El senador Guido Girardi, presidente de la Comisión de Salud del Senado, señaló que es necesario asumir que en el país hay una crisis en salud importante. Agregó que durante 2015, debería establecerse la salud como prioridad nacional, y que entre las medidas inmediatas, se debe establecer un estatuto único para los trabajadores de Salud, terminar con las prestaciones subvaloradas y el envío de una ley que permita la contratación de 750 especialistas-docentes “que formen a los médicos que faltan”.
Según Girardi, la crisis no empezó ahora:
“Somos herederos de haber tomado en el pasado decisiones incorrectas y cuando llega la Presidenta Bachelet tenemos cerca de 3 millones de personas en lista de espera, incluso algunos desde el 2011-12; nos encontramos con un sistema con la mitad de las camas básicas, UCI y UTI, que debiera tener; donde faltan 2.500 especialistas en los hospitales y 1.600 médicos en los consultorios y estos carecen de capacidad resolutiva”.
Girardi reconoció que “se han hecho esfuerzos muy importantes para resolver las listas de espera, pero cada vez se agregan más personas. Mientras no tengamos la infraestructura, las camas, el equipamiento, pero particularmente los médicos, es muy difícil terminar con ellas”.
Para el parlamentario esta situación “tiene su génesis cuando se aprueba el Auge y la derecha votó contra el financiamiento, pese a que se requería recursos cuantiosos para garantizarle a la población el conjunto de prestaciones de calidad y oportunas. Esto obligó a comprarle a privados y el problema se fue agravando, pues el sistema privado comenzó a llevarse a los médicos y al personal del sistema público para satisfacer la demanda y como ellos no hacen formación los hospitales públicos se han ido vaciando”.
Por ello el senador afirmó creer que “se debe tomar una política de Estado, una política nacional, porque este es un tema muy relevante. Me parece que el Gobierno va por el camino correcto, pero no es algo que sólo lo pueda resolver Salud. Tenemos que ser más activos, entre Salud, Hacienda y el conjunto de la sociedad de volver a privilegiar la atención pública pues es la única que hace posible resolver el problema”.
Girardi se manifestó partidario de tener “un estatuto único, hoy tenemos una carrera de los médicos que están en los hospitales y una carrera distinta para los médicos que están en la atención primaria. Necesitamos unificarlas y que los de atención primaria sepan que es un primer escalón y que si quiere ser especialista puede ir a un hospital, porque hoy se discrimina a los médicos y trabajadores que se van a la atención primaria”.
Déficit de especialistas
El parlamentario agregó que se deben contratar “a los 2.500 especialistas que faltan, pero al menos 700 recontratarlos ahora y para eso hay que reformar la escala de remuneración para que puedan volver a la salud pública con sueldos dignos y condiciones laborales y equipamientos aceptables”.
Girardi añadió que “al mismo tiempo que se formen médicos que resuelvan en la atención primaria, queremos que todos los consultorios del país vuelvan a tener: un sicólogo, un pediatra, un geriatra, un siquiatra. Y sistemas de atención primaria con el equipamiento necesario para resolver los problemas y no sólo derivarlos a los hospitales”.
“Y por último –afirmó- en la política de medicamentos que se ha avanzado mucho, queremos plantear al gobierno que hagamos el esfuerzo para que se garantice el 100% de la receta médica que se entrega en los consultorios y en los hospitales”.
Costo real
El senador por Santiago poniente pidió al Ministerio de Hacienda “que envíe ¡Ya! una ley que va a permitir formar estos especialistas para la atención primaria. Eso no puede seguir esperando y lamentablemente no quedó establecido en la glosa especial de la discusión presupuestaria y por lo tanto no se van a poder adscribir médicos para formarlos el año próximo si no se envía esta ley. Tenemos que hacer de Salud el principal desafío social del 2015, ese tema queremos proponerle y conversar con la ministra para ver de qué manera podemos llevar a adelante esta política de emergencia para resolver estos problemas que son una herencia, pero lo importante no es quienes son los culpables sino que los problemas se resuelvan”.
Para Girardi, la actual deuda hospitalaria “es heredada, pero cualquier gobierno –independiente del signo que tenga- va tener problemas porque son prestaciones subvaloradas. Las intervenciones que hacen los hospitales no les pagan el 100% del costo real. A través de esta lógica de prestaciones subvaloradas, que es una estrategia para contener costos, es una mentira pues se expresa en deuda. Hay que financiar el costo real de la prestación y terminar con esta lógica demencial de prestaciones subvaloradas donde Fonasa paga menos que el costo real. Porque el incentivo para los hospitales es cerrar las camas, los pabellones y hacer las menos prestaciones posible para no endeudarse más. Pues el que más atiende, más se endeuda. Por eso comparto y respaldo la Mesa de trabajo con Hacienda que es fundamental para que las prestaciones se paguen a costo real, pues genera una difícil gestión ya que es distinto trabajar con un presupuesto financiado que con una deuda”.
En un plano más político, en el programa Estado Nacional de TVN el senador Guido Girardi propuso, tras los resultados de la última encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP), ampliar la Nueva Mayoría hacia nuevos sectores de la sociedad, incluyendo el Partido Progresista (PRO) de Marco Enríquez-Ominami y destacó que pese a ser “la coalición política más amplia que ha tenido la historia de Chile, la Nueva Mayoría deja afuera a importantes actores de la sociedad como mundo intelectual, científico, empresarial, de los sindicatos y al Partido Progresista (PRO)”.
Agregó que “hoy día veo a Marco Enríquez-Ominami dispuesto a respaldar la agenda de reformas. Pero no sólo debe asumir lo positivo de ellas, sino que también las responsabilidades que implica”-
Consultado sobre un eventual cambio de gabinete, Girardi dijo que lo importante es que “los ajustes que se hagan vayan en el sentido de ampliar la Nueva Mayoría a más actores, a este mundo social, que enriquece a la sociedad chilena. Podemos hacer mucha autocrítica y muchas tareas se pueden mejorar, la gestión, la coordinación, pero lo que falta es la inclusión”, insistió.
El parlamentario defendió las reformas que impulsa el Gobierno, incluida la tributaria, educacional y, próximamente, la constitucional, señalando que no es “reformismo a ultranza”, sino que “mínimos democráticos y de decencia”.