¿Que pasa en Chile que ninguno de los candidatos se refiere al tema más gravitante de nuestra economía, como lo es el cobre? ¿ Quienes son los constructores y sostenedores del “Muro del Silencio, que pone en sordina la necesidad de recuperar para Chile, la explotación y goce de nuestra principal riqueza?
Necesitamos que el programa del futuro Gobierno, contenga explícitamente políticas que se ocupen del manejo de nuestro potencial minero, (cobre y litio principalmente). Actualmente el cobre es saqueado por las transnacionales que desde los años 90 se llevan el “tesoro” que nos ha brindado la naturaleza, intensificando la expoliación de nuestro país a niveles indignantes.
A la fortuna colosal que representan los recursos que las transnacionales sacan del país cada año (sin pagar impuestos porque nunca ganan) y cuyos montos son conocidos, hay que agregarle la fortuna, que supera los límites de lo imaginable, que nos roban día a día, disimulada en las múltiples formas ideadas por estos magos de las finanzas para inflar sus costos, ganancias ocultas, que sistemáticamente van a parar a sus empresas relacionadas, todas ellas domiciliadas en los siniestros “paraísos fiscales”.
Ya la ley 18985 dictada por el Presidente Aylwin permite a las transnacionales el abuso tributario con el que se da apariencia legal a la expoliación y todo permite suponer que fue la moneda de cambio para terminar con la Dictadura y llegar Gobierno con el apoyo del Departamento de Estado norteamericano para instaurar la mal llamada transición democrática,
Los mecanismos de la ignominia, están detallados en el libro “Unidad Opositora ¿A qué Precio?”, que constituye una lectura obligada para captar el nivel del saqueo, y tomar conciencia de la urgencia de revertir esta situación.
El robo organizado, a escala gigantesca, no se limita solo a lo ya señalado, capítulo aparte y ya nos faltan adjetivos para llevar a dimensionar su magnitud, lo constituye el despojo que por décadas se viene perpetrando con la fundición en el exterior de los concentrados que permite a la mafia de las cupreras internacionales, llevarse no solo el cobre, declarando leyes inferiores a la realidad, sino que además, en esas tierras llevan metales muchos mas valiosos que el sub declarado contenido de cobre. Oro, plata, molibdeno y una lista de otros 20 metales de alto valor son sacados del país, sin que nuestras autoridades ejerzan el mínimo control que les indica su obligación de hacer cumplir las leyes existentes y su función fiscalizadora.
Estos hechos vergonzosos están documentados en el libro que señalamos y que recomendamos para constatar que realmente ya no queda espacio para el asombro.
A principios de este año, la Cámara de Diputados cerró el paso a la demanda de una investigación judicial que el sentido común hace necesaria, frente a la denuncia formulada por destacados economistas, que dan cuenta que solo en los años 2010, 2011 y 2012 los ejecutivos de CODELCO han “”perdido”” 12 mil millones de dólares, por sus “desafortunadas” ventas en los Mercados a Futuro.
Es casi una obviedad decir que las beneficiarias de estas “pérdidas” han sido las mismas transnacionales que operan en nuestro país, Exon, Xstrata, Anglo American etc etc, y también resulta casi innecesario señalar que estos “torpes” ejecutivos, provienen todos de esas multinacionales y llegan de nuestra principal empresa estatal como quien dice en “comisión de servicios”.
“Unidad Opositora ¿A qué precio?”, es una amplia recuperación de antecedentes que nos deben alertar y sobre todo, más allá de la indignación, hacernos pasar a la acción y buscar los caminos para hacer que la justicia actúe, que haya un Ministro en Visita que desentrañe esta madeja y castigue a los corruptos, que indudablemente están tras las bambalinas de estos hechos.
El tema planteado, es en si mismo amplio y con mil aristas, pero sería incompleto si no se le considera en su vinculación con las comunicaciones, (prensa escrita, radios, TV y los nuevos medios de comunicación social que nos ofrece internet) que es el complemente necesario para perpetuar el latrocinio organizado de “nuestro cobre” y la permanencia de un sistema político dominante a pesar de su contradicción esencial con los intereses de la mayoría ciudadana.
Justamente es el control de las comunicaciones, el que permite al poder económico levantar el muro del silencio frente a aquellos que se empeñan en “decir que el rey va sin camisa”.
Necesitamos una Nueva Ley de Prensa que termine con los monopolios de la información y permita el pluralismo en la oferta informativa para salir de esta situación en que recibimos un mensaje informativo único y distorsionador de la realidad .
En “Unidad Opositora ¿A que Precio”, encontraremos también un análisis detallado del estado actual de las comunicaciones en nuestro país y por lo tanto la justificación de una nueva legislación que consolide los cambios que necesitamos para perfeccionar nuestra todavía balbuceante democracia.
Cobre y Comunicaciones, amplios y complementarios temas que para desgracia nuestra (como país), están cruzados y tramados por una brutal corrupción a pesar que son muchos los que se empeñan en decirnos que en Chile no la hay, pero que el libro comentado nos entrega un categórico mentis a esta afirmación tendenciosa e interesada