
Durante el 2016 asoman objetivos de gran trascendencia para el pueblo y para las fuerzas democráticas, progresistas y de izquierda, como es la concreción de una justa y necesaria reforma a las relaciones laborales, una esperada reforma a la educación superior, materializar la creación de los ministerios de la Mujer y Equidad de Género y de Pueblos Originarios y Cultura, bregar por verdad y justicia en materia de derechos humanos, concretar una institucionalidad que sancione severamente los delitos económicos y de irregularidades en el financiamiento de la política, superar deficiencias en materia de salud y seguridad pública, y seguir avanzando en la realización del programa de la Nueva Mayoría.
También el 2016 trae el enorme reto de ganar las elecciones municipales para avanzar en gobiernos locales democráticos y comprometidos con las demandas y el bienestar de las y los chilenos y, al mismo tiempo, consolidar la fuerza electoral, política y social de la Nueva Mayoría y los sectores democráticos.
Será una tarea democrática central del 2016, seguir avanzando en el proceso constituyente, garantizando una amplia y constructiva participación del pueblo, generando espacios de propuesta y debate, y continuar caminando con decisión hacia una nueva Constitución para Chile.
Sin duda que este año que se inicia será de mucha gravitación del movimiento social, especialmente todo lo que tiene que ver con las reivindicaciones y movilizaciones de los trabajadores, de los estudiantes, de los pueblos originarios, de los profesionales, de las mujeres, y del conjunto del pueblo.
Para avanzar el 2016 en las reformas y objetivos sociales y políticos, será fundamental el accionar del movimiento social en todas sus expresiones.
Este año será asimismo determinante en la concreción del programa de Gobierno de la Nueva Mayoría, lo que requerirá de una gestión eficaz en las labores de Gobierno y en el Parlamento, del apoyo de la sociedad civil, y de estar en condiciones de enfrentar las arremetidas conservadoras de la derecha y de segmentos confundidos y reticentes dentro del campo del oficialismo.
En definitiva, en la perspectiva del Partido Comunista, se trata de avanzar en los desafíos que están en la agenda popular y democrática, e ir consolidando los avances logrados.
Pese a que por momentos pareció instalarse una sensación negativa del acontecer nacional, la realidad muestra que durante el 2015 hubo logros fundamentales para el avance de la democracia, de los derechos sociales, de objetivos en el ámbito educacional y laboral, en lo que destaca la consolidación de los esfuerzos para arribar a una nueva Constitución.
Saludamos a todas y todos los chilenos que durante el 2015 se la jugaron por el avance de la democracia y la consolidación de los derechos del pueblo. Recordamos a nuestros jóvenes que cayeron en la lucha por las reivindicaciones del movimiento estudiantil y a quienes partieron después de años de dedicación y compromiso con las luchas populares.
Reiteramos que las y los comunistas seguiremos bregando por el cumplimiento del programa de la Nueva Mayoría, seremos leales a nuestro Gobierno, plantearemos donde corresponda y de manera oportuna nuestras posiciones para defender los objetivos democráticos, seguiremos estando dentro del movimiento social impulsando los derechos de las y los trabajadores, de los estudiantes y del conjunto del pueblo, y no cejaremos en seguir trabajando por profundizar los cambios que Chile necesita, sobre todo con miras a conquistar un nuevo periodo gubernamental para proyectar las reformas, asumir nuevas transformaciones y consolidar la democracia.
