La crisis política del Perú alcanzó un nivel tal, que la Presidenta, Dina Boluarte fue destituida por “incapacidad moral permanente”, en votación unánime del Congreso, sin que se alzara una sola voz en su defensa.
En su reemplazo, fue elegido José Jirí, el prototipo del político oportunista, que sabe estar en el lugar indicado, en el momento adecuado.
1. Crisis política e institucional
El Congreso de Perú votó unánimemente (124 votos a favor, 0 en contra) para destituir a la presidenta Dina Boluarte por “incapacidad moral permanente”.
La destitución sucede en un contexto de gran descontento ciudadano por el aumento de la violencia, la inseguridad y una percepción de incapacidad del Ejecutivo para gobernar.
Boluarte fue la sexta presidenta consecutiva en no completar su periodo desde 2016.
Durante su mandato, su aprobación cayó a niveles extremadamente bajos: alrededor del 2 % en 2025.
Además, su gestión fue fuertemente rechazada por acusaciones de corrupción (incluyendo el llamado “Rolexgate” por una colección de relojes de lujo) y por el manejo autoritario o represivo frente a protestas.
Nuevo presidente interino: José Jerí
Inmediatamente después de la vacancia de Boluarte, José Jerí, presidente del Congreso, fue juramentado como nuevo presidente interino de Perú.
Jerí proviene del partido “Somos Perú” y ha adoptado un discurso de “guerra contra el crimen” como prioridad de su gobierno.
Se espera que anuncie un gabinete de 19 ministros.
Su mandato es transitorio, hasta las elecciones presidenciales previstas para abril de 2026.
Protestas, movilizaciones y conflictos regionales
Desde mediados de septiembre, protestas convocadas por jóvenes (“Generación Z”) y otros sectores exigen la salida de Boluarte, la reforma del sistema de pensiones y el cierre del
En la región de Cajamarca se declaró un paro regional indefinido desde el 6 de octubre, con bloqueos de carreteras exigiendo terminar obras viales abandonadas, mejorar infraestructura y combatir la minería ilegal.
Ese paro en Cajamarca fue levantado tras la vacancia de Boluarte, aunque algunas vías permanecen cerradas.
2. Seguridad, violencia y minería ilegal
Perú enfrenta una crisis de seguridad grave. En los primeros ocho meses de 2025, se reportaron más de 6.000 homicidios y un aumento sustancial de casos de extorsión.
Hace poco ocurrió un tiroteo durante un concierto en Lima (el grupo de música cumbia “Agua Marina”), lo que alimentó la indignación pública.
La minería ilegal en la Amazonía peruana sigue expandiéndose: un reporte señala que desde 1984 se han deforestado unas 140.000 hectáreas por esta actividad, contaminando ríos con mercurio y afectando comunidades indígenas.
La Comunidad Andina ha instado al Perú a reformar leyes, confiscar maquinaria ilegal y frenar el tráfico de mercurio.
En Pataz, región con fuerte actividad minera, se denunció el asesinato de 13 mineros (empleados de seguridad de una empresa) por grupos criminales, lo que muestra el grado de dominio que algunas bandas han tomado sobre zonas mineras.
3. Economía y factores estructurales
A pesar de la inestabilidad política, muchos inversores apuestan a que la economía peruana resistirá.
Algunos factores que ayudan a mantener la confianza son:
• Un banco central con autonomía.
• Reservas internacionales relativamente sólidas.
• Dependencia del país de las exportaciones mineras (cobre, oro, plata).
Pero estos elementos no eliminan los riesgos: la prolongación del caos político puede afectar la inversión extranjera, generar retrasos en proyectos y elevar la percepción de riesgo-país.
En el ámbito agrícola, el gobierno anterior había comprometido unos USD 24 mil millones para proyectos de irrigación para expandir la frontera agrícola en uno de los mejores esfuerzos de diversificación productiva del país.
Escenarios posibles
Escenario relativamente moderado: si Jerí logra contener la violencia, formar un gabinete aceptable y coordinar medidas legislativas mínimas, puede estabilizar la situación hasta las elecciones de 2026.
Escenario de mayor conflicto: si no logra establecer consenso político o si las protestas crecen, puede profundizarse la crisis institucional y generarse más inestabilidad — con riesgos para la economía.
Escenario reformista: bajo presión social, podría impulsarse una reforma constitucional o cambios estructurales (judicial, electoral, seguridad) como salida a la crisis.
Riesgo de intervención internacional: organismos regionales (como la Comunidad Andina) ya han llamado la atención sobre incumplimientos ambientales. Si el Perú no actúa, podría enfrentar sanciones o litigios.
¿Boluarte será juzgada como Castillo?
Dina Boluarte fue destituida por el Congreso vía figura de “vacancia por incapacidad moral permanente”.
Esa destitución es un proceso político-institucional, no necesariamente penal. Para que sea juzgada en un tribunal penal, debe haber imputaciones específicas (“delitos”) respaldadas por investigación: corrupción, abuso de poder, enriquecimiento ilícito, etc.
Ya hay acusaciones en su contra: por ejemplo, que adquirió bienes de lujo que no coincidirían con sus ingresos (“Rolexgate” y otros señalamientos).
Pero que existan acusaciones no garantiza un juicio penal exitoso. La Fiscalía debe presentar cargos, el sistema judicial debe aceptar la causa, debe haber pruebas, derechos de defensa, etc.
Comparación con Pedro Castillo
Castillo fue sometido a juicio penal por cargos muy concretos: rebelión, abuso de autoridad, perturbación al orden público.
Pero cada caso es diferente: no todos los exmandatarios terminan siendo condenados. Depende del peso de la acusación, el control político del sistema judicial, alianzas partidarias, etc.
Por lo tanto, Boluarte podría enfrentar procesos judiciales (o ya los está enfrentando) en los próximos meses, pero no hay certeza de que termine “como Castillo” (es decir, con condena firme) hasta que el proceso avance.
Semblanza de José Enrique Jerí Oré
José Enrique Jerí Oré nació el 13 de noviembre de 1986, en Lima, Perú.
Estudió Derecho: obtuvo el grado de bachiller en la Universidad Nacional Federico Villarreal (UNFV) en 2014, y luego el título de abogado en la Universidad Inca Garcilaso de la Vega (2015)
Trayectoria política
Jerí es militante del partido Somos Perú desde 2013.
Dentro de Somos Perú ha ocupado cargos internos como:
• Personero legal alterno
• Secretario nacional de juventudes
• Secretario nacional de doctrina, capacitación y formación política
Intentos electorales iniciales:
• En 2013 fue candidato a regidor de la Municipalidad de Lima (revocatoria), sin éxito.
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• En 2014 volvió a postular, también sin llegar a ser elegido.
Ingreso al Congreso (2021–2026):
• En las elecciones de 2021 postuló al Congreso representando Lima por Somos Perú.
• Obtuvo 11.654 votos de preferencia.
Eje Central
• No ganó su escaño de forma directa: ingresó como accesitario tras la inhabilitación del expresidente Martín Vizcarra (quien había sido candidato congresal).
En el Congreso:
• Fue presidente de la Comisión de Presupuesto en el periodo legislativo 2023-2024.
• Actuó como vocero de su bancada.
• En julio de 2025 fue elegido presidente del Congreso para el periodo de sesiones 2025-2026.
Presidencia interina
El 10 de octubre de 2025, tras la vacancia de Dina Boluarte decidida por el Congreso (por “incapacidad moral permanente”), Jerí juramentó como presidente interino del Perú, en virtud de la línea constitucional de sucesión (era presidente del Congreso y no había vicepresidentes activos).
Al asumir, prometió formar un “gobierno de transición, empatía y reconciliación nacional” y declaró que el país debe “declarar guerra al crimen”.
Controversias y cuestionamientos
Denuncia por agresión sexual / violación (2025): A inicios de 2025, una mujer denunció que Jerí habría abusado sexualmente de ella durante una fiesta de Año Nuevo en Canta, junto con otro individuo.
• El caso llegó a ser admitido por un juzgado de Canta, se dictaron medidas de protección para la denunciante y se ordenó tratamiento psicológico para Jerí.
• Las autoridades de la Fiscalía finalmente archivaron la investigación en agosto de 2025 por falta de pruebas.
Acusación de coima / soborno: Se le ha acusado de haber recibido un pago de 150.000 soles (moneda peruana) para favorecer una obra de irrigación cuando presidía la Comisión de Presupuesto.
• Jerí ha rechazado las acusaciones y ha dicho que colaborará con las investigaciones si corresponde.
Cuestionamientos éticos y estilo: Se le han señalado comentarios anteriores en redes sociales con contenido considerado misógino, y críticas de que su ascenso se debe más a “oportunidades políticas” que a un liderazgo con trayectoria destacada.
Según sus propias declaraciones juradas, el flamante titular del Pais, que apenas superó los 11.000 votos, multiplicó su patrimonio de menos de 100.000 a más de un millón de soles en solo un año.
Información publicada por Contracorriente y El Comercio develó que, en 2021, Jerí registró poco más de S/97 mil en bienes y S/2.700 en otros rubros. Un año después, la cifra saltó a S/891.862 en bienes y S/156.433 en otros activos. La tendencia se mantuvo: para 2023 y 2024, su fortuna superó el millón de soles, entre propiedades, vehículos y rubros adicionales. Este crecimiento tan veloz ha generado cuestionamientos, incluso dentro de círculos políticos poco proclives a la autocrítica.
El caso más comentado es la compra de un departamento de playa en Punta Hermosa, por el que pagó S/210.000 al contado en septiembre de 2024. El propio congresista exhibió cheques y movimientos bancarios, pero el mecanismo del pago, en un periodo donde la normativa contra el lavado de activos exige trazabilidad total, sigue generando suspicacia.







