La justicia chilena ordenó la indemnización de todos los alumnos vinculados a la Universidad del Mar al momento del anuncio del primer cierre del establecimiento de educación superior en 2012.
«La denunciada, Corporación Educacional Universidad del Mar, debe indemnizar a cada uno de los estudiantes que resultaron afectados con el actuar infraccional de la referida casa de estudios», dice en su última parte la sentencia del Tercer Juzgado Civil de Viña del Mar, firmada por el magistrado Esteban Gómez Barahona, que además señala como responsable a la casa de estudios de perjuicios hacia sus estudiantes y cláusulas abusivas en los contratos.
La demanda colectiva, fue presentada en 2012 por el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) de Valparaíso, aludiendo que los contratos suscritos por los estudiantes tenían cláusulas abusivas y que deben ser indemnizados, basándose además en un Estudio Compensatorio que propuso la forma para realizar tal indemnización.
En la sentencia del tribunal, se acoge la propuesta del Sernac, y se divide a los estudiantes en cuatro grupos:
«Grupo 1: alumnos que continuaron sus estudios en otros planteles educacionales, en virtud de convenios, sin dejar de tener la calidad de alumnos de la Universidad del Mar; Grupo 2: Alumnos que fueron reubicados durante el año 2013 en otras instituciones educacionales, dejando de tener la calidad de alumnos de la Universidad del Mar; Grupo 3: Alumnos cuya reubicación en otros centros educacionales no fue posible y que, por dicha razón, no continuaron con sus estudios durante el año 2013; Grupo 4: Alumnos cuyos ramos cursados en la Universidad del Mar no son susceptibles de convalidación y / u homologación con otras instituciones».
Además, se señala que «las declaraciones testificales rendidas en autos, permiten dar cuenta de la evidente transgresión que los alumnos sufrieron en sus derechos como consumidores, en cuanto no fueron respetadas las modalidades de estudio que fueron contratadas, desconociéndoseles la pretensión final que se persigue con el ingreso a una entidad universitaria».
La sentencia, fue emitida el pasado lunes 8 de febrero, y fue apelada por el síndico de quiebras de la casa de estudios, Cristián Herrera, este lunes 15 de febrero, por lo que ahora la causa será analizada por la Corte de Apelaciones de la ciudad jardín.
En concreto, el fallo implica el pago de arriendo, aranceles, matrículas y transporte a unos 20 mil estudiantes. La resolución se produce luego de la demanda colectiva que ingresó el Sernac en su oportunidad. El síndico de quiebra, Cristián Herrera, ya apeló, argumentando que a quienes representa están “tanto o quizás más afectados que los alumnos de la casa de estudios tantas veces señalada”.
Para el ex presidente de la Federación Raúl Soto, el pronunciamiento de la justicia genera un triunfo no esperado:
“Es positiva para los estudiantes que se vieron afectados por la crisis de la Universidad del Mar. Fuimos nosotros los afectados y la Universidad del Mar debiera hacerse cargo de todo lo que vivimos todo este tiempo. Lo malo es darse cuenta de cómo se sigue viendo la educación en Chile, porque esto ratifica que la universidad es un retail, nosotros sus clientes y la educación un bien de consumo».