La pobreza en América Latina persiste como un fenómeno estructural que la caracteriza. Esta dura conclusión se desprende del estudio Panorama Social de América Latina 2014, dado a conocer por CEPAL. Allí se estampa además que, pese al crecimiento económico, el 28% de la población de la región se encuentra en la línea de la pobreza, cifra que no ha cambiado en los últimos dos años. Entre 2005 y 2012 la incidencia de la pobreza disminuyó en 17 países, de 39% a 28% y ahí se estancó.
Durante 2014 la región se benefició de la recuperación económica mundial y mantuvo un crecimiento de 2,5%, superior a la media mundial de 2,2%. Sin embargo, la Cepal ha reconocido que este impulso poco ha ayudado a combatir la pobreza.“La recuperación de la crisis financiera internacional no parece haber sido aprovechada suficientemente para el fortalecimiento de políticas de protección social que disminuyan la vulnerabilidad frente a los ciclos económicos”, indica el informe. Además, el estudio señala que la tasa de inflación de la región aumentó del 5,3% al 6,8%, debido principalmente al alza de los niveles de los precios en Venezuela.
Las proyecciones de la Cepal indican que en América Latina 167 millones de personas viven en la pobreza, de ellas 71 millones lo hacen en la indigencia. Aunque el porcentaje de pobreza se ha mantenido igual en los últimos tres años, el informe señala que el crecimiento demográfico “se traduciría en un aumento en números absolutos” de pobres en la región.
A pesar de que Latinoamérica no mostró notables progresos, al menos cinco países en 2013 experimentaron la disminución de la pobreza. Paraguay (de 49,6% en 2011 a 40,7% en 2013), El Salvador (45,3% en 2012 a 40,9% en 2013), Colombia (32,9% en 2012 a 30,7% en 2013), Perú (25,8% en 2012 a 23,9% en 2013) y Chile (10,9% en 2011 a 7,8% en 2013).
El informe llama la atención sobre el hecho que los jóvenes y las mujeres son los sectores más rezagados y ha recomendado que sean atendidos con políticas públicas focalizadas en ellos.
Al comentar la caida del gasto público destinado a políticas sociales, la Cepal señala que después de las crisis de 2008, los gobiernos de la región impulsaron los recursos destinados a combatir la pobreza, sin embargo, entre 2012 y 2013 se ha notado una “desaceleración del crecimiento del gasto social”. “Ahora, en un escenario de posible reducción de los recursos fiscales disponibles, se requieren mayores esfuerzos para apuntalar dichas políticas, generando bases sólidas con el fin de cumplir los compromisos de la agenda de desarrollo post 2015”, ha indicado Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal.
El estudio de la Cepal muestra que México es uno de los tres países con el menor porcentaje de disminución de la pobreza, junto con Honduras y El Salvador. La pobreza multidimensional en México entre 2004 y 2012, apunta el informe, tuvo un descenso de 43% a 41%.
La Comisión ha apuntado que una de las razones por las que México no ha logrado disminuir sus índices de pobreza es el corto crecimiento del salario mínimo. “Con la excepción de la República Bolivariana de Venezuela, la tendencia general de los salarios medios ha sido de crecimiento real, aunque muy modesto en los casos de México y de Nicaragua”, señala el informe. La región tuvo un crecimiento real de los salarios de 2,2% en el último año.
