Esta tarde, en asamblea, los funcionarios del Registro Civil de Santiago aceptaron la última propuesta del Gobierno, por lo que se depondría el paro. Sin embargo, la decisión aún debe ser ratificada por las regiones. Durante la tarde se desarrolló la asamblea de funcionarios en la Región Metropolitana, donde se aceptó la propuesta de Gobierno con votación a mano alzada, por lo que quedan a la espera del resultado de votaciones en cada región para definir la continuidad.
En asamblea general durante este miércoles, los funcionarios del Registro Civil votaron a favor del último ofrecimiento emanado desde el ministerio de Justicia, poniendo fin a un paro que se extiende por 17 días hábiles. Este viernes se reabrirían las oficinas en todo el país.
Con ello, la resolución queda a la espera de la votación en cada región del país para decidir el término de la paralización y el regreso a las labores, que se concretaría este viernes. Dirigente metropolitano declaró que ofrecimiento del Ejecutivo los deja “un poco satisfechos”.
Nelly Díaz, dirigente del Registro Civil, aclaró que “la región Metropolitana es sólo una de las regiones, falta aún conocer el veredicto de las otras 14 regiones, y luego decidiremos los pasos a seguir. Por lo tanto, esto no está definido, estamos a la espera de lo que indican en el resto del país”.
«No podemos decir si este paro se detiene aquí o si las movilizaciones siguen mañana», agregó, advirtiendo que la decisión final podría demorar hasta la medianoche de este miércoles.
Esto surge luego de conversaciones entre el ministerio de Interior y dirigentes del Registro Civil, lo que permitió acercar posiciones, luego que se declarara un punto muerto en las negociaciones. El presidente metropolitano de la Asociación de Funcionarios de Registro Civil, Ángel Vásquez, declaró que la última oferta del Ejecutivo “se acerca bastante a lo que nosotros queríamos, pero por otro lado también nosotros, considerando la contingencia también, cedimos en algunos puntos”.
La última oferta de La Moneda, detalló Díaz, consiste en subir dos grados a todos los funcionarios, situación que comenzaría a regir desde enero de 2014.
