La Universidad de Texas adquirió el archivo personal del escritor colombiano Gabriel García Márquez. El archivo incluye manuscritos de diez libros, unos 40 álbumes de fotografìas, más de dos mil correspondencias y objetos personales como dos máquinas de escribir Smith Corona y cinco computadores Apple. Además, borradores de su discurso al aceptar el Premio Nobel de Literatura en 1982. Según The New York Times, la universidad estadounidense obtuvo el importante material a través de su prestigioso Centro Harry Ransom, que actualmente contiene las colecciones de Jorge Luis Borges, James Joyce, Ernest Hemingway y William Faulkner, entre otros.
«Es como si James Joyce se reuniera con Gabriel García Márquez» dijo el director del Centro Harry Ransom, Steve Enniss. Y añadió: «Es muy apropiado que se una a nuestras colecciones pues es difícil pensar en un novelista que haya tenido tan amplio impacto».
El archivo fue comprado a la familia del autor y comprende material relacionado a todos sus libros más importantes, como su célebre novela Cien años de soledad, del que se tiene el manuscrito final que envió a su editor.
Tanto el Centro de Rescate como la familia de García Márquez, declinaron revelar el precio de la transacción mediante la cual el valioso material pasó a ser adquirido por el centro de estudios.
El Gobierno de Colombia, por su parte, la declarado que lamenta que el país no se haya quedado con el archivo del escritor debido a su venta por parte de la familia a la universidad estadounidense.
No obstante, algunos cercanos ya se refirieron al tema. Entre ellos, Gonzalo García Barcha, uno de los hijos del escritor, quien señaló que «el Gobierno colombiano nunca se hizo presente ni hizo ninguna oferta».
Precisó que, por ello, la familia «tomó la decisión de enviar los archivos a la Universidad de Texas. Queríamos que estuviera bien acompañado», apuntó, al argumentar que en ese centro de estudios hay «colecciones similares», según publicó el medio mexicano El Horizonte.
Gabril García Márquez, escritor, novelista, cuentista, guionista, editor y periodista, murió en abril pasado a los 87 años en la capital de México, país en en el cual fijó su residencia a principio de los años 60 y donde escribió y publicó, en 1967, Cien Años de Soledad.
