A un mes y medio de su apertura, trabajadores del Hospital El Carmen de Maipú se encuentran movilizados por las malas condiciones en que deben realizar su trabajo. Paramédicos, médicos y administrativos denuncian la falta de insumos en el sector de urgencia, esperas de más de ocho horas para los pacientes y problemas de climatización que causan que la temperatura llegue a los 39 grados en algunas ocasiones.
El dirigente de la Fenats, Álvaro Sandoval, declaró que «el hospital no está en capacidad para darle los servicios del nivel que necesita la gente actualmente acá en Maipú y no tienen recursos humanos suficientes, ni en urgencias ni en el resto del hospital. De los 1.500 cargos que hay disponibles, solamente hay ocupados 650 cargos».
El médico de urgencias Julio Sarmiento comentó que «estamos trabajando en condiciones en las cuales no podemos asegurar la salud de los pacientes ni una atención digna y hoy día nos estamos enfrentando a unas muy malas condiciones laborales sin que haya habido marcha blanca, sin definición de flujos y procesos, sin tener exámenes ni insumos».
El hospital seguirá funcionando con turnos éticos.
Dirigentes denuncian ‘grave crisis’ en concesionado Hospital de Maipú
El directorio de la Federación Metropolitana de Salud, que preside Emilio Guzmán, junto al dirigente Fabián Ponce, acusó «la grave crisis que vive el concesionado Hospital El Carmen de Maipú», que según dijo, «es similar a lo que ocurre en el también concesionado Hospital de La Florida, del mismo consorcio español que el anterior».
A través de un comunicado, Guzmán precisó que el lunes hubo una asamblea ampliada con los distintos estamentos del nuevo centro asistencial de Maipú, en la que «enfermeras, técnicos, administrativos y médicos, denunciaron las funestas consecuencias de un Servicio de Urgencias que no cuenta con fichas clínicas en papel, falta de anexos telefónicos, falta de tubos endo traqueales y falta de drogas vasoactivas, falta de apósitos grandes, inmovilizadores, nebulizadores y branulas, servicios de apoyo clínico y diagnóstico».
Agregó que «no hay premura para resolver, falta de cargas de tubos de oxigeno para los fines de semana, falta de personal médico , personal técnico y auxiliar, todo lo cual prolonga los tiempos de espera de pacientes en Urgencia en un promedio de 11 horas, aproximadamente».
Manifestó que «hoy el estado de tensión entre los funcionarios es máxima y es de alerta movilizadora de no resolverse estos problemas en lo inmediato. Nuestra lucha continúa, la solución no fue ni será la concesión hospitalaria, al contrario, es la forma acelerada de profundizar la privatización de nuestro sistema de salud».