La desfachatez de la Confederación Nacional de Transporte de Carga de Chile, CNTC, no tiene precedentes: nunca antes un gremio se ha embarcado en una paralización de actividades, para chantajear al parlamento.
Con arrogancia de patrón de fundo, el presidente de la CNTC, Sergio Pérez, espetó: »
El parlamento debe hacer la pega, para eso le pagamos».
Agregó:
«La única forma de evitar la manifestación nacional de los camioneros por los hechos de violencia en La Araucanía es que el parlamento haga la pega y se promulguen las leyes solicitadas.
A mayor abundamiento:
“Lo concreto es que el parlamento tiene que hacer la pega, para eso le pagamos todos los chilenos remuneraciones y hacemos un llamado a los poderes del Estado para que en el menor plazo posible promulgue las leyes solicitada por los gremios productivos, los camioneros de Chile y que el ejecutivo le ponga suma urgencia a estas normativas”.
¿Y qué pretenden los camioneros de la organización de Pérez?
Nada menos que el parlamento apruebe, completa, la «agenda de seguridad» del gobierno de Piñera.
En opinión de Pérez, si bien la ley Juan Barros es de suma importancia, «se necesita la ley de modernización de inteligencia”.
¿Y quién es Pérez?
La siguiente foto aclara las dudas:
En consecuencia, cabe la legítima sospecha de que el sector de los camioneros que siguen a Pérez, le está haciendo la pega a Piñera, para lograr que la oposición de centro se pliegue a la aprobación de la agenda de seguridad del gobierno.
Es ese sentido, ni Pérez ni el gobierno la tienen fácil.
Por de pronto, la Confederación Nacional de Dueños de Camiones de Chile, CNDC, comunicó que, por decisión unánime de su directorio, no adherirán al paro convocado para este jueves por la CNTC.
Su presidente, Juan Araya, indicó:
“Hacer un paro nacional donde algunos dirigentes están amenazando con que no van a transportar un kilo de arroz, eso es terrorismo también. Estamos en pandemia, la gente tiene que ubicarse”.
Explicó que han estado en muchas movilizaciones, entre ellas la de 1972, de triste memoria, pero que nunca han dejado de abastecer a la población.
Agregó la que la CNDC es el mayor gremio de camioneros del país, que reune a 12 mil dueños de camiones, con unos 60 mil camiones, y que la CNTC es producto de una escisión de la CNDC.
En el parlamento, un sector de la oposición manifestó con claridad ue no se dejará chantajear.
El diputado Hugo Gutiérrez (PC), manifestó:
«No estoy para extorsiones, no votaré a favor de ninguno de los proyectos de ley que exigen los camioneros» .
Agregó que le parecía «curioso» que la agenda de 13 leyes, a las que el Ejecutivo les debe poner urgencia para los camioneros no asuman un paro desde este jueves, coincidan «a la perfección» con la agenda legislativa del gobierno.
«No debemos olvidar que el mismo gremio de Camioneros, el grupo terrorista Patria y Libertad y la Armada de Chile fueron impulsores del paro de agosto de 1973 que impulsó el desabastecimiento para derrocar a Salvador Allende», concluyó.
El senador independiente, Alejandro Guillier, señaló:
«Hace unos días, Sebastián Pinera firmaba un proyecto con el presidente de los camioneros a sus espaldas. Ahora el vocero Jaime Bellolio dice que el ultimatum no es contra el gobierno. Todo caCalza: gobierno y camioneros chantajean juntos al país.
A su turno, la diputada Natalia Castillo (RD) preguntó:
«¿¿Y esto?? ¿¿Qué le parece al Ministro del Interior esta amenaza de un gremio a un poder del Estado para desestabilizar el país?? ¿¿Donde están los “patriotas” del @GobiernodeChile y ChileVamos exigiendo mano dura??
El diputado Jaime Naranjo (PS), expresó:
«Los camioneros con su anunciado paro podran amendrentar al gobierno pero no al parlamento. No se equivoquen. Se acabó su época de paros golpistas y financiados por Estados Unidos».
La diputada Emilia Nuyado Ancapichun (PS), de origen mapuche, señaló:
«Esto es terrorismo económico. Al ver el petitorio pareciera que el Ministro Pérez y La Moneda se han convertido en asesores de los camioneros. Parece que sólo buscan culpar al pueblo mapuche y aprobar leyes para reprimir movilizaciones».
En lo inmediato, el paro de camioneros agregará nuevos problemas al atribulado gobierno de Piñera, pero difícilmente logrará el cometido de doblegar al sector de la oposición que no está para seguir entregándole facultades autoritarias y represivas al peor gobierno de la historia.
Falta ver que harán la DC, traidores, como Pepe Auth, oportunistas, como René Alinco, radicales de derecha, como Carlos Abel Jarpa, y ex radicales que votan con la derecha, como Fernando Meza y José Pérez.
Incluso si el gobierno y la derecha los cooptan, como ya ha sucedido en numerosas ocasiones, no servirá de mucho, porque, simplemente, el horno no está para bollos, para una dictadura 2.0 encabezada por la derecha.