En su comparecencia a la Comisión Investigadora sobre Presuntas Irregularidades en la Universidad Arcis, el Ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, le refregó en la cara a los diputados de la UDI algo que saben perfectamente, pero que no quieren reconocer, porque por algo se trata de una campaña infame: que no ha existido desviación de recursos en la Universidad Arcis, ni ha habido lucro y que la delicada situación financiera por la que atraviesa, se debe en buena medida a que esa universidad no ha adoptado la opción de llevar a sus estudiantes y familias a cobranzas judiciales como lo hacen otras universidades privadas. Sin embargo esta noticia brilló por su ausencia en la cobertura del sistema mediático, el mismo que había levantado la chilladera un par de días antes, precisamente por la ausencia del Ministro de Educación.
A la sesión extraordinaria citada por la Comisión Investigadora de la Universidad ARCIS, del día 26 de noviembre, concurrieron el Ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre y la Subsecretaria de la cartera, Valentina Quiroga.
El ministro Eyzaguirre afirmó a la comisión que no ha sostenido reuniones con la universidad ARCIS «ni con trabajadores, sindicatos y estudiantes y la razón es que la solicitud de audiencias exceden las horas del día, por lo tanto, no tengo otra alternativa que apelar a la generosidad de las personas que trabajan en el ministerio para que sean debidamente atendidos».
Frente a consultas de legisladores de la oposición sobre el personero del PC, Juan Andrés Lagos, el ministro de Educación declaró que «venía preparado para contestar lo que podía dentro de los marcos muy estrictos que me fija la ley, más que dar cuenta de con quién hablo o no hablo», pero clarificó que Lagos no ha prestado servicios para su cartera.
Finalmente, explicó que en relación a la investigación que el Ministerio de Educación realiza sobre el mencionado plantel, le expresó a la subsecretaria Quiroga que se debía tener cuidado con los comentarios sobre la misma «por el secreto de la investigación».
Pero como la campaña de la derecha busca encontrarle el cusco a la breva y la quinta pata al gato, el presidente de la comisión, diputado Diego Paulsen (RN), planteó que se pudo tener de primera fuente cómo se estaba llevando la investigación en el Ministerio, pero no así conocer el detalle de la misma ya que existen recursos pendientes, y por ello solo se les entregó el informe que se utilizó para notificar a la Universidad.
Para el diputado de la UDI, Juan Antonio Coloma, la presencia de las autoridades no los dejó conformes, puesto que «quedaron muchas preguntas sin responder y sobre todo el manto de duda de por qué se cambió al fiscal que llevaba la investigación al interior del Ministerio».
Son como los monos porfiados, a los que no hay con qué darles, porque siempre vuelven a lo mismo. Se les dice en la cara que no hay irregularidades ni algo parecido, pero nada, como si vieran llover; para ellos lo relevante es el cambio de fiscal. No hay sino dos posibilidades para explicar esa recalcitrante estolidez: o enajenación psicótica o bribonada fríamente calculada. Obviamente, estamos en presencia de lo segundo.
Por el contrario, los diputados de la Nueva Mayoría integrantes de la Comisión Investigadora destacaron que el Ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, explicara detalladamente que el resultado de la investigación no arrojó irregularidades y que el ex asesor del Ministerio del Interior, Juan Andrés Lagos (PC), nunca había trabajado para su cartera.
La diputada Yasna Provoste recalcó que se indicara «con toda claridad que aquí se descarta cualquier vicio respecto de los temas de lucro, además, han recibido los informes relativos al pago de las remuneraciones de los trabajadores al mes de septiembre, informados formalmente por la universidad”.
La parlamentaria agregó que las diligencias efectuadas por el MINEDUC, «en el marco de las facultades que esta administración ha ejercido, ha permitido señalar que no ha existido desviación de recursos en la Universidad Arcis, ni ha habido lucro y que hoy día la situación financiera por la cual atraviesa, y que es compleja, tiene que ver con que ha sido una universidad que no ha tomado la opción de llevar a sus estudiantes y familias a cobranzas judiciales como sí se hace en otras casas de estudios”.
En tanto, el diputado del Partido Socialista, Juan Luis Castro, aseveró que «de los datos que entrega el Ministerio de Educación, ha quedado claro que aquí no hubo ni lucro, ni negocios indebidos, ni dineros incompatibles, ni transferencias que no hubiesen sido aclaradas por la investigación, dicho por la Subsecretaria y con la presencia del Ministro de Educación”.
Por su parte, el diputado Felipe Letelier (PPD), indicó que «la Comisión Nacional de Acreditación, la rectora de la universidad, el director de Educación Superior del Ministerio y la Subsecretaria de Estado, hoy día, han dejado claro que de acuerdo al mandato de esta comisión no hay nada de nada y si la Alianza quiere encontrar la aguja en el pajar, no la va a encontrar; y si quieren tapar el sol con un dedo, no lo van a poder tapar porque lo único que tratan con ello es esconder sus propios problemas en los que están metidos”.
Por último, la diputada del PC, Karol Cariola, agregó:
«Fue una larga reunión donde hay conclusiones que son bastante claras» y que reafirman que la Universidad «no amerita terminar con su reconocimiento oficial ni su personalidad jurídica» porque no han incurrido en faltas a sus estatutos y objetivos; que muchas personas han «festinado con información falsa» y que no entregaron prueba alguna para sustentar sus acusaciones; y, por último, que en la investigación del Ministerio de Educación, «queda absolutamente determinado que no hay lucro en la Universidad Arcis y que si bien hay un déficit financiero, es algo que el Ministerio está en plan de resolver.