En entrevista concedida al diario El Mercurio, el presidente del Partido Comunista, diputado Guillermo Teillier, sostuvo que la responsabilidad por las polémicas en las designaciones del gabinete de Michelle Bachelet recae en los partidos políticos y reconoció que le hubiera gustado tener un intendente comunista. El diputado no está de acuerdo con quienes plantean que el futuro gobierno ya debería haber marcado una posición frente a las acusaciones que se han realizado a algunos subsecretarios e intendentes. El énfasis del presidente del PC pasa por resguardar el programa. «Aquí no hay dogmatismo», afirma.
El diputado Guillermo Teillier se encontraba en Europa cuando el 24 de enero la Presidenta electa Michelle Bachelet anunció al primer equipo ministerial que la acompañará en su segundo mandato. En Bruselas participó en un encuentro de la Comisión Parlamentaria de la Unión Europea-Chile y luego siguió de cerca las críticas cruzadas que se instalaron en la Nueva Mayoría hace dos semanas, cuando aparecieron cuestionamientos a algunos subsecretarios e intendentes recién nombrados.
El presidente del PC afirma que la principal responsabilidad recae en los partidos, en una semana marcada por las voces que se alzaron desde el PS y la DC pidiendo al futuro gobierno que adopte una posición frente al caso.
-¿Qué le pareció la conformación del nuevo gabinete?
-En general me pareció bien. Tenemos una ministra (Claudia Pascual) y un subsecretario (Marcos Barraza). El Servicio Nacional de la Mujer (Sernam) me parece muy bien. Es un tema en el cual la propia Presidenta tiene mucho interés. Las desigualdades entre hombre y mujer es un tema pendiente en Chile.
-¿Es de los que cree que el aborto y los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres deben estar en la agenda de la futura ministra Pascual en el Sernam?
-Sí. Ahora, creo que lo que tienen que hacer los ministros es atenerse a lo que dice el programa, que es lo que se ha comprometido. Es evidente que esos temas van a ser discutidos y lo que hay que hacer es facilitar una discusión participativa en ese temas, porque hay diferencias de opinión al respecto.
-El PC entregó una lista de candidatos para las intendencias, pero no tuvo representantes en las jefaturas regionales.
-No tuvimos intendentes, efectivamente. Y sí, me hubiera gustado tener alguna intendencia. Pero el compromiso nuestro con la Presidenta era que ella determinaba los cargos.
-¿Es partidario de que las autoridades cuestionadas asuman el 11 de marzo? ¿Puede afectar este caso al gobierno?
-Creo que sí, que lo puede afectar. Las personas tienen que responder ante la Presidenta y ella determinará. La determinación de ella tiene que ser muy clara, muy concreta, pero sobre las bases de un conocimiento profundo. Ahora, gran parte de la responsabilidad recae en los partidos. Creo que no tuvieron claro, no pensaron las consecuencias que podía tener nombrar a personas que podrían tener un cuestionamiento.
-¿Cuán desprolijo fue el futuro gobierno a la hora de realizar las nominaciones de algunos subsecretarios e intendentes?
-Hubo una advertencia a los partidos: tenían que responder por quienes proponían, en eso fue clara la Presidenta. Y si se hace voto de confianza de un planteamiento de los partidos, claro, se pueden cometer estos errores. Entonces, a lo mejor, fue demasiada confianza en los partidos, estoy haciendo una suposición.
-Pero la designación de autoridades es una facultad del Ejecutivo.
-Evidentemente. En todo caso tendría que haber una responsabilidad compartida. Fue todo tan rápido, que no sé si hubo un tiempo para investigar cada caso. Pero eso se tiene que aclarar, y lo va a aclarar la Presidenta, no tengo la menor duda. Ahora los partidos también tienen que asumir sus responsabilidades, porque si queremos dar una imagen de que queremos hacer la política de otra forma a como se ha hecho hasta ahora, es conveniente también que los partidos digamos una palabra clara sobre nuestras propuestas.
-El presidente del PS, Osvaldo Andrade, dijo esta semana que hace falta una «voz» del futuro gobierno para enfrentar estos casos ¿Comparte ese juicio?
-Hace falta una voz del gobierno y no me cabe duda que va a estar y va a venir de parte de la Presidenta de la República. Tendrá que haber una solución que no veo que venga de otra parte que no sea de la Presidenta.
-No sólo en el PS han existido reparos a la decisión del gobierno de no marcar una posición frente al caso.
-Si fuera el silencio la causa del desorden, yo no tendría ninguna preocupación. Lo que se ha provocado es un hecho que se ha transformado en una noticia, independientemente del silencio o no. Porque podría haber habido una voz oficial en el primer caso, y después iba a seguir el otro, y el otro. No tiene nada que ver con el silencio. También ha faltado una voz aclaratoria de los partidos respecto a los nominados.
-¿Es razonable esperar el regreso de vacaciones de Bachelet para resolver el conflicto?
-Si de aquí al 24 de febrero van a aparecer todos los antecedentes, es mejor tener todo sobre la mesa. Si no, van a estar tomando caso a caso, y va a ser una guerra de guerrillas. Eso no es conveniente. Lo conveniente es que se tome una decisión, en un momento, que creo que va a ser después del 24 de febrero, y la va a tomar sin duda la Presidenta de la República. Confío en que va a tomar una buena decisión.
-¿Cuál es el criterio para que una autoridad pueda formar parte del gobierno?
-No tiene que tener juicios pendientes, yo creo que si una persona ha sido acusada de violencia intrafamiliar, no puede. Haber cometido delitos de carácter sexual, delitos económicos, yo creo que esos no podrían estar en el gobierno. Evidentemente.
-El padre de la futura subsecretaria Carolina Echeverría (Fuerzas Armadas) ha sido acusado por casos de violaciones a los derechos humanos, ¿Cómo enfrentar esta situación?
-Lo encuentro un tema bastante complejo. No se puede acusar a un hijo por lo que ha hecho el padre, caeríamos en un error. Sería bueno conocer cuál es el pensamiento de Carolina Echeverría. Yo creo que eso lo debe estar viendo la Presidenta y su equipo, cómo aclarar esa acusación. Habría que saber qué piensa ella de la tortura y de los torturadores. Será doloroso que lo diga, si el padre fue efectivamente torturador.
-El futuro ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, dijo hace algunas semanas que no basta sólo con la experiencia política en un gobierno, ¿Es así?
-Se necesitan muchas cosas, pero tampoco basta ser un técnico muy especializado en cualquier tema. Hay que combinar bien las cosas, el arte de la política es complejo en términos de gobernabilidad.
Se pretende permear el programa
-Claudia Peirano renunció a la subsecretaría de Educación luego de que los estudiantes y una parte de la Nueva Mayoría la cuestionara por haber firmado una carta que ponía el foco en los riesgos de establecer gratuidad total en la educación superior, sin una gradualidad ¿Cómo interpreta su alejamiento del futuro gobierno?
-Si esa es la resolución que ella consideró, está bien.
-Tras la renuncia de Peirano, la ex ministra Mariana Aylwin planteó que «estamos frente a un nuevo tipo de dogmatismo, que es el programa de gobierno» y agregó que «pareciera aquí que solo tienen la verdad absoluta los dirigentes estudiantiles y una nueva mayoría dentro de la Nueva Mayoría» ¿Qué le responde?
-No tiene la razón. En el caso de la reforma educacional, antes incluso que llegara la presidenta Bachelet a Chile ya los partidos políticos nos habíamos comprometido con una reforma a fondo en la educación y firmamos un documento que es más o menos la misma reforma que está proponiendo en su programa Michelle Bachelet. Y es un programa que ha sido discutido. No es aquí haya un dogmatismo, es al acuerdo al cual hemos llegado. Hemos roto incluso los dogmatismos de los partidos para llegar a un acuerdo. Hablar así de esa manera, creo que lo que se pretende es permear el programa.
-A raíz del mismo caso, el senador Andrés Zaldívar sostuvo que «dejarse presionar por grupos de poder muestra debilidades que no son convenientes al inicio de una gestión» ¿Comparte ese juicio?
-Andrés Zaldívar fue ministro del Interior y le tocó enfrentar el conflicto de los pingüinos y dejó de ser ministro porque no pudo enfrentar a eso que él llama la «presión de un grupo de poder». Es que no es un grupo de poder, es un sentimiento que existe en la sociedad chilena, no son solo los estudiantes. Si ella renunció está claro que ahí hubo algún desacierto en su nombramiento respecto a lo que podía pensar porque si nosotros estamos planteando una reforma profunda, poner a una persona que piensa todo lo contrario o que ha manifestado que piensa todo lo contrario es medio difícil de entender para quienes creen que realmente se va a llevar a cabo la reforma.
-La diputada electa del PC, Camila Vallejo, criticó a Peirano y sostuvo que había que tener una coherencia entre el decir y el hacer.
-Camila quería escuchar el pensamiento de ella. Peirano no dijo nada, sencillamente renunció. No dijo si estaba de acuerdo con la educación gratuita. Camila no era tajante en el sentido de decir «tiene que renunciar».
-El jueves pasado, la DC realizó un llamado a «condenar la represión» del gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela. ¿Cuál es la posición del PC?
-Hay un grupo de extrema derecha que ha planteado poner las cosas en términos violentos, a tal punto que el propio Henrique Capriles se ha desmarcado de esto y ha dicho que «no es la violencia el camino». Ha dicho también que no están las condiciones como para echar a Nicolás Maduro. Los temas que tiene Venezuela tienen que solucionarlo los venezolanos sin intervención extranjera. Si hay algún atisbo de eso nosotros deberíamos condenar todo atisbo de intervención extranjera en Venezuela. Ahora si me preguntan por la diferencia que se ha establecido con la DC, eso está. Así hemos actuado juntos, con esa diferencia, y vamos a seguir actuando juntos, con esas diferencias.
-¿Qué le parecen las denuncias del diputado PC, Hugo Gutiérrez, en contra del recién designado intendente de Tarapacá, Mitchel Cartes? Gutiérrez señala que tiene dos sumarios en su contra mientras se desempeñó en la Dirección de Vialidad.
-Aquí han existido exigencias para la propuesta de nombres, que tienen que ver con la probidad de las personas. Se planteó muy claramente que no debían tener juicios pendientes. Gutiérrez ha hecho un cuestionamiento, que yo creo que tiene que quedar hasta ahí. Como en todos lo casos, creo que tiene que comprobarse. Las críticas tiene que tomarlas en cuenta la Presidenta, y ella tendrá que determinar. Gutiérrez tiene todo el derecho de hacer el cuestionamiento.
-Cuando el senador PS, Fulvio Rossi acusó de deslealtad al PC, el diputado comunista, Lautaro Carmona, pidió a Rossi a aclarar sus dichos, ¿Usted se suma a ese llamado?
– ¿En relación a qué acusa de deslealtad al Partido Comunista?
-Porque Gutiérrez le pidió la renuncia a Cartes, y dijo que quería que revisaran sus antecedentes.
-Es una acusación sin base. No le doy ninguna importancia a lo que dijo Rossi respecto de la deslealtad del PC. Entregar una opinión crítica no es ser desleal. Además sí tiene una base, porque los hechos que plantea Gutiérrez me parece que existen. El tema es si todos esos sumarios en realidad dicen que se ha cometido un dolo o no.
Fuente: El Mercurio