Los dueños de Penta declararon , en conjunto, casi 24 horas ante la Fiscalía. Sus testimonios que tienen 25 días de secreto, pero ya se sabe que reconocieron haber incurrido en cohecho y haber entregado 25 millones de pesos a Jovino Novoa, 100 millones a Laurence Golborne y casi 25 millones de pesos a Andrés Velasco. El rol de Novoa en el Pentagate es clave. Diversas declaraciones y testimonios contenidos en la carpeta investigativa del caso, dan cuenta de cómo el coronel del gremialismo mantenía una relación estrecha con los controladores de Penta y, a la vez, jugó un papel central para conseguir financiamiento para las campañas políticas de la UDI. Fuentes de la causa señalaron que “Délano dudó de inculpar a Jovino porque lo quiere mucho”. Pero, a la hora de salvar el pellejo, lo hizo.
Pentagate: “Choclo” Délano quiebra con Jovino Novoa y reconoce ante el fiscal entrega de platas políticas a poderoso coronel UDI
B. Fernández, A. Carmona y C. Urquieta Ch.
Las primeras formalizaciones del caso caerán sobre los dueños de Penta. Esto se produce después que declararan ante la Fiscalía, testimonios que tienen 25 días de secreto, pero donde los empresarios reconocieron haber incurrido en cohecho y haber entregado 25 millones de pesos a Jovino Novoa, 100 millones a Laurence Golborne y casi 25 millones de pesos a Andrés Velasco.
Con las formalizaciones se abre un nuevo capítulo en el llamado caso Penta.
Luego que se levantara el secreto de la investigación, los testimonios más esperados fueron los de los dueños del holding, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín.
El rol de Novoa en el Pentagate es clave. Diversas declaraciones y testimonios contenidos en la carpeta investigativa del caso, dan cuenta de cómo el coronel del gremialismo mantiene una relación estrecha con los controladores de Penta y, a la vez, jugó un papel central para conseguir financiamiento para las campañas políticas de la UDI, de hecho, fuentes de la causa señalaron que “Délano dudó de inculpar a Jovino porque lo quiere mucho”.
La declaración de los ejecutivos indica también que los dineros fueron entregados a todos los políticos mencionados. En la prensa también han circulado los nombres de José Antonio Kast y Ernesto Silva; sin embargo ellos están “salvados”, debido a que la entrega de dineros se hizo por vía legal a través del Servel.
En cuanto al senador Iván Moreira, Délano y Lavín señalaron que no trataron con él directamente sino que los aportes fueron canalizados por Hugo Bravo, ex director de Penta.
En el caso de la senadora Eva von Baer, los máximos ejecutivos del holding también reconocieron aportes; lo mismo que en los casos de Laurence Golborne, 100 millones vía Vox Comunicaciones, y Pablo Zalaquett, 15 millones vía Reactor Spa.
El sueldo extra de Pablo Wagner
El 11 de marzo de 2010, Pablo Wagner asumía como subsecretario de Minería del Gobierno de Piñera, luego de 12 años de trabajar para el Grupo Penta, donde pasó por varios cargos.
Según fuentes ligadas al caso, en el testimonio de los ejecutivos ante el fiscal, estos señalan que Wagner tenía un contrato a plazo fijo con Banmédica –donde fue gerente de planificación y desarrollo entre 2000 y 2009–, por lo que, aunque renunció para asumir en el mundo público, según él debían pagarle una indemnización que alcanzaba a los $175 millones.
Délano y Lavín le dijeron que arreglara el tema con el gerente de Banmédica, Carlos Kubick, con el que finalmente negoció su salida por $75 millones.
Su sueldo como subsecretario, según Gobierno Transparente, ascendía a más de seis millones de pesos ($6.732.448). Pero el monto lo complicaba, lo que habría quedado plasmado en una serie de correos electrónicos que el fiscal Gajardo mantiene en su carpeta investigativa, en que Wagner habría pedido más dinero porque el sueldo no le alcanzaba para vivir.
En ese contexto, Wagner obtuvo pagos equivalentes a 1,5 millones de pesos mensuales por varios meses, situación que salió a la luz luego de que en octubre del año pasado Hugo Bravo señalara al fiscal que “se acordó ayudarlo con 3 millones de pesos bimensuales.
Para esto, Wagner enviaba una boleta me parece de su cuñada cuyo monto era depositado en una cuenta corriente del propio Wagner en efectivo o en cheque de Penta. La cuñada o el tercero no prestaban ningún servicio para Penta” (sic).
El gerente de administración de Penta, Marcos Castro, declaró ese mismo mes que “Banmédica le pagó una indemnización adicional por un tiempo mientras encontraba trabajo y Penta también le pagaba unos honorarios, mientras encontraba trabajo, según lo que yo sabía. Lo nombran subsecretario de Minería el 11 de marzo del año 2010 y se le suspenden los pagos a su nombre. Continuaron los pagos, ignoro a petición de quién, a nombre de un familiar de su señora”.
El familiar era la cuñada de Wagner, María Carolina de la Cerda Iñiguez, que según la investigación de la Fiscalía entregó 14 boletas por $ 3 millones cada una a Inversiones Penta III, Inversiones Banpenta y a Empresas Penta.
Los pagos a Wagner tienen un ingrediente que lo complica aún más: la minera Dominga.
En febrero de 2011 y mientras Wagner era subsecretario, ingresaba al Servicio de Evaluación Ambiental una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) para hacer prospecciones mineras en la Minera Dominga, de Carlos Alberto Délano y José Antonio Garcés.
Según testimonios entregados a Gajardo por ejecutivos de la minera, hubo reuniones con Wagner y Délano e incluso les dio algunos consejos antes de que presentaran el proyecto al entonces ministro de Minería, Hernán de Solminihac. Además, de acuerdo a estos testimonios, la relación del ingeniero comercial con Penta continuó luego de que dejó el cargo en 2012, tras la fallida licitación del litio.
En tanto, la ex seremi de Minería de Coquimbo, Jocelyn Lizana, testificó que Wagner “permanentemente me preguntaba cómo iban los proyectos. Dentro de eso me preguntaba cómo iba el proyecto Dominga en general (…). En ninguna instancia manifestó su intención de inhabilitarse o no intervenir en los temas de Dominga. Deseo agregar que Pablo Wagner tampoco efectuó alguna presión para favorecer a Andes Iron”.
El almuerzo más caro
El hombre clave de Penta que tendió los puentes entre Andrés Velasco y el holding fue Manuel Antonio Tocornal, compañero de Velasco hasta séptimo básico en The Grange School. Fue él también quien gestionó el almuerzo que se realizó en 2013 entre Andrés Velasco y los dueños de Penta, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín. Este duró tres horas, dicen quienes conocieron el encuentro, y sólo hacia el final se habló sobre aportes de dinero para Andrés Velasco.
De acuerdo a quienes conocieron el encuentro en la ocasión, se definió un pago para el ex ministro de Hacienda de Michelle Bachelet por $20 millones. Quien gestionó la boleta fue Tocornal. De esta forma –dicen las mismas fuentes– Velasco se convierte no sólo en el economista más caro del mercado sino que también en el que fue invitado al almuerzo más oneroso que haya existido en Sanhattan. La boleta se emitió a nombre de la sociedad unipersonal que tiene Velasco; Cactus Consultores SPA. Desde el entorno de Velasco se ha sostenido que esa fue una “comida privada” y que se trató de una asesoría profesional.
Según las mismas fuentes, Manuel Antonio Tocornal gestionó una nueva boleta para Andrés Velasco, también a nombre de Cactus, por un total de $4,5 millones. De acuerdo a lo que señalaron fuentes cercanas a Penta, la empresa reconoce el pago al líder de Fuerza Pública de estas dos boletas como platas políticas.
La información coincide con una parte de la declaración que el ex gerente general de varias filiales del grupo Penta, Hugo Bravo, prestó al Fiscal Carlos Gajardo. “La factura 63 de la Sociedad Cactus Consultores SPA por $ 20 millones, de fecha 2 de julio de 2013 corresponde a un aporte a la campaña presidencial de Andrés Velasco”.
Bravo también agregó la existencia de otra boleta con el número 190 “de Jorge Arturo Olave Marilef, de fecha 3 de enero de 2013. Al dorso anoté con mi letra MAT-AV, que corresponde a Manuel Antonio Tocornal y Andrés Velasco. Esto, porque Tocornal y Velasco eran compañeros de colegio, me parece en el Grange, y en una ocasión Velasco fue invitado a almorzar a Penta al piso 16 junto con Tocornal, Délano y Lavín, para que expusiera su proyecto. Yo no fui convidado. Después de ese almuerzo se le dieron estos aportes. Manuel Antonio Tocornal habló conmigo y se le dieron estos aportes. Ni la boleta de Olave ni la factura de Cactus corresponden a servicios prestados a Penta S.A.”.
Pese a lo anterior, la línea de defensa de Velasco se ha sostenido sobre el argumento de que los pagos que recibió durante 2013 fueron por asesorías profesionales que se realizaron después de las elecciones primarias del 30 de junio de 2013. “Yo he tenido una relación profesional que además fue remunerada después del fin período de elecciones. Por lo tanto, todo lo que he dicho lo mantengo cien por ciento”, señaló en entrevista con CNN Chile.
Velasco ya había realizado el 2012 dos charlas para Penta. Según consta en las memorias del Banco Penta, éstas fueron de fidelización de clientes y las realizó junto al economista Juan Andrés Fontaine. La primera se tituló “Protagonistas del Mundo Emergente, ¿Quiénes Empujarán el Carro?”, y se realizó durante el primer semestre. Debido al interés, la charla se repitió el segundo semestre con los mismos expositores, bajo el título “2013 A la Vuelta de la Esquina”.
Jovino abandona su histórico estudio de abogados en medio de la tormenta del Pentagate
En medio de la investigación judicial y política del Caso Penta y el quiebre del ex parlamentario de la UDI y el dueño del holding Carlos Alberto Délano, Jovino Novoa comunicó su retiro del Estudio Jurídico Guerrero y Olivo.
Por medio de un comunicado en la página web del estudio se comunicó que:
“En el día de ayer, y haciendo uso del derecho de los socios de retirarse el año que cumplen 70 años establecido en los estatutos de Guerrero Olivos, don Jovino Novoa Vásquez comunicó a los socios su retiro del estudio a contar de esta fecha”.
Cabe recordar que Jovino Novoa, es el hombre más poderoso de la UDI, uno de los escasos militantes a los que sus pares llaman por el nombre, omitiendo el apellido. Al igual que Jaime (Guzmán) o Pablo (Longueira). Los tres pertenecen a una categoría superior.
El primero, guardián de la doctrina del partido, representa la línea que identifica a los sectores más conservadores del país, entre ellos, el empresariado. No le importa no ser popular y, por eso, dice lo que piensa. El segundo, es el mítico líder, el ideólogo. Y el tercero, impulsor junto a Guzmán del crecimiento de la UDI, posee una visión menos ortodoxa en materia económica. Es el negociador nato, que actúa -a la hora de los acuerdos- según la conveniencia política del partido.
Por su ligazón con el mundo empresarial juega un rol decisivo. En Chile el cruce entre el mundo de los negocios y la política se da, por esencia, en la UDI.
“El núcleo duro del empresariado está en la UDI por la defensa del modelo que instauró el gobierno militar y porque algunos hicieron fortunas en aquella época. Jovino defiende la doctrina y eso es apreciado en el mundo de los negocios”, afirma un abogado cercano al partido. Para un miembro de la Alianza “Longueira les da tiritones a los empresarios y les ha dado duro. Él representa a la UDI popular. Jovino, a la UDI empresarial”.
Fuente: El Mostrador