Pese a que el jefe programático del comando de Michelle Bachelet, Alberto Arenas había notificado a los partidos de oposición que no existía espacio para hacer una reforma laboral, en los últimos días -y ad portas de que el comando de la Nueva Mayoría entregue el programa completo- se han abierto algunos espacios para introducir las demandas que ha hecho principalmente la CUT.
Y es que en el comando bacheletista hay certeza de que los tres pilares de un eventual nuevo gobierno de Bachelet son los que se han explicitado -educación, cambios a la Constitución y al sistema tributario- y que no habrá una «cuarta reforma»… pero sí que se podrían incluir más ideas al informe que ya entregó la comisión especializada, que encabezó el ex director de la OIT, Juan Somavía.
El pasado 28 de agosto, el grupo terminó su trabajo y dejó de reunirse. Sin embargo, la mayoría de sus integrantes no tuvieron acceso al documento final que Somavía entregó al equipo de programa que dirige Arenas y que integran también el senador PPD Ricardo Lagos Weber, Alejandro Micco (DC), Patricio Palma (PC) y el radical Gabriel Guzmán.
En ese sentido, aunque la ex directora del Trabajo, Patricia Silva (PS) y el PC Marcos Barraza se jugaron porque el texto incluyera todos los temas, incluso una reforma al Código del Trabajo tal como lo pide la Central Unitaria de Trabajadores, los representantes de los partidos no saben qué medidas finalmente va a visar Arenas.
Con todo, fuentes del comando aseguran que los últimos días ha habido un intenso debate al interior de la comisión programa para incluir, al menos como enunciados, algunas demandas de los trabajadores.
Trascendió que la presión del PS y en menor intensidad de los comunistas ha molestado al bacheletismo, porque se estima que particularmente los socialistas se hicieron eco de las altas expectativas de la CUT.
Consultado por el tema, Mauricio Jélvez (DC), quien integró la comisión laboral, dijo que «la propuesta está entregada, la síntesis final va estar en estos días. Lo importante es que en la comisión hubo un acuerdo unánime y si no se ha dado a conocer es porque la Presidenta ha puesto la prioridad en otros temas, pero ya se conocerá»
En tanto, la Central Unitaria de Trabajadores mantiene su decisión de no plegarse a la candidatura de Bachelet ante la falta de información del comando sobre la materia. El vicepresidente del organismo, Nolberto Díaz (DC), afirmó que «no voy a respaldar nada pues no hay una señal clara de reformar el Código del Trabajo, que es heredado de la dictadura».
Asimismo, sostuvo que la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa (PC), encabezará una reunión para tratar el tema.
