En la segunda cumbre de estados Latino Americanos y caribeños, (CELAC) , sus miembros declararon a América Latina y el Caribe, como una zona de Paz, bajo los principios de Paz, Democracia, Desarrollo y Libertad.
Todos los procesos emancipadores que se llevan a cabo en la región, tienen como base de su desarrollo la Paz, que como concepto no solo es la ausencia de guerra, sino también el respeto irrestricto a los derechos y dignidad de todos los seres humanos.
Es así como Bolivia, Ecuador, Venezuela y Nicaragua han ido sentando las bases institucionales, económicas y culturales para alcanzar una sociedad más solidaria, más justa y respetuosa de los derechos de todos sus hijos.
Los pueblos donde mejores niveles de vida y felicidad alcanzan es en un estado de Paz.
En contraposición a lo antes planteado, el imperialismo norteamericano siembra guerras por todo el mundo, derroca gobiernos cuando estos no se ciñen a sus mandados y va como Pedro por su casa saqueando las riquezas de los pueblos.
Al imperio no le gusta cuando un país decide construir su propio destino, cuando este se decide a recuperar para si sus riquezas básicas y recursos naturales, tampoco le gusta que los pueblos se reúnan como hermanos y decidan en forma soberana un camino propio.
De esto los chilenos sabemos mucho y tenemos una vasta experiencia de atropellos y saqueos a nuestro país y de crímenes contra nuestro pueblo, donde el imperio de EEUU siempre ha tenido sus garras metidas y contado con la derecha política y la oligarquía nacional.
Es por ello que como defensores y promotores de los DDHH, no podemos ni debemos estar indiferentes ante las agresiones que hoy sufre nuestro hermano pueblo de de Venezuela, quien con tanta bondad y hermandad nos tendió la mano, cuando en nuestro país se derroco al Presidente Salvador Allende y se instauro la dictadura de Pinochet, apoyada por los grupos económicos , las transnacionales y la derecha, que durante 17 años arrasaron con nuestras riquezas y sometieron a todo un pueblo. Hoy quieren repetir estos mismos hechos con Venezuela, lo cual rechazamos enérgicamente.
Hacemos un llamado a los demócratas chilenos y organizaciones populares, a salirle al paso a las agresiones de EEUU, en contra del pueblo de Bolívar y Chávez y a nuestras autoridades políticas a tomar iniciativa en favor de la defensa de la democracia, autodeterminación del pueblo venezolano y no injerencia de EEUU, ya que el gobierno Norteamericano no desiste en su intención de derrocar al gobierno democrático de Nicolás Maduro.
Comité DDHH La Pintana