El candidato presidencial independiente, Alejandro Guillier, apoyado por el PC, PS, PPD, PR, IC Y MAS, dio a conocer su propuesta laboral y de empleo que, de llegar a La Moneda, impulsará en su administración. Entre los compromisos, están crear un millón de trabajos, generar empleo para mujeres y reducir la jornada laboral a 40 horas semanales.
Uno de los compromisos es crear entre 900 mil y un millón de puestos de trabajo, “propiciando que estos sean empleos decentes”, además de avanzar en la reducción de la jornada laboral en 40 horas semanales y fortalecer los derechos sindicales.
Uno de los ejes de la propuesta es implementar una política nacional de crecimiento y empleo decente con el objetivo de “invertir en la gente”.
Se remarca, en primer lugar, “que en todo el mundo existe la discusión entre cantidad y calidad en el empleo. Los políticos de derecha tienden a reducir el tema laboral a dos cifras: número de empleos creados y tasa de desempleo. Y poco hablan, lamentablemente, de la dimensión ética que tiene el trabajo. El trabajo no es cualquier factor productivo. Es un factor, evidentemente, pero no es cualquier factor, porque detrás de él existen personas que tienen dignidad y derechos”.
“No es justo que el 50% de los trabajadores y trabajadoras ganen menos de $350 mil pesos al mes; no es justo que un trabajador tenga que buscar dos o más trabajos y aún así no alcanza a pagar sus cuentas a fin de mes; no es justo que las mujeres ganen $736 pesos por cada $1.000 que gana un hombre. Mientras tanto, el 0,1% más rico registra un ingreso per cápita de 83 millones de pesos mensuales”, se añade.
En este sentido, el candidato hace hincapié en que “debemos instalar en el debate que podemos hacer crecer al país, pero para todos y no para pocos. Nada sacamos con crecer donde pocos tienen mucho y muchos tienen poco. Por eso el crecimiento es con empleos decentes y seguridad social”.
Política activa versus política de “chorreo”
En el documento se describe que “la mirada tradicional indica que el empleo es función del crecimiento económico. A mayor crecimiento, mayor creación de puestos de trabajo y menor tasa de desempleo”.
Ante ello, “los gobiernos de derecha sostienen que la política laboral se debe limitar a asegurar el crecimiento económico, y que el empleo vendrá por ‘chorreo’. Peor aún: la política de empleo debe estar orientada a desregular la relación laboral, demanera que el mercado laboral funcione libre y sin interferencias”.
En el documento queda explícito que “sin embargo, esta mirada ha demostrado ser equivocada y no tener sustento empírico. El crecimiento económico es necesario, pero no es suficiente”.
Se indica que “incluso en periodos de alto crecimiento económico han persistido importantes brechas de empleabilidad en sectores de la población (fundamentalmente mujeres, jóvenes y pobres); se producen bolsones de desempleo en algunos sectores productivos más decaídos; ha habido impactos desiguales en el empleo de grandes empresas vis-a-vis empresas de menor tamaño, además de generarse bolsones de cesantía en algunas zonas geográficas de los países”.
La propuesta refuerza que “por eso los países modernos y progresistas llevan adelante políticas activas de empleo, que se oponen a la simple inercia, al simple chorreo”.
“Economía funcionará para todas las familias trabajadoras”
Se precisa que una política activa de empleo en el país “significa que el crecimiento debe estar al servicio de las grandes mayorías y no al servicio de unos pocos. En nuestro gobierno la economía funcionará para todas las familias trabajadoras, no solo para los más ricos”.
El documento señala también que “gane quien gane” el país crecerá el doble “de todos modos”.
Para logar la reactivación económica se establecen las siguientes medidas:
– Alianza público privada con un plan de 30 años plazo para promover la digitalización del país, estableciendo un sistema de banda ancha que cubra todo el territorio, un plan de infraestructura y logística, y viviendas sociales para los sectores medios.
– Duplicar la inversión pública en infraestructura y vivienda. Esto significa pasar del 2 al 4% del PIB en inversión. Esto generará miles de empleos y beneficios sociales.
– Se creará una Oficina de Grandes Proyectos para reducir a la mitad de los tiempos los trámites públicos en los grandes proyectos de inversión, que hoy duran entre 5 a 7 años. Manteniendo siempre la consigna de crecimiento con protección al medio ambiente, vamos a eliminar las trabas burocráticas y apoyar fuertemente la inversión privada en el crecimiento del país.
– Plan de obras públicas: expansión metro Santiago a razón de 10 kilómetros por año, ampliación red de metro en Santiago, Valparaíso, Concepción, mejorar conectividad carreteras.
– Red fibra óptica que conectará América del Sur con China.
Protección social para todos los trabajadores
La propuesta de Alejandro Guillier se focaliza en las mujeres y en la protección social para todos los trabajadores. El compromiso del candidato es crear entre 900 a un millón de empleos, “propiciando que estos sean empleos decentes”.
“A igual trabajo, igual salario”, se indica. En este sentido, se plantea “modificar la ley de igualdad de remuneraciones para hacerla efectiva y no solo una aspiración”.
Generación de empleos para mujeres
Otro de los ejes de la propuesta es impulsar un Plan Nacional de Formación Permanente y generación de empleos para mujeres.
“Terminaremos con las trabas que impiden un mayor involucramiento de las mujeres en el campo laboral”, sostuvo Guillier.
Se promete crear un sistema de cobertura universal de salas cuna que cubrirá a trabajadores y trabajadoras, “rompiendo el sesgo que hoy existe con el artículo 203 del Código del Trabajo. Este sistema cubrirá el derecho incluso en periodos de cesantía”.
El compromiso es también “avanzar en instalar centros comunales para el cuidado y desarrollo del adulto mayor”.
Se propone también modificar el seguro de cesantía para “hacerlo extensivo a zonas de catástrofes y una nueva operación cuando vivamos crisis económicas: el Estado promoverá que no se despida al trabajador, buscando un acuerdo de protección social: Si el privado mantiene el 50% de su remuneración al trabajador, el Estado aportará un 25% adicional, de modo que en tiempos de crisis el trabajador podrá mantener su empleo y sueldo hasta en un 75%, siempre que se capacite en ese periodo”.
Reducción de la jornada laboral
La propuesta de Alejandro Guillier establece que “en base a criterios de gradualidad, mejoras de la productividad y negociación colectiva de los sindicatos, se avanzará en la reducción de la jornada laboral en 40 horas semanales”.
El abanderado puso de relieve también que se fortalecerán los derechos sindicales. “Fortaleceremos los derechos sindicales. Recuperaremos la titularidad sindical y estableceremos en la Nueva Constitución el derecho a sindicalización y negociación colectiva”, subrayó.
Se fortalecerá asimismo “el Consejo Superior Laboral para que se creen diálogos tripartitos a nivel de regiones y actividades económicas. Este Consejo fortalecerá entre empresas y trabajadores puntos vitales como incrementos en el salario mínimo”.
Fuente: El Siglo