jueves, abril 25, 2024
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Entrevista a Daniel Jadue: Escuelas Abiertas para la Comuna… ¿Sueño o Realidad?

“En los últimos doce años en Recoleta se instaló una política sistemática de destrucción de la educación pública; esto se vio reflejado en una práctica habitual de cierre de cursos de manera arbitraria de tal manera que los colegios fueran paulatinamente bajando sus niveles de matrícula, llegando al extremo que se cerraron cuatro colegios municipales y el Valentín Letelier, el Liceo más emblemático que tiene la comuna lo entregaron con 138 alumnos después de que era un colegio que tenía más de 2.000”.

Este es el diagnóstico inicial que Daniel Jadue, Alcalde de Recoleta, hace de la educación en la comuna, donde desde hace algunos días comenzó a generarse el Proyecto de Diseño e Implementación de la Política de Convivencia Escolar de la Comuna, liderado por un equipo de profesionales del Programa de Educación Continua para el Magisterio (PEC) de la Universidad de Chile.

-¿Cuáles eran los aspectos más conflictivos en educación cuando asumió su mandato?

Tuvimos durante doce años una pérdida de matrícula cercana al 10% anual, jamás se levantaron procesos de selección que fueran objetivos, nunca hubo procesos de evaluación que sirvieran para tomar medidas o acciones correctivas de los problemas y de las tendencias negativas que mostraba el desarrollo educacional. Se puso más énfasis en cómo entraban los alumnos, en cómo salían, por lo tanto en muchos de los colegios se establecieron medidas de selección de alumnos que generaron un sistema relativamente esquizofrénico, en donde si bien se hablaba del rol que los colegios debían jugar en la comunidad, la comunidad siempre estuvo lejos; se hablaba de la necesidad de dar una buena educación y la verdad es que incluso los resultados estándares fueron bajando año a año.

-Usted ha tenido una larga trayectoria pública  y profesional en el ámbito Municipal, ¿había una intención de expulsar más que de atraer hacia la educación pública, en su opinión?

Absolutamente. Se incentivó una relación clientelar con las escuelas y el sistema educacional público fue reservado para los “niños problema” de la comuna, entonces cuando llegaba un buen alumno para una escuela municipal le decían: “No, ¿para qué trae a su hijo para acá?, mejor llévelo a un colegio privado, aquí la educación es mala”. Antes de ser electo, me llamaba poderosamente la atención que la misma municipalidad hablaba mal de su sistema educacional. Te decían: “No, a pesar de todos nuestros esfuerzos, nos ha ido mal; a pesar de que la inversión ha crecido, los resultados van bajando, hemos perdido matrícula y pasamos en paro…”

-¿Sólo fallas administrativas del aparato o más que eso?

También malas prácticas. Se instalaron malas prácticas en la mayoría de los colegios, caracterizadas por procesos de desnaturalización de la persona humana y de deconstrucción de la ética del maestro, llegando a extremos que había directores y equipos directivos que se robaban los postres de las colaciones de los cabros y los vendían en la feria. Vimos aquí cosas patéticas; pero además, una corrupción que no sólo estaba institucionalizada, sino  que además estaba naturalizada porque los que no eran corruptos veían la corrupción y no reaccionaban y, más encima la comunidad que estaba clientilizada era capaz de defender a los corruptos.

-Respecto a la visión, al horizonte de aquí a cuatro años en materia de educación en general, antes de entrar al ámbito de la convivencia en particular.

La discusión del país ha tomado un rumbo que yo en particular no comparto. Yo no soy partidario de la desmunicipalización y lo planteo así de claro. Yo creo que si alguien fuera más honesto en este país todos sabrían que si no fuera por el 10% de la deuda histórica que los del Colegio de Profesores pelean de manera corporativa, la municipalización no estaría en discusión; porque como la discusión ha sido guidada desde la perspectiva de recuperar el status de funcionario público, se ha pensado que desmunicipalizar para volver al Estado les permitiría recuperar la deuda histórica y ese es el eje del discurso.

-¿No es una reivindicación válida?

Hace muchos años que no veo en particular la discusión de la calidad de la educación  que sea la que guíe la toma de decisiones dentro del gremio de los profesores, dentro del sindicato. Y en eso, yo siento que la desmunicipalización nunca se completó y que un gobierno progresista podría completar la desmunicipalización. Las candidaturas que tienen mayor posibilidad se han comprometido con un proceso de desmunicipalización en donde aun no hay claridad acerca del rol que va a jugar el Estado, las municipalidades y los distintos actores intervinientes.

Educación en cuatro palabras

-Más allá de este compromiso que existe en el próximo gobierno del proceso de desmunicipalización, lo más probable es que eso va a llevar mucho tiempo en implementarse. En ese plazo, ¿Cómo se proyecta el trabajo?

Nosotros estamos planteando la transformación de los colegios en centros de desarrollo social y comunitario; que sean instituciones ejes de la reconstrucción de la comunidad en el más amplio sentido de la palabra, basado en el fortalecimiento de la identidad y de la dignidad de las persona en todos su estamentos, jugando un rol en la consolidación y del rescate de la cultura popular y de un imaginario colectivo significativamente distinto al actual.

Yo me imagino que los colegios con este Programa de Escuelas Abiertas, donde la comunidad entra al colegio y el colegio vuelve a ser parte de la comunidad, puede transformar significativamente las relaciones de producción social que se dan en la comunidad. Nos puede ayudar a recuperar el espacio público en términos de espacios de la comunidad y no lo que hay hoy día, que son espacios de nadie. Me imagino también colegios sólidos y potentes, con una inversión y con una renovación de infraestructura.

Creo que debemos avanzar hacia la educación real, lo que significa eliminar todos los colegios unisex y avanzar hacia una educación mixta como un tema general en la comuna, no segmentar la educación y también desarrollar a través de los colegios la imagen –objetivo comunal de la Recoleta multicultural- incorporando desde lo más básico, desde que el conjunto de efemérides que se informan sean todos los días nacionales de las comunidades migrantes aparte de las nacionales, hasta el establecimiento y la incorporación de las experiencias de parte de las comunidades en el quehacer de la comunidad, o sea, yo aspiro a la multiculturalidad como eje central del desarrollo de nuestros colegios. Entonces, creo en la identidad, en la dignidad, en la integración y en la multiculturalidad, esas cuatro palabras por sí solas prefiguran un proyecto educativo.

-Y en el ámbito de la convivencia, pensando en esta política que debiera ser la que guiara, la que orientara el desarrollo de todas las acciones en esta materia, de aquí a los próximos tres años ¿cuáles debieran ser los pilares?

Yo no soporto ni acepto el concepto del bullyng, porque me parece que es un concepto construido desde una sociedad que no quiere hacerse responsable y quiere deslindar responsabilidad sobre lo que traspasa a sus individuos en su proceso de socialización primaria. Yo siempre doy el ejemplo de que un niño que nace al lado de un río, seguramente aprende a nadar antes que a leer; y un niño que nace al frente de una calle con autos, aprende a cruzar la calle mirando para los dos lados antes que a leer.

Y un niño que nace en una sociedad que legitima la violencia como forma de resolver los conflictos y, a través de los medios de comunicación instala la violencia como una actitud legitima desde el Estado y desde la sociedad y entre la sociedad, obviamente genera niños que tienen conductas consistentes con la sociedad en que se desarrollan. Por lo tanto, simplemente aplicar el concepto de bullyng es sencillamente deslindar en los niños una responsabilidad que tiene toda la sociedad.

Con ese ejemplo, yo creo que queda claro cuál es la aspiración: fortalecer la convivencia, es fortalecer la responsabilidad del colectivo sobre todo lo que pasa en la comunidad y tratar de evitar fijar la responsabilidad de lo que acontece dentro de la comunidad en individuos o personas, porque eso es deslindar la responsabilidad del colectivo sobre el acontecer.

-Si uno tuvieran que ir planteándose pequeños pasos, de aquí a tres años, pensando un cambio cultural para alcanzar esta visión…

Para alcanzar una gestión participativa, los pasos son: Primero abrir los colegios a la comunidad,  la segunda fase es meter a la comunidad en los colegios y la tercera es consolidar un modelo de gestión participativa ya maduro, en donde la participación sea siempre temprana y vinculante en términos, no sólo de la detección de los problemas sino que además la búsqueda de las soluciones a los mismos.  

Estamos en la fase de abrir las escuelas a la comunidad, y en un proceso de maduración, en la fase de meter a la comunidad a la escuela. A partir del trabajo que estamos haciendo, la comunidad ha vuelto a sentir una identificación natural con el colegio del barrio, con el liceo del barrio, entonces padres que antes tenían a sus alumnos en el sistema particular subvencionado y que ellos hoy día están estudiando en los liceos municipales, han decidido devolver a sus hijos a los liceos municipales por la experiencia que ellos están tendiendo. Esperamos tener el próximo año un incremento en la matrícula de cerca del 30%, en un contexto en donde todos los años se pierde un 10% de matrícula de promedio en Chile en las escuelas públicas.

(*) Coordinadora de Publicaciones del Programa de Educación Continua para el Magisterio, PEC.

Fuente: Perspectiva

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