El fallecido ecologista norteamericano, Douglas Tompkins, se había comprometido a traspasar al Estado, para su conservación ecológica, más de 400 mil hectáreas desde la Región de Los Lagos hacia el sur. Hernán Mladinic, director ejecutivo de la Fundación Pumalín, prevé que los diálogos para el traspaso se extenderán al menos hasta marzo del próximo año.
«Es una propuesta integral que abarca la creación de ocho parques que van de Hornopirén a Magallanes, donde están el Parque Pumalín y el Parque Patagonia como los más emblemáticos», explicó Mladinic, quien destacó que las conversaciones con el Gobierno ya estaban en curso, pero aún no se habían logrado traducir en un protocolo de acuerdo.
En esa línea, será necesario durante las próximas semanas y meses «participar de reuniones entre los equipos técnicos nuestros y los equipos técnicos del Gobierno, y seguramente vamos a tener sucesivas reuniones para llegar a marzo o abril con un protocolo de acuerdo», comentó el director de Pumalín.
El cuerpo de Douglas Tompkins está siendo velando desde ayer en Puerto Varas. Este viernes será sepultado en un cementerio antiguo ubicado en el Parque Patagonia, en Valle Chacabuco, en la Región de Aysén.
Piden concretar donaciones de Douglas Tompkins
El Movimiento Patagonia Sin Represa, expresó su pesar por el fallecimiento de Douglas Tompkins y solicitó al gobierno que “elimine las trabas burocráticas y materialice las donaciones de tierras hechas por el filántropo norteamericano y que aún están pendientes”.
“El mejor homenaje que podemos hacerle a un hombre que amo a Chile y a la Patagonia, más que muchos chilenos, es de una vez por todas concretar los procesos de donación de tierras que él realizó y que se encuentran detenidos sólo por una burocracia kafkiana”, afirmó esta mañana el senador Guido Girardi.
Junto a Patricio Rodrigo y Marcelo Castillo (secretario ejecutivo y abogado del Movimiento Patagonia sin represas, respectivamente-) el jefe de bancada de senadores del PPD expresó su pesar y envío las condolencias a la familia del ecologista Douglas Tompkins, quien falleció este martes tras volcar su kayak en las aguas del Lago General Carrera.
“Estamos muy afectados porque es la muerte de un persona que valoramos mucho porque hizo un gran aporte a este país. Y su colaboración fue muy importante para detener esa aberración y ‘ecocidio’ que habría sido construir Hidroaysén”, dijo Girardi.
El parlamentario recordó que en el pasado “Tompkins fue cuestionado, descalificado y se dijo quería instalar una base judía en la Patagonia, espiar los barcos de guerra que transitaban por la zona. Estuve en sesiones secretas donde, incluso altos oficiales, intentaron crear una mitología sobre su afán de comprar tierras a privados a precio de mercado para su conservación”.
Según Girardi, en ese entonces se “valoraban proyectos que destruían el medio ambiente como las salmoneras -un verdadero desastre- o el proyecto Trillium –venta de 260 mil hectáreas para talar la Lenga, que logramos detener porque a 3 dólares la hectárea, era un fraude al fisco- y se descalificaba proyectos de repatriar 300 mil hectáreas y resguardarlas para Chile y la humanidad”.
El senador afirmó que “quienes cuestionaron a Tompkins le deben una disculpa al país porque a la luz de los hechos estaban tremendamente equivocados y sus críticas fueron injustas. Producto de esas visiones desarrollistas estamos en una situación límite donde las posibilidades de salvar a la humanidad y al planeta depende de hacer a gran escala lo que él hizo en Chile, donde demostró que es más valido y rentable comprar naturaleza para conservarla y no para destruirla”.
El parlamentario señaló que “Tompkins le entregó al Estado de Chile dos grandes parques nacionales, El Corcovado (95 mil h) y El Yendegaia (38 mil h), pero aún está pendiente la ruta de los parques que son Pumalín (300 mil), Patagonia (78mil h) y Cabo León (15 mil h)”.
Y agregó que “le pedimos al Estado y al gobierno que acelere los trámites y para que materialicen las donaciones cuya único requisito es destinar los recursos necesarios para su protección y que no queden abandonados como los otros parques nacionales”.
Girardi afirmó que “como jefe de bancada del PPD pediremos al ministro (Nicolás) Eyzaguirre una reunión urgente porque esto es una prioridad y tal como lo expresó el ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, para el gobierno también, pero tememos a las presiones y lobbys de sectores que quieren explotar los parques y no cuidarlos”.
Marcelo Castillo señaló que “como abogados de varias causas que nos encomendó y miembro de la Comisión de Medio Ambiente del PPD, reafirmo el compromiso de colaborar a que los proyectos pendientes, como la ejecución de los parques Patagonia y Pumalín, se hagan realidad.
Castillo recordó haber conocido al ecologista en “en 1994 poco después que comenzara a comprar las tierras y su generosidad topó con mezquinos intereses políticos o empresariales que tratan de impedir que se concreten a través de burocracia estatal, reglamentos y presupuestos. Resulta inexplicable hayan pasado más de dos décadas y aún no se haga realidad este legado para todos los chilenos”.
Por su parte, Patricio Rodrigo, afirmó que “es un momento triste en que fallece un amigo, compañero de lucha en materia de medio ambiente, un gran activista ambiental como él se definía, que se jugó por Chile como pocos chilenos lo han hecho”.
Rodrigo recordó que “cuando un estudiante le preguntó ¿Por qué hace esto en vez de disfrutar su dinero, respondió que ‘había tomado consciencia que debía pagar el derecho a estar vivo en la Tierra. Tuvo gran respeto por la vida y amó a Chile y a la Patagonia”.
Para Rodrigo, el legado de Tompkins es “ser ejemplo del cambio cultural hacia el que debe avanzar el mundo, porque tal como estamos haciendo las cosas no será sustentable. Hace más de 30 años que enarbolo ese discurso, pero no ha sido escuchado. Hoy vemos como en Paris se discute sobre el Cambio climático y estamos consciente que si no cambiamos nuestras conductas este planeta no es viable para el ser humano”.
Navarro: «Tompkins merece con creces la nacionalidad chilena por gracia»
Junto con manifestar que «la partida de Douglas Tompkins significa un gran dolor para Chile», el senador del MAS Alejandro Navarro solicitó al Ejecutivo otorgar suma urgencia al proyecto de ley de su autoría presentado en diciembre de 2014 que concede la nacionalidad chilena, por especial gracia, al ciudadano estadounidense Douglas Tompkins.
El líder del MAS señaló que «la figura de Douglas Tompkins será recordada en la historia de nuestra Patria y de sus Parques Nacionales como una leyenda a imitar y respetar».
Para Navarro, «está claro que si no hubiera sido por Douglas Tompkins los Parques Nacionales el Corcovado, Yendegaia, Pumalin y Patagonia estarían siendo devastados por las forestales».
Es por esto que el legislador abogó por otorgar este reconocimiento póstumo, «la nacionalización por gracia constituye el más alto honor que el Estado confiere a un extranjero. Cuándo se ha concedido, se ha hecho para honrar a extranjeros que han prestado grandes servicios al país o a la humanidad».
«Creemos que este alto honor ha sido ganado con creces por Douglas Tompkins. No podemos quedar indiferentes a pesar de cualquier punto de vista o diferencia de criterio que pueda existir».
Amistad con Tompkins
El líder del MAS comentó «tuve el placer de conocer a Douglas Tompkins por primera vez en el año 1993, en una asamblea ambiental en Santiago, donde todos nos preguntábamos qué se trae entre manos este gringo, qué negocio hay detrás de todo esto, porque parecía increíble que un empresario estadounidense viniera a Chile a construir parques de conservación sin recibir nada a cambio».
«Luego que todos estos mitos fueron desechados, estuvimos en muchas peleas juntos. Estuvimos en su casa, junto a su esposa, donde conversábamos de la estrategia a seguir contra Hidroaysen o como debía desarrollarse la relación con el gobierno respecto de los parques».
«De ahí en adelante entablamos una relación en base a continuar con la conservación y defensa de los bosques nativos, así como de brindar apoyo a las comunidades movilizadas por una relación respetuosa con el medio ambiente».
«Cada verano hacia festivales en el parque Pumalin donde fuimos junto a mis hijas. Recuerdo que Tompkins nos iba a recoger en su avioneta, luego nos trasladábamos en su lancha, donde el mismo preparaba el desayuno arriba de la nave, para llegar luego a tierra donde tomaba su 4×4 para llegar a destino. Douglas Tompkins era un hombre todo terreno».
Para el senador Alejandro Navarro «las propuestas de Douglas Tompkins siempre han pasado por la donación de la propiedad privada de las tierras que ha adquirido, en favor del Estado de Chile, poniendo como única condición que ellas sean convertidas en Parques Nacionales, garantizando así su conservación y evitando la depredación del bosque nativo y de la biodiversidad que este contempla».
«Lejos de adquirir tierras boscosas para explotarlas, el Sr. Tompkins siempre ofreció regalárselas al Fisco a cambio de su conservación», añadió.
Es por eso que para Navarro «la mejor manera de reconocer a Tompkins, además de otorgarle la nacionalidad por gracia, es que el Estado de Chile reciba las tierras que Douglas quería entregar al Estado cumpliendo su voluntad de convertirlos en zonas de conservación».
A juicio de Navarro «Tompkins instaló en Chile la figura del filántropo, eso fue lo que le costó entender a muchos chilenos, ya que antes de Tompkins, en Chile estaba la figura de que la filantropía iba siempre asociada a los negocios, cuando por el contrario, su filosofía era dar sin recibir nada a cambio, más que la felicidad de que la naturaleza sea ser conservada».
Para el parlamentario «Tompkins derribó la imagen del gringo que solo viene a hacer negocios, lo que hizo cambiar mi percepción entre el pueblo de EEUU y el gobierno de EEUU; la diferencia entre el gringo y el yankee».
Finalmente Navarro señaló que «el legado de Douglas Tompkins debe ser recordado, respetado e imitado por la humanidad, por lo que considero que el Estado de Chile tiene el deber de darle la nacionalidad por gracia».
