Son increíbles. Con la misma rabia que se ensañan contra Cuba, los cabezones de la CIA tienen ya preparada su “delegación venezolana” a la Cumbre de las Américas convocada por la OEA en Panamá. Ya han seleccionado elementos de su fauna golpista de Miami como de Caracas para dar un show antichavista en este evento donde la cobertura mediática está ya pre-arreglada.
Esta alta presencia de opositores venezolanos en los eventos paralelos a la Cumbre, evidencia la encerrona prevista contra Venezuela, con el objetivo de legitimar las acciones de desestabilización en el país sudamericano y fundamentar la matriz de la ingobernabilidad que supuestamente existe en Venezuela.
Aquí, en exclusiva, algunos de los energúmenos que conformarán esta “performance” destinada, no a Venezuela sino al aparato de desinformación conformado por la inteligencia estadounidense con su red mundial de la “gran” prensa comercial:
1- Carlos Ponce Silen, quien asistirá en representación de la ONG venezolana Asociación Civil Consorcio, Desarrollo y Justicia, pero en realidad se desempeña y recibe grandes sumas de dinero por su dirección en la Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia” (RELIAL), quien además de ser financiada abiertamente por la Nacional Endowment for Democracy (NED) – conocida fachada de la CIA – mantiene estrechos vínculos con todo el conglomerado de agencias, institutos y centros que se encargan de fomentar la subversión en América Latina, principalmente en aquellos países que sus gobiernos no responden a los intereses imperialistas, como Cuba, Venezuela, Bolivia, Ecuador, Argentina, Brasil.
Ponce Silen, como acérrimo anti latinoamericanista, mantiene fluidas relaciones con miembros de la mafia anti cubana de Miami, sus principales contactos se encuentran entre los miembros de Fundación Nacional Cubano Americana protagonista de numerosos actos de terrorismo contra Cuba.
Parte de sus funciones están dirigidas a organizar reuniones en diferentes países de la región, donde consideren que existen situaciones de conflicto además de proponerse como observadores para los procesos electorales en el área.
Con la NED articula trabajos para desarrollar acciones que frenen y corten el avance de los Procesos Sociales en América Latina y mantengan bajo control de los Estados Unidos sus intereses alrededor del mundo. En este sentido, las coordinaciones entre Ponce y la agencia norteamericana ilustran el trabajo conjunto para fomentar la subversión contra la Revolución Bolivariana.
2- Ernesto H. Tinoco Egui, opositor venezolano radicado en Argentina. Igualmente que Ponce Silen asistirá en representación de la ONG venezolana Asociación Civil Consorcio, Desarrollo y Justicia.
Tinoco Egui, se auto titula coordinador en Argentina del partido opositor venezolano “Voluntad Popular” (mismo partido que dirige Leopoldo López y que fue el principal protagonista de los sucesos de febrero 2014 en Venezuela); y el responsable de articular y promover en ese país las principales manifestaciones violentas contra la sede de Venezuela en Buenos Aires.
Egui reconoce abiertamente su simpatía y vinculación con el Partido Pro y los planes de desestabilización que se llevan a cabo contra el gobierno de Cristina Fernández.
3- Integra la lista la opositora venezolana Rocío San Miguel, quien desde la misma Venezuela mantiene contactes despachos con los funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en Caracas.
Vinculada abiertamente a los distintos programas de la USAID, mediante los cuales canaliza los fondos que destina el Departamento de Estados de los EEUU para la oposición venezolana.
Sus funciones como periodista especializada en temas militares, le sirven de fachada para aportar informaciones manipuladas sobre este sector venezolano que tanto la prensa internacional y la derecha venezolana empleada para desacreditar el papel de Nicolás Maduro en su relación con las Fuerzas Armadas Bolivarianas de ese país.
Actualmente San Miguel, preside además la ONG “Control Ciudadano”, activa opositora al gobierno de Nicolás Maduro. Por la forma en que despliega su actividad opositora, las matrices de opinión manipulada que trabaja en la prensa y su vínculos con las instituciones norteamericanas en Venezuela, Rocío San Miguel está considerada como una agente de los SEN, y eventualmente también del CNI español.
4- Estará presente la opositora Aixa Auristela Armas Arizaleta, miembro de la ONG Consorcio Desarrollo y Justicia y profesora de la Universidad Simón Bolívar.
Según colegas venezolanos, Aixa Armas es una de las principales manipuladoras de la juventud opositora venezolana contra el gobierno de Maduro y promotora de las guarimbas de febrero 2014 y mantiene un frecuente contacto con funcionarios de la Embajada de Estados Unidos en Caracas.
5- Participa también, en representación de la ONG opositora venezolana “Instituto Venezolano de Estudios Sociales y Políticos (INVESP)” el opositor venezolano Carlos Correa, quien funge como director de “Espacio Público” ONG subversiva y contrarrevolucionaria, financiada por Estados Unidos, que plantea defender la libertad de expresión.
Correa mantiene estrechos lazos de trabajo con la representación de la National Endowment for Democracy (NED). Y documentos desclasificados de la FOIA (por sus siglas en ingles) reflejan que fondos de más de 4 millones de dólares, fueron destinados a medios y periodistas opositores venezolanos entre el 2008 y el 2010, y que el principal canal para la recepción de los mismos fueron las ONG “Espacio Publico” e “Instituto de Prensa y Sociedad” (IPYS).
Dicho financiamiento procedía directamente del Departamento de Estado a través de sus tres principales agencias la Fundación Panamericana para el Desarrollo (PADF por sus siglas en ingles), Freedom House y la Agencia del Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID).
Lo que también es importante saber
Estarán presentes en función de la campaña contra Venezuela otras organizaciones subversivas venezolanas, como “Súmate” (dirigida por la opositora radical venezolana María Corina Machado), el “Instituto de Prensa y Sociedad” (IPSY) y “PROVEA”, todas denunciadas reiteradamente como muy vinculadas a Washington, quien les suministra el financiamiento y las directrices para el trabajo subversivo en Venezuela.
La OEA la ha proporcionado “visa abierta” para la Cumbre de las Américas, a la mayoría de las organizaciones opositoras y subversivas de Venezuela, para oxigenar la campaña de descrédito contra Venezuela que ha implementando EEUU como parte de su estrategia contra el gobierno del Presidente Nicolás Maduro.
EEUU, financia abiertamente a ONG, partidos y centros de estudio opositores a los gobiernos progresistas con el fin de promover la subversión y desestabilización en América Latina.
La oposición venezolana en convenio con la ultraderecha regional y los Estados Unidos, han implementado toda una estrategia para utilizar el escenario de la Cumbre en Panamá para oxigenar la guerra sucia y mediática contra el gobierno del Presidente Maduro.
La Cumbre de Panamá está a punto de empezar y será por cierto el teatro de una fuerte confrontación entre la mafia antichavista y los comandos de un Departamento de Estado, visiblemente panicado por el papel que le toca frente a las fuerzas de la soberanía latinoamericana que han manifestado su voluntad de convertir el evento en demostración de unidad y de solidaridad.
Por ello llamamos a todos los chilenos y organismos sociales a pronunciarse en solidaridad con los pueblo en particular con Cuba y Venezuela. El imperio viene con todo en contra de. pueblos de Argentina, Brasil, Ecuador, Bolivia y Nicaragua, países que luchan en contra la agresion yanqui, en defensa de su soberania.
Exijamos el retiro de las bases militares yanqui en America Latina.
Desde hace años organizaciones sociales y civiles de América Latina y el Caribe han pedido a la Unasur que se retiren las bases militares de Estados Unidos del continente, como mecanismo de respeto a la autonomía y soberanía de los países.
Sin embargo, ahora es el secretario general de la Unasur, Ernesto Samper, el que ratifica la iniciativa para ser discutida en la próxima Cumbre de las Américas, que realizará en Panamá el 10 y 11 de abril.
Actualmente son más de diez las bases militares estadounidenses reconocidas en el territorio latinoamericano, de las que destacan siete instaladas en Colombia.
El argumento por parte del representante de Unasur es el cambio de contexto histórico. El ex presidente colombiano sostuvo que el establecimiento de bases militares norteamericanas en países de la región pertenece a la época de la Guerra Fría.
Por su parte, el diputado comunista Hugo Gutiérrez, quien fue uno de los parlamentarios que en 2012 se opusieron a la instalación de una base militar estadounidense en el Fuerte Aguayo de Concón, coincide en que Unasur está haciendo un reclamo de independencia continental acorde a los tiempos:
“Este país ha ejercido un rol imperial sobre nuestro continente y hoy ya no hay consenso para que lo siga teniendo. América Latina busca ser un continente soberano y sus políticas no estén determinadas por lo que Estados Unidos resuelve al interior de su país, sino que por el contrario, somos suficientemente maduros para determinar si queremos o no bases norteamericanas en nuestro continente”, señaló.
Contextualmente, el secretario de Unasur además ha expresado su rechazo a las recientes medidas de Estados Unidos contra Venezuela, que incluyen remoción de visas y bloqueo económico a funcionarios y ex funcionarios del presidente Nicolás Maduro.
“En un mundo globalizado como el actual uno no puede pedir reglas de juego globales para la economía y mantener el unilateralismo para la política”, manifestó.
En ese sentido, el académico del Instituto de Estudios Internacionales (IEI) de la Universidad de Chile, Gilberto Aranda, indicó que Estados Unidos ha fortalecido su presencia en el área latinoamericana en los últimos meses, luego de estar concentrado en focos extra hemisféricos, lo que explicaría el pronunciamiento de Unasur.
“Está muy interesado Estados Unidos en la competencia con China, porque este último está entrando en países de Sudamérica como un socio comercial privilegiado. Entonces Estados Unidos está pensando para el próximo año cómo responder al desafío comercial chino, potenciando su presencia militar, comercial y política en la región latinoamericana”, afirmó.
Aranda agregó que el afán de aproximación de Estados Unidos se refleja en el reciente anuncio de relaciones diplomáticas con Cuba.
En cambio, el profesor especialista en geopolítica y ciencias militares de la Universidad del Desarrollo, Jorge Sanz, recordó que al cambiar la amenaza, las bases militares estadounidenses comenzaron a encargarse de la lucha contra el narcotráfico en Latinoamérica y hoy Unasur se siente preparada para cumplir esa tarea.
“Unasur debiese empezar a negociar con Estados Unidos, no una salida ignominiosa de las bases, sino que una salida correcta. Es decir, que se convenga que las bases militares que están instaladas sigan cumpliendo determinadas y específicas tareas, ya que el organismo internacional no le puede imponer a los Estados lo que hagan o no, porque éstos son soberanos”, dijo.
En ese sentido, Sanz planteó que los países tendrán que reaccionar de acuerdo a sus propios intereses, más allá de las diferencias políticas e ideológicas. Es más, con la globalización, la política y la economía se deliberan por separado y ejemplo de ello sería Venezuela, que comercialmente le vende petróleo a Estados Unidos aunque es su adversario político, expuso el experto.
Con todo, el 10 y 11 de abril los presidentes deberán dialogar sobre este tema en la Cumbre de las Américas.