Una nueva denuncia de represión policial recayó sobre Carabineros. Nahuel Herane (17), perdió un ojo, mientras estaba junto a un grupo de vecinos del sector Villa Portales de Estación Central, en una actividad cultural y de protesta durante la madrugada del pasado sábado.
Mientras observaban las barricadas que se instalan en el lugar todos los días viernes a modo de protesta contra el gobierno de Sebastián Piñera, llegó Carabineros para dispersar la manifestación.
Nahuel Herane (17) acusa que efectivos policiales le dispararon a menos de 20 metros de distancia en medio de una manifestación en la comuna de Estación Central, a consecuencia de lo cual perdió uno de sus ojos.
Su familia denuncia que Carabineros ronda su casa para «amedrentarlos».
El informe del Instituto Nacional de Derechos Humanos, INDH, da cuenta de que desde el 18 de octubre pasado, se reportaron “un total de 347 heridas oculares, entre las que se cuentan estallidos del globo ocular, pérdidas de visión por trauma ocular irreversible y traumas oculares”.
A pesar del elevado número de casos y las advertencias de organismos internacionales como la ONU, que han manifestado su preocupación con el comportamiernto policial, este tipo de vulneraciones no se han detenido.
El pasado sábado 21 de diciembre se sumó el nombre de otro joven que perdió la visión de un ojo a raíz de un ataque de Carabineros. Se trata de Nahuel Herane, de 17 años, quien recibió el impacto de un perdigón en su ojo izquierdo mientras miraba las manifestaciones que se desarrollaban en la Villa Portales de Estación Central.
Desde que comenzó el estallido, en el sector se han realizado distintas actividades culturales y políticas para dar a conocer lo que está pasando en el país. Nahuel, quien forma parte del colectivo de danza y cosmovisión andina “Jiwasanaka”, participó en varias de ellas.
Mientras observaban las barricadas que se instalan en el lugar todos los días viernes a modo de protesta contra el gobierno de Sebastián Piñera, llegó Carabineros para dispersar la manifestación.
En conversación con Radio ADN, Herane aseveró:
«Como todos los viernes teníamos barricadas y actos culturales. En eso estábamos sentados y llega un carro policial lanza gases con las luces apagadas y se bajan dos carabineros disparando perdigones».
«No alcanzamos a replegarnos y me llegaron 7 perdigones: Dos en las piernas, tres en los brazos, uno en el glúteo y el otro en el ojo izquierdo que hace que perdiera la vista al 100%», agregó.
Durante la tarde de este domingo, Herane fue dado de alta desde la Clínica Santa María, lugar al que llegaron amigos y compañeros del colectivo artístico «Jiwasanaka» donde Herane participa.
Con bailes «Tinku», familiares y cercanos a al joven le brindaron sus muestras de apoyo.
Finalmente la madre del menor, Marina Garrido, confirmó que ya se hizo la denuncia ante el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) para seguir acciones legales contra los uniformados.
«Tiene una vida por delante, le quitaron un ojo, tiene el otro, tiene la vida por delante y hay que seguir exigiendo nuestros derechos», señaló.
Fuente: Radio ADN