Un hombre 82 años fue detenido el pasado miércoles por la noche en su domicilio del distrito de Hortaleza, Madrid, por los agentes del Cuerpo Nacional de Policía acusado de violar a su suegra de 101 años, según fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. El detenido, Luis. A. L, fue puesto a disposición judicial y en principio no padece ningún problema mental, ni tenía antecedentes policiales.
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Los hechos sucedieron el pasado martes por la tarde en la vivienda donde residía el detenido, su esposa y la madre de ésta. Cuando la hija de la mujer centenaria llegó a su casa vio algo raro ya que su esposo estaba en la butaca en la que se encontraba descansando su madre, M. R. E.
La mujer, de 101 años, presentaba magulladuras por varias partes de su cuerpo y confirmó la versión de lo sucedido a los agentes.
Posteriormente, los funcionarios tomaron manifestación a la hija de la anciana, que contó que había encontrado a su madre en el piso amoratada, los pelos revueltos y el pañal descolocado; y a su marido en una actitud extraña, ya que estaba compartiendo sofá con su suegra.
Luis reaccionó de inmediato y se fue corriendo al sofá.
Eran las 16.50 horas. La centenaria tenía el pelo alborotado y el pañal descolocado. También se extrañó al ver cómo tenía los brazos llenos de moratones.
La mujer no se encontraba bien y decidieron avisar al 061. Finalmente, una ambulancia trasladó a la víctima de la agresión al Hospital Ramón y Cajal. En el centro médico la mujer confesó a su hija con la voz temblorosa lo que había sucedido. Aseguró que la había agredido sexualmente su yerno.
En el centro médico se efectuó un examen a la mujer y se trasladaron los hechos a los agentes del Cuerpo Nacional de Policía. Al mismo tiempo, la hija de la víctima presentó la correspondiente denuncia en la comisaría de Hortaleza.
Los agentes de la comisaría de Hortaleza se presentaron en el domicilio del supuesto agresor y le detuvieron.
El hombre, apesadumbrado, no hizo ningún comentario y se limitó a acompañar a los agentes que le condujeron a la sede policial donde le interrogaron y le leyeron sus derechos en calidad de un presunto delito de agresión sexual.
Los vecinos de la víctima aseguran que están sorprendidos por lo sucedido. No se esperaban un hecho de esa naturaleza.
Es más, aseguran que tanto la mujer centenaria como su hija son encantadoras y que también lo es el hombre arrestado.
Fuente: El Mundo
