Hoy, en el Congreso, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, recortó proyección del crecimiento económico en Chile de un 4,8 a un 4,5% para este año, debido a un menor dinamismo en la inversión y a las exportaciones. En rigor, ya no era posible sostener el discurso marketero y triunfalista del Gobierno, más aún cuando viene la discusión de la Ley de Presupuesto, que por supuesto, será «austero».
«Los datos de actividad indican que se mantiene la desaceleración del crecimiento durante el segundo trimestre del año. En ello influyó la moderación de la demanda interna, especialmente la inversión, con una fuerte contribución negativa de la variación de existencias sobre el crecimiento», sostuvo el ministro.
A fines de julio, en su actualización de previsiones, el Gobierno ya había bajado la estimación para el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) a 4,6 por ciento.
En tanto, para 2014 el secretario de Estado dijo que se prevé una expansión del PIB de 4,9 por ciento, «ubicándose en la parte alta del rango proyectado por el Banco Central en el Informe de Política Monetaria de septiembre».
Además, el ministro Larraín estimó que la demanda interna crecería un 5,5 por ciento este año y la inflación promedio se ubicara en 3 por ciento.
subir Inflación «contenida»
El presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara, prevé que la inflación se mantendrá «contenida» debido a la caída en el precio de las bencinas.
Vergara sostuvo que «la actividad ha continuado creciendo a un ritmo moderado, mientras que la demanda final aún muestra dinamismo».
«Nos ha sorprendido la fortaleza que todavía han mantenido algunos de los componentes de la demanda», destacó.
Ante una eventual reforma tributaria, el presidente del CPC, Andrés Santa Cruz, sostuvo que se debe «ver cuáles son los instrumentos o las medidas tributarias que se piensan tomar al efecto a fin de producir el menor impacto en el crecimiento concordando que hay ciertas demandas en el país que ir poco a poco satisfaciendo».
Una reforma, añadió, debe hacerse «en un marco de prudencia, de seriedad y también de eficiencia y de eficiencia y focalización del gasto».