En medio del denso ambiente de cuestionamiento a las Fuerzas Armadas, impulsado por el asesinato de Camilo Catrillanca y la filtración de una locución del Comandante en Jefe del Ejército, en la que reconoce la existencia de oficiales y suboficiales que venden armamento fiscal al narcotráfico y el crimen organizado, el Presidente del Partido Comunista, diputado Guillermo Teillier, integrante de la Comisión de Defensa de la Cámara, entrega una lúcida reflexión acerca de la grave crisis por la que atraviesan las instituciones de la defensa y el orden público. .
El Comandante en Jefe del Ejército, Ricardo Martínez, reconoció que dentro de su institución oficiales y suboficiales compran armamento por la vía legal y luego lo venden a narcotraficantes.
Estas declaraciones fueron difundidas luego que que la máxima autoridad castrense diera una charla a oficiales, en La Escuela Militar, material que se filtró a medios de comunicación, y ha causado sorpresa, conmoción y preocupación.
El solo hecho de que uno de los presentes haya grabado un discurso del Comandante en Jefe, y luego lo haya filtrado a la prensa, revela que la pelea, adentro del Ejército, está a cuchillo.
Al respecto el presidente del Partido Comunista y diputado Guillermo Teillier, quien además integra la Comisión de Defensa de la Cámara, destacó la gravedad del hecho, y que en el Ejército y las Fuerzas Armadas exista corrupción:
“Me parece gravísimo que se encontrara a suboficiales –y se deja trascender que también oficiales– que estarían coludidos en la compra y venta de armas para narcotraficantes, eso es gravísimo. Sabemos lo que ha pasado en otros países cuando se involucra el Ejército en ese tipo de corrupción”.
Agregó que el Comandante en Jefe del Ejército en su última visita a la comisión de la cámara baja, se comprometió a iniciar un proceso de reflexión dentro de la institución, para enfrentar así la corrupción y las responsabilidades en torno a los derechos humanos.
Explicó Teillier:
“El Comandante en Jefe ya había adelantado en la Comisión de Defensa de la Cámara que iniciaría un profundo proceso de reflexión dentro del Ejército, para analizar no sólo los hechos de corrupción, sino también la participación del Ejército en violaciones a los derechos humanos».
En este sentido, el diputado afirmó que las resoluciones de este proceso interno de investigación y reflexión “de concretarse y de ser sinceras, deben ser conocidas y apoyadas por todo el espectro político de la nación, sin ningún tipo de ambigüedades, porque creo también que ya es hora de que se termine la idea de la tuición ideológica que tiene la derecha sobre las fuerzas armadas”.
Luego, sostuvo se debe poner fin a la práctica de dejar en el olvido los hechos delictuales y de violación a los derechos humanos que ha tenido esta institución a través de los años:
“Yo creo que hay que terminar con todo esto que signifique que queden ocultos o en el olvido los hechos delictuales dentro del Ejército, de cualquier naturaleza, de corrupción como de violación a los derechos humanos. Por eso es que hay un proyecto de ley en la Cámara de Diputados, la cual permite que los oficiales, suboficiales en servicio activo puedan hacer denuncias de los actos de corrupción en sus instituciones sin ser castigados”.
Teillier también apuntó a la autonomía del Ejército y las Fuerzas Armadas con respecto a la justicia civil:
“De hace mucho tiempo que nosotros venimos planteando la necesidad de terminar con el monopolio de la justicia militar para tratar los casos de los uniformados, porque creemos que si hay delitos comunes estos deben pasar a la justicia ordinaria”.
Asímismo, manifestó:
La autonomía sin control del Ejército y de las instituciones armadas es una mala consejera, muy grave para las fuerzas armadas y para carabineros que son nuestras dos instituciones armadas, pero es muy complejo y peligroso que se den estos casos de corrupción. Estamos en un momento que se necesita transparencia total en los manejos financieros y administrativos de las Fuerzas Armadas”.
Con respecto a las acciones para prevenir estos hechos delictuales “todo lo logrado hasta ahora y las promesas de terminar con la corrupción han fallado rotundamente y está claro también que dentro del Ejército, porque el propio Comandante en Jefe así lo dice, hay un conjunto de –no sabemos– oficiales, suboficiales que mantienen su postura favorable al golpe de Estado y que son negacionistas y que quedó claro en el homenaje que se le hizo a Miguel Krassnoff en la Escuela Militar del Ejército”.
Finalmente durante la jornada se ha dado a conocer que el Ejército habría denunciado los hechos a la justicia militar y que estarían bajo investigación, pero que la opinión pública y también el ministerio de Defensa ha podido tomar conocimiento de estos delitos sólo gracias a investigaciones periodísticas.
Ejército reconoce 33 sumarios internos por pérdidas de armamento desde 2010
“Tenemos información de que hay oficiales y cuadro permanente que compra armas por la vía legal, que después las dan por perdidas, pero que lo que están haciendo es venderlas a grupos de narcos, de delincuentes. De eso estamos hablando”.
La declaración del comandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, hecha en el marco de una cita con novecientos oficiales de la institución en la Escuela Militar y cuyo audio fue revelado este jueves por The Clinic, desató una tormenta de proporciones, con una reacción desde el ministerio de Defensa exigiendo que se aclaren los casos y el propio Martínez explicando que se refería a hechos antiguos que están bajo investigación.
Los dichos, sin embargo, abrieron una pregunta adicional: ¿qué pasa con las armas perdidas en la institución?
un informe inédito entrega algunas luces. El documento, con fecha 11 de septiembre de este año, es una respuesta al Consejo para la Transparencia ante una presentación hecha por La Tercera en que se solicitaba que se entregara la información solicitada previamente. Y va firmado por el entonces segundo hombre del Ejército, el general John Griffiths, a cargo del Estado Mayor de la institución y quien luego renunció tras ser procesado en la causa que indaga si hubo fraude con fondos destinados a viajes y viáticos en la repartición castrense.
El desglose indica que han existido, a lo menos, 33 sumarios internos entre 2010 y septiembre de este año por pérdida de armamento en la institución, con casos que varían en su dimensión y nivel de sanciones.
Por ejemplo, en varios casos -sobre todo en los primeros años- se aprecia que se abren sumarios por la pérdida de yataganes y pistolas, que son resueltos con observaciones, reprensiones o, lo más frecuente, con una sanción de arresto.
Pero también constan extravíos de armamento de mayor calibre, como fusiles semiautomáticos o subametralladoras. En estos casos, también, las explicaciones varían: mientras algunos aparecen reportados como “robo”, otros simplemente tienen el rótulo de “pérdida”.
En particular, en 2015 aparecen reportados dos pérdidas de fusiles SIG-542 con tiros de guerra incluidos. Un armamento de alto poder de fuego y cuyo uso puede ser complejo.
También aparecen en el listado hechos como pérdidas de material de guerra desde un polvorín -que terminó con funcionarios con licenciamiento del servicio- y, este año, una investigación en curso por un hecho catalogado como “robo”, ocurrido en agosto pasado y que involucra la sustracción de “105 corvos modelo atacameño, 5 yataganes para fusil Mouser y Steyer y 3 machetes de artillería”, según reporta el mismo documento.
Sin embargo, no aparece el hecho aludido por Martínez en su exposición en la Escuela Militar, aunque esto tiene una explicación sencilla y que tiene que ver simplemente con un tema de tiempos: según relató el propio comandante en jefe, el robo -por el cual hay una causa abierta en la Fiscalía Militar y se indaga a cinco suboficiales- fue denunciado a esas instancias el 12 de octubre de este año.
Es decir, un mes después de la respuesta oficial de Griffiths con el resumen de los casos indagados hasta ese momento.
Fuente: La Tercera
General Martínez retrocede después de que Contraloría lo desmintió y se disculpa por palabras «imprudentes» sobre hechos judiciales
El Comandante en Jefe del Ejército, Ricardo Martínez Menanteau leyó una declaración pública en la que reaccionó a la grabación de audio que se filtró a la prensa y en la que se escucha parte de una charla que dio a oficiales en la Escuela Militar. Martinez reconoció, en un entorno privado, que había casos investigandose sobre tráfico de armas desde el Ejército a bandas de narcotraficantes.
Pocas horas después de que la grabación fuera publicada, Martinez fue convocado por el Ministro de Defensa Alberto Espina para dar explicaciones. En ese contexto el general entregó una su versión a la prensa:
«En la reunión sostenida esta mañana con el ministro de Defensa Nacional, me representó que mis palabras fueron imprudentes. Me hago cargo de ello. Y si alguna de mis expresiones fueron asi interpretadas, ofrezco las disculpas correspondientes».
Martínez aclaró que su intervención fue parte de el intento por reforzar «mi política de transparencia, probidad y apego a la disciplina, a raíz de la serie de hechos judiciales y administrativo que han afectado a algunos integrantes del Ejército», dijo, aclarando que fue un encuentro reservado y por eso «utilicé un lenguaje directo y franco», aclarando que no hizo críticas a ninguno de los poderes del Estado.
Martínez precisó que hay una denuncia en la justicia militar contra cinco cabos de una misma unidad por venta irregular de armas, y que la situación «no fue informada porque quedó radicada en los tribunales competentes» y que lo mencionó para «sensibilizar sobre un problema de la mayor gravedad que el Ejército no permite ni tolera».
En la grabación, el general dijo que había pedido a la Contraloría, paralizar una serie de juicios de cuentas contra personal de la institución. Rápidamente desde la institución que encabeza Jorge Bermudez, aclarar0n que en los encuentros entre ambos no hubo ninguna petición al respecto.
Precisamente aclararon que la reunión entre el Contralor y el Comandante en jefe del Ejército, se llevó a cabo el 16 de marzo de este año y duró 30 minutos y fueron saludos protocolares.
No ha habido ninguna solicitud de paralizar juicios de cuenta, de hecho están en curso 10 juicios de cuenta en el Ejército instruidas por la Contraloría.
Con este desmentido a la vista, el Comandante en Jefe del Ejército se vio obligado a aclarar este punto:
«El 16 de marzo se llevó a cabo una reunión con el Contralor General de la República, en ese contexto se analizaron temas institucionales de incumbencia mutua. Este Comandante en Jefe, no ha efectuado ninguna solicitud formal, ni ni informal de paralizar juicios de cuenta. Sin perjuicio de haber enviado por los canales correspondientes todos los antecedentes necesarios para su debida ponderación, en cumplimiento del objetivo de transparencia institucional».
Finalmente Martínez anunció que hoy pondrá a disposición del Ministerio Público la denuncia contra los cinco efectivos que hay en la justicia militar.
Fuente: El Mostrador
Lo que dijo Martínez
Lo que, en rigor dijo el Comandante en Jefe del Ejército, sobre su ahora controvertida reunión con el Contralor, Jorge Bermúdez, el 16 de marzo, en la reunión con los oficiales, es lo siguiente:
─ Estamos haciendo todo lo humanamente posible con la Contraloría General de la República, y en eso me he empleado yo también, para que se entienda el contexto de lo que eran los viajes de la Academia de Guerra y de la Academia Politécnica, de manera tal que no se lleven a cabo o no se realicen estos juicios de cuenta.
El general Martínez lamentó sin embargo que hasta ahora las gestiones no resultaron.
─ Yo lo conversé con el contralor, el contralor entendió las razones, pero parece que alguien se opuso ─ contó a la tropa, preocupada.
Cerrada defensa de las pensiones de las FF.AA.
Uno de los aspectos más polémicos de la locución del general Martínez, y que por por tanto ha sido tan soslayado por el sistema mediático como debatido en redes sociales, dice relación con su cerrada defensa de un privilegio corporativo que en nada condice con en afán de transparencia.
Junto con reconocer que la situación insostenible, aconseja por estrategia, aceptar la prolongación de la carrera militar.
El comandante en jefe del Ejército dijo en la reunión, que debía readecuarse el sistema de pensiones castrenses, el que permite que algunos oficiales reciban pagos por hasta seis millones de pesos mensuales.
«La verdad es que es insostenible un sistema previsional como el que tenemos, no con la realidad del país».
Martínez luego develó a los militares presentes que el gobierno alista un cambio en la previsión castrense, consistente en prolongar la carrera militar, descartando de paso cualquier alza salarial en el corto plazo, como reclamaron algunos presentes.
─ Uno tiene que ser estratega. El bien a cautelar son las pensiones. Las pensiones es algo que hay que cuidar con dientes y muelas, si es necesario alargar la carrera militar, para que prevalezca la esencia de las pensiones nuestras, hay que hacerlo.
La polémica por las jubilaciones castrenses estalló en la agenda pública luego que varios medios revelaron la existencia de pensiones para uniformados por hasta siete millones de pesos mensuales.
En ese contexto, Capredena admitió que pagaba en 2017 tres mil novecientas cincuenta y seis pensiones sobre el límite legal de sesenta unidades de fomento. Es decir, sobre un millón seiscientos mil pesos.
También reconoció la existencia de 327 beneficiarios que reciben legalmente de dos a cuatro pensiones simultáneas, algo imposible en el sistema privado de pensiones, en el que están incluidos los trabajadores civiles.
En total, este último colectivo acapara ingresos por diez mil millones de pesos anuales (unos quince millones de dólares), según Capredena, institución que paga pensiones a ex funcionarios de las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Defensa.
Fuente: The Clinic