Sucedió fatalmente como él mismo habría predicho: todavía no se enfriaba el cuerpo de Patricio Manns, cuando se desató una frenética competencia de halagos y reconocimientos, tan esquivos y mezquinos mientras vivió.
Compartió así el destino de tanbtos grandes artistas chilenos, que obtuvieron el reconocimiento del país oficial únicamente después de muertos, casos de Gabriela Mistral, Violeta Parra, Pablo de Rokha, Oscar Castro y Roberto Bolaño, entre muchos otros.
Como dijo cierta poeta, «el dolor ya está con su dolora, el ruiseñor con su ruiseñora. Hoy ha fallecido Patricio Manns»Q.
Lo hizo en la mañana del 25 de septiembre, a los 83 años, en tranquilidad, rodeado de su familia inmediata.
Lo sobrevive un legado inmenso, casi inconmensurable, desde luego soslayado por la academia oficial
Un atisbo de ello se puede encontrar el la presentación que hizo su amigo, el poeta Mauricio Redolés, con motivo de su postulación al Premio Nacional de Literatura.
Sin embargo, Manns puede partir tranquilo.
Sea camino a Tiltil o arriba en la cordillera, o donde qiera que sea, siempre habrá un pueblo que cantará sus canciones o leerá cualquier pieza de su impresionante obra literaria.
Presentación de la postulación de Patricio Manns De Folliot al Premio Nacional de Literatura
por Mauricio Redolés
Patricio Manns es una figura fundamental de las artes nacionales. Desde la década del 60 su nombre se asocia al nacimiento en Chile del género de la cantautoría, el Neofolklore y la Nueva Canción Chilena, y recientemente, al bolero. Además de ello, Manns ha desarrollado una prolífica carrera como poeta, novelista, autor teatral y ensayista .
La biografía de Patricio Manns parece en sí misma una novela. Nació en la localidad de Nacimiento, en la antigua provincia de Bío-Bío, el 3 de agosto de 1937. Su padre había sido pianista de jazz , y su madre, concertista en piano; pero ninguno de los dos se dedicaba profesionalmente a la música, y viajaban por Chile a instancias de un programa de los gobiernos radicales, manteniendo escuelas en zonas aisladas del sur de Chile para niños en situación irregular. Por eso la infancia de Manns transcurrió en distintas localidades, sobre todo en Chiloé. Según el mismo ha contado, conoció el pavimento recién cuando era un adolescente.
En su juventud desempeña los más diversos oficios: capataz de obras, minero del carbón en Lota, reportero para el diario La Patria en Concepción y formador de la radio de la oficina salitrera de María Elena, en pleno desierto de Atacama. A principios de los años 60 se traslada a Santiago en donde continuó con su labor periodística. Sin embargo, la figuración pública es primero en el plano musical, con la llegada del reconocimiento masivo de su composición “Arriba en la cordillera” (1965). La figuración pública en el plano literario se da a través del texto “De noche sobre el rastro” (1967) que fue Premio Alerce de la Sociedad de Escritores de Chile (SECH) y de la Universidad de Chile. Unos años más tarde, como voz promisoria de su generación, recibe el Premio Municipal de literatura de Santiago, con su obra “Buenas noches los pastores” (1973).
Durante el Gobierno de Salvador Allende publica solamente en el año 1972 con la Editorial Quimantú y con tirajes de hasta 50.000 ejemplares los libros: “Las Grandes Masacres”, “Los Terremotos Chilenos” en dos volúmenes, “Grandes Deportistas”, ”Breve Síntesis del Movimiento Obrero”. También en 1972, con la Editorial Ediciones Universitarias de Valparaíso (y reeditada el 2001 por Javier Vergara Ediciones) publica “La Revolución de la Escuadra”.
Luego del golpe de Estado , se exilia en Francia. Desde ese período, ha desarrollado una dilatada obra como novelista, ensayista y poeta, creando piezas también para teatro y cine.
Durante su exilio en Francia escribió “Actas de Marusia” (1974), “Francisco Coloane, el solitario narrador del Fiordo” publicado por Casa de las Américas, La Habana, Cuba (1975). La biografía “Violeta Parra, la guitarra indócil” (1977), publicada primero en francés y luego en castellano, “Actas del Alto Biobío” (1985), “Notas sobre el patriota Manuel Rodríguez Erdoíza” (1986), “Actas de Muerteputa” (1988), “De repente los lugares desaparecen” (1992).
En 1995 publica el poemario “Memorial de Bonampak”, que resume los pesares del pueblo Maya, y que es reeditado en el 2004 por Brosquil de Madrid.
Entre sus obras más recientes destacan “El corazón a contraluz”, aparecido simultáneamente en Argentina y Francia (1996), “Memorial de la noche” (1998), ”Chile, una dictadura militar permanente (1811-1999), “El desorden en un cuerno de niebla” (1999), “La tumba del zambullidor”, obra que obtuvo el Premio del Consejo Nacional del Libro y la Lectura en el año 2001.
En octubre del año 2000 su obra “La lámpara en la tierra”, representa a Francia en el Festival de teatro de Berlín, presentándose en los mejores teatros de Francia.
En el año 2004 publica la novela “La vida privada de Emile Dubois”, editado por Alfaguara, “Cantología” (los textos de todas sus canciones) editado por Catalonia y “Quatre saisons en Patagonie”, impreso por la prestigiosa casa editorial francesa, Gallimard. En enero del 2005 obtiene el Premio Municipal de Literatura de Valparaíso por el conjunto de su obra literaria. Y un año más tarde, en el mes de agosto del 2006 publica su novela “Distintos instantes del Reino” publicado por Editorial Alfaguara.
En noviembre del 2010 publica su novela “El lento silbido de los sables”, siendo reeditada en noviembre del 2012. En noviembre del 2012 su novela “El corazón a contraluz” es editada por primera vez en Chile y se publica la tercera edición de “Cantología”, ambas por Editorial Catalonia. Un año después, en noviembre del 2013 se publica su novela “La conjetura escita”, publicado por Catalonia. El 2014 publica “Música prohibida” y “Los dolores del miembro fantasma” publicado por Lom Ediciones.
La obra poética de Patricio Manns se encuentra diseminada fundamentalmente en canciones en forma de ediciones fonográficas, tanto de él, como de otros y otras intérpretes.
OBRA DISCOGRÁFICA DE PATRICIO MANNS
-Entre Mar y Cordillera. Sello Demon. Chile.1966.
-El Sueño Americano. Sello Arena. Chile. 1967.
-El Folklore no ha muerto mí! Sello C.B.S. Chile.1968.
-La Hora Final. Sello C.B.S. Chile.1969.
-Patricio Manns. Sello Phillips. Chile. 1971.
-Canción Sin Límites. Sello Alerce. Chile/Sello Chant du Monde. Francia/Sello Egrem. Cuba. 1977.
– Con la Razón y la Fuerza. Sello Alerce. Chile/Sello Fedisco. Ecuador/Sello Movie Play. España, 1982.
-La Muerte no va Conmigo. Sello Alerce. Chile, 1986.
-Porque te Amé. Sello Alerce. Chile, 1998.
-Allende. 2003. Sello Alerce. Chile, 2003.
-La Tierra Entera. Sello Alerce. Chile, 2010.
-La Emoción de Vivir. Sello J.C.M. Chile,2016.
También, de acuerdo con registros de la Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales, canciones de Patricio Manns han sido grabados en Chile y el extranjero por 578 intérpretes (solistas, grupos musicales, coros, etc.), entre los cuales se cuentan: Inti-Illimani, Quilapayún, Huasos de Algarrobal, Aquelarre, Charo Cofré, Ginette Acevedo, Gloria Simonetti, Los Huasos Quincheros, Illapu, Los Cuatro Cuartos, Las Cuatro Brujas, Tito Fernández, Conjunto del Bafochi (Ballet Folclórico de Chile).
Y en el rock chileno han hecho versiones de sus temas Los Miserables y Los Bunkers. En el extranjero, solamente por mencionar Argentina, han grabado canciones de Patricio Mans: Los Tucu Tucu, César Isella, Mercedes Sosa, Teresa Parodi y Soledad Pastorutti.
La canción como expresión de la música popular no es bien mirada por los que podrían ser denominados representantes de la “alta cultura”. Así ocurre tanto en la relación de la música docta con la música popular, como en la poesía, y las letras de canciones. Incluso alguna vez escuché decir de las letras de tango, eran la “poesía de los pobres”.
Así planteadas las cosas, el Premio Nobel de Literatura a Bob Dylan hace tres años es un golpe de cátedra de la Academia Sueca a la tradición literaria. Tanto así, que según el diario The New York Times, este premio “ha redefinido los límites de la literatura”.
¿Quién podría negar la importancia y el valor de la obra literaria de Violeta Parra? Pienso que es necesario superar esa falsa dicotomía entre “alta cultura” y cultura popular. Y creo que una buena forma de hacerlo es premiando a Patricio Manns, el mayor poeta de la canción chilena, y uno de los principales de la canción hispanoamericano con el Premio Nacional de Literatura.
De la canción “Arriba en la Cordillera”, Nicanor Parra dijo: “Ah, esas se hacen una vez a las quinientas”. Por otra parte, Pablo Neruda dijo alguna vez al escuchar “Valdivia en la Niebla”. “No sabía que la Nueva Canción Chilena había llegado tan lejos”.
La obra de Patricio Manns además ha contado con la entusiasta adhesión de grandes personalidades entre otras tales como Violeta Parra, Ernesto Sábato, Carlos Droguette, Fernando Alegría, José Miguel Varas, Volodia Teitelboim y Jaime Concha.
Por otra parte, Raúl Zurita afirma: “Escribir sobre Patricio Manns, es escribir sobre la figura cultural viva más extraordinaria de mi país. Si uno ama a su país -con todo su dolor- tendrá que amar a Patricio Manns. Él ha fundido la poesía, el canto y el amor en la forma más alta de poesía que yo ahora conozca. Esta producción es ya de otro mundo”.
Y entre los más jóvenes, Alejandro Zambra ha dicho “[Sus canciones) parecen haber estado ahí desde siempre: las escuchamos, de niños, cinco o cien veces antes de saber que eran suyas. Y es que ya no son solamente suyas, porque sentimos que nos pertenecen, que le pertenecen a Chile.”
Habría que agregar las sutiles y complejas relaciones entre la obra de Pablo Neruda y Patricio Manns, subrayadas por el académico de la Universidad de Oxford Robert Pring-Mill. Cito a Pring-Mill:
“Yo estoy aquí para contar la historia” nos dijo Neruda en “Amor América” (primer poema de “La Lámpara en la tierra”), pero todos sabemos que Neruda la cuenta de un modo muy sui géneris, y Manns se le parece mucho en su visión poética de las supuestas “realidades” de una “historia” que queda mitificada y manipulada en búsqueda de aquella verdad superior, de modo que las mentiras aparentes de la ficción, simultánea, ocultan y translucen su mensaje ulterior. (Prólogo de Robert Pring-Mill a Memorial de Bonampak de Patricio Manns).
He estado en innumerables oportunidades en gimnasios, teatros, bares, cafés, repletos en Santiago, Valparaíso, Vallenar y Londres (entre los muchos lugares donde se ha presentado Patricio Manns), y he visto multitudes de mujeres y hombres, estremecidas y estremecidos cantar con los ojos humedecidos las canciones de Patricio Manns.
Y esas canciones son poemas. ¿Qué otro u otra poeta en Chile puede decir que sus poemas son coreados por profesoras, obreros, doctoras, sociólogos, campesinas, enfermeros, diseñadoras gráficas, sicólogos, periodistas, estudiantes, actrices, operarias textiles, trabajadores temporeros, etcétera, etcétera? Es decir ¿quién se puede parar en un escenario frente a un micrófono y decir un verso, un solo verso, y encontrar como una ola el rugido de cientos y miles de voces de mujeres y hombres que responden con el verso que sigue y así, completar todo el poema en la emoción de haberlo dicho con el autor?
Es una experiencia emocionante que sólo un poeta en Chile logra. Ese poeta se llama Patricio Manns.
El 12 de julio recién pasado inicié en el sitio change.org una petición dirigida a los y las miembros del jurado que dirimirá el Premio Nacional de Literatura de este año, solicitándole que éste sea concedido a Patricio Manns.Hoy, lunes10 de agosto, antes de que se cumpla un mes del inicio de la petición se han reunido más de diez mil firmas.
Si no se le entrega el Premio Nacional de Literatura a Patricio Manns este año 2020, cuando este agosto él ha cumplido 83 años de creativa vida, se va a cometer una gran injusticia solo comparable a la ausencia de Premio Nacional de Literatura a Vicente Huidobro o a María Luisa Bombal.
Espero que no sea el caso de Patricio Manns.
Santiago de Chile
Lunes 10 de agosto del año 2020.