Decenas de personas acuden a diario al único Servicio de Salud que existe en la zona costera de La Araucanía, específicamente en Queule, por los constantes malestares debido al mal olor de los peces muertos tras una masiva varazón de sardinas en el lugar.
Sólo ayer, en la escuela particular subvencionada Padre Isidoro de Queule, 14 estudiantes y 3 funcionarios debieron acudir a la posta del sector por presentar vómitos y un fuerte dolor de cabeza.
Así lo indicó el director del establecimiento, Rodolfo Ríos.
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El director regional de Sernapesca, Bernardo Pardo, indicó que van cerca de 1.200 toneladas de sardinas levantadas del borde costero y estima que aún faltan otras 2.800 por retirar, sin contar lo que hay en alta mar.
El Seremi del MOP en La Araucanía, Emilio Roa, dijo que son 10 equipos los que están trabajando en la comuna de Toltén, compuestos por una retroexcavadora, un cargador, camión pluma, camión aljibe, camión transportador, cuatro camiones tolva y un camión de combustible.
Aunque aún no se cuenta con una versión oficial por parte del seremi de Salud de La Araucanía, Carlos González, su equipo de comunicaciones descartó que los malestares de la comunidad se deban al ácido sulfhídrico, sino que al olor nauseabundo que ha ido en aumento por la descomposición de los peces.
Solicitan declarar zona de catástrofe en caleta Queule por varazón de sardinas
En la región de la Araucanía más de 800 toneladas de sardinas muertas han sido levantadas desde la zona costera, principalmente en caleta Queule en la comuna de Toltén.
El seremi de Salud de la zona, Carlos González, dio a conocer que hasta el momento no existen reportes de personas enfermas o con malestares, producto de las descomposición de los peces.
Sin embargo agregó que va a ser normal que con el paso de los días los malos olores incrementen.
La situación preocupa a quienes habitan y trabajan en el sector, además Hernán Machuca, representante de los pescadores artesanales del lugar dio a conocer que solicitarán que se declare zona de catástrofe a fin de que se inyecten recursos.
Pese a que el seremi de Salud aseguró que no existen registros de personas afectadas por malestares debido a esta situación, Rodolfo Ríos, director del colegio Padre Isidoro de Queule, establecimiento emplazado a sólo 30 metros del río donde se encuentra una gran cantidad de sardinas muertas, aseguró que los alumnos ya han presentado problemas de salud.
Por su parte, Silvia López, presidenta de la junta de vecinos mayor preocupación tema sanitario
En tanto el alcalde de Toltén, Guillermo Martínez, estima que los trabajos para retirar las sardinas muertas durarán como mínimo un mes.
Al ser consultado sobre esta situación el seremi de Educación, Marcelo Segura, sostuvo que no se prevé la suspensión de clases de ninguno de los establecimientos educacionales del lugar.
