El fiscal Pedro Salgado confirmó que en su declaración de ayer, Nabila Rifo identificó a su conviviente, Mauricio Ortega, como el hombre que la golpeó con un bloque de cemento y le sacó los ojos en la madrugada del 14 de mayo.
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El persecutor realizó esta aseveración en la audiencia de revisión de la medida cautelar de prisión preventiva de Mauricio Ortega, realizada esta mañana en la Corte de Apelaciones de Coyhaique.
Salgado dijo que en su testimonio, Nabila relató:
«Mauricio Ortega, esa noche, con alcohol, en la fiesta que estaba desarrollándose en mi casa, me persigue, me encuentra y me da alcance en el portón de nuestra casa, me empieza a golpear, intento sacar unas llaves, me sigue persiguiendo y me ataca brutalmente con elementos que ya han sido expuestos en la audiencia, como bloques de cemento y otros más».
El fiscal Salgado, al ser consultado en la audiencia por el relato de la mujer, detalló que «ella mantiene que en esa jornada, luego que abandonan las personas que eran las dos últimas que estaban en el lugar, el señor Ortega se inicia una discusión nuevamente, porque habían tenido varias dentro de la jornada».
«Él la golpea, se producen patadas, golpes y finalmente ella sale de la casa, camina hacia calle Monreal y él le da alcance», agregó.
Mientras que el defensor regional Fernando Acuña indicó:
«No olvidemos que fue una declaración que soltó ayer por la noche. Veremos en qué contexto, de qué manera, los antecedentes que entrega. Los hechos que hemos conocido hoy respecto de ella son todas situaciones que debemos ver para valorar adecuadamente dicha declaración», sentenció.
El persecutor, tras conocer la decisión, agregó:
«Evidentemente me imagino y estimamos que es un antecedente que se tuvo en consideración, sin perjuicio de otros tantos que han avalado la investigación de la Fiscalía desde el 14 de mayo hasta la fecha. Por lo tanto, seguimos trabajando muy tranquilos, de manera rigurosa, profesional y siempre considerando el prinicipio de objetividad que pesa sobre la investigación de la Fiscalía».
Rifo, a quien le sacaron los ojos y resultó con fracturas craneales, entregó su primera declaración al fiscal Luis González durante la jornada de ayer miércoles, diligencia que se extendió por cuatro horas.
Tras esto la Corte de Apelaciones de Coyhaique manifestó que no hay argumentos que justifiquen cambiar las medidas cautelares contra Mauricio Ortega por lo que el imputado continuará preso en un módulo de aislamiento en el penal de la capital de Aysén.
Hay que recordar que el 13 de julio la justicia de Aysén decidió mantener la prisión preventiva de Ortega debido a que no se presentaron antecedentes relevantes como para cambiar esa determinación.
La madre de la mujer agredida, Noelia Ruiz, dijo este jueves a SoyTV que está tranquila sobre el procedimiento judicial «porque se esperaba que ella tenía que declarar. De primera tuve miedo pero para ella era importante esto de declarar».
La mujer dijo que su hija Nabila «está muy bien, recuperándose. Todavía está con su tratamiento, que fue muy difícil. Sé que se va a seguir recuperándo y va a salir todo bien. El pensar uno que quiere salir adelante lo logra, con la ayuda de Dios, lo logra. Ella está muy contenta desde el primer momento en que pudo abrazar a sus hijos».
Este miércoles, Nabila Rifo declaró por primera vez ante el fiscal Pedro Salgado, en un procedimiento que duró cerca de cuatro horas.
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El hecho ocurrió el pasado 14 de mayo, cuando fue encontrada con signos de hipotermia, diversas fracturas en el cráneo, en sus piezas dentales y sin sus globos oculares, manteniéndose grave y en riesgo vital durante varias semanas y siendo trasladada hasta la ex Posta Central en Santiago.
Nabila Rifo tuvo un largo proceso de recuperación en la ex Posta Central, tras lo cual fue derivada a Coyhaique, para que esté más cerca de su familia, situación que ayudará en el bienestar psicológico de la joven.
El fiscal Salgado se había reunido en varias oportunidades con la mujer previo a la declaración de ayer miércoles y ella solo dejó la ex Posta Central el martes 5 de julio, para continuar su recuperación en Coyhaique.
Tras casi dos meses de tratamiento, Rifo fue dada de alta el lunes 11 de julio.
Ortega, quien es padre de dos de sus hijos, seguirá cumpliendo la prisión preventiva en la Cárcel de Coyhaique, donde se mantiene en un habitáculo especial debido a amenazas de muerte en su contra.
