El Mercurio, en un breve artículo se hace eco de un «trabajo» realizado por la entidad de la UC que preside Felipe Larrain. En él se afirma que la disminución de la construcción, en los 4 años de Bachelet habría disminuido los ingresos tributarios en unos 8 mil millones de dols. Exactamente lo que se perseguia tributar con la nueva ley de tributación.
Felipe Larrain, una persona seria y a quien deseamos el mejor de los éxitos, deja la academia para situarse en un estéril debate político.
Da publicidad a un mero artificio, a una especulación, llevando a cabo cálculos torticeros, alejados del método. Estas afirmaciones no las habíamos escuchado nunca durante el gobierno de Bachelet.
Chile no vive aislado del mundo. Un mundo que vivió durante el periodo de Bachelet una de las más terribles crisis desde 1929. USA crecía un 1%, bajaba la producción en China e India, disminuía el precio del cobre, un mineral que según FT irá a la baja; por supuesto la tributación a las sociedades en Chile era una de las más bajas del mundo.
¿Qué querían? ¿que el pais siguiera siendo un paraiso fiscal, que lo sigue siendo?, ¿que se sigan llevando las multinacionales las ganancias a manos llenas para meterlas en capitales especulativos?
Es de desear, por el país que Felipe Larrain tenga suerte.
Pero hay varias cuestiones presentes que según los principales economistas mundiales preocupan: el violento desplome de Wall Street y todas las bolsas del mundo, que puede anticipar un pinchamiento de la burbuja y una nueva recesión; el alza del dolar que repercutirá en los hogares de Chile;el aumento de los precios de los bonos del tesoro, que aumentarían también los bonos de Chile en USA, más los 60 puntos pactados; el aumento de la producción mundial de cobre por el Congo y las multinacionales que alli lo explotan.
Y por otra parte, los graves desequilibrios políticos y geoestratégicos generados en Medio Oriente, China, India, USA y Corea.
Cuidado Ministro, vienen curvas.
Fuente: La Hora