Miles de estudiantes se manifestaron este 17 de octubre en Santiago en la sexta marcha en lo que va de 2013, para pedir cambios estructurales en educación. Si bien el movimiento esdtudiantil no ha encontrado respuesta a sus demandas desde la eclosión de 2011, eso no significa en modo alguno una derrota, ni mucho menos. De hecho, el gobierno de la derecha está prácticamente derrotado en la próxima elección, mientras que las demandas del movimiento estudiantil ya están incorporadas al programa del próximo Gobierno de Nueva Mayoría.
Más de 50 mil participantes tuvo la marcha estudiantil convocada por los estudiantes universitarios aglutinados en la CONFECH y los secundarios de la CONES y la ACES, manifestación a que se adhirieron el Colegio de Profesores y diversas organizaciones de padres y apoderados.
La multitudinaria marcha se inició minutos después de las 11:00 horas, en Plaza Italia. La multicolor columna continuó por Alameda, luego tomó al norte por Mac Iver, llegando al Parque Forestal, en donde enrumbó hacia el poniente, hasta el escenario central dispuesto a metros de la Estación Mapocho.
A las tradicionales demandas sistematizadas desde ya tres años por el movimiento estudiantil, la manifestación de hoy se vio cruzada por la polémica desatada por el ranking de notas, iniciativa anunciada por el Consejo de Rectores y que fue rechazada por los establecimientos emblemáticos y por el propio Ministerio de Educación.
«La educación chilena no se vende, se defiende», gritaban los alumnos mientras recorrían las avenidas del centro de Santiago, con silbatos y cánticos. En la marcha participaron, según los organizadores, unas 50 mil personas, entre ellos, estudiantes universitarios, secundarios y profesores. Estos últimos fueron representados por la directoras nacionales Silvia Valdivia y Ligia Gallegos, que marcharon junto a los jóvenes.
Los estudiantes reiteraron sus solicitudes de una educación pública gratuita y de calidad, en un país con un sector educativo fuertemente privatizado. Pero también pidieron conocer en detalle los programas educativos de los candidatos presidenciales.
«Exactamente un mes antes de las elecciones presidenciales, reafirmamos con mucha fuerza que si no es con los estudiantes, con los apoderados y con los profesores, no va a haber ningún cambio en la educación que realmente valga la pena», dijo Andrés Fielbaum, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH).
En sus pancartas los estudiantes criticaron el modelo educativo impuesto durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y que se mantiene vigente hasta hoy, provocando una profunda brecha de desigualdad entre los estudiantes en función de su origen social.
Estudiantes emplazan a candidatos
A un mes de las elecciones se realizó una nueva marcha estudiantil que convocó a miles de estudiantes y trabajadores que manifiestan sus posturas ante la coyuntura electoral. Además, se hizo un balance de lo que ha sido el Gobierno de Sebastián Piñera y se expusieron nuevas demandas, que se suman a las históricas levantadas por el movimiento estudiantil.
Se trató de una marcha multitudinaria a un mes de las próximas elecciones parlamentarias y presidenciales, justamente la tónica del discurso de las organizaciones que convocaron.
La Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (CONES) y la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) coincidieron en la necesidad de incidir en el proceso eleccionario manteniendo la autonomía del movimiento.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (FEUC), Diego Vela, explicó los objetivos de la movilización, la sexta marcha oficial convocada por las organizaciones del movimiento estudiantil en lo que va de este año.
“Esta marcha la realizamos a un mes de las elecciones, marcando un hito de fuerza. Los cambios deben surgir de la mano de los movimientos sociales, la realidad de estos 23 años demuestra que si no estamos movilizados, los cambios no llegan. Acá no se tienen que buscar votos, sino cambios concretos, y eso se reflejará en la movilización a nivel nacional”, dijo el titular de la FEUC.
Los organizadores cifraron en 50 mil los asistentes, mientras que Carabineros habló de 12 mil manifestantes, pero sin duda fue una protesta numerosa.
A los estudiantes de distintas casas de estudios, superiores y escolares, se sumaron diversos movimientos políticos y agrupaciones sindicales como los profesionales de los servicios de salud (Fenpruss), los trabajadores en huelga del supermercado Montserrat, entre otros.
Los discursos en el acto central apuntaron a relevar las demandas históricas del movimiento, emplazar a los candidatos presidenciales y criticar al Gobierno de Sebastián Piñera por no dar respuestas a las reivindicaciones planteadas al menos desde el año 2011.
Así lo expuso el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH) Andrés Fielbaum, quien dijo que el Ejecutivo, junto a una inexistente oposición política, han frenado el avance de las demandas ciudadanas.
El dirigente indicó que “en estos tres años chocamos contra un muro, que venía de un gobierno que ve la educación como bien de consumo. Fracasó y hoy vemos una candidata que quizá sea la peor candidata de la derecha. También chocamos contra un muro de una oposición política y la complicidad del Parlamento para rechazar el informe que denuncia lucro, o aprobar un ajuste tributario que atacaba justo a la educación pública”.
Para estos días que quedan, previos a las elecciones, los estudiantes no descartan nuevas acciones, sobre todos desde la ACES, según manifestó la vocera Isabel Salgado: “Los estudiantes sí nos estamos organizando, es posible que se vengan acciones mediáticas. Nosotros no estamos por la vía institucional, sino por la construcción anti-electoral, por lo tanto no hay nada concreto, pero sí se vendrán acciones, estamos convencidos que no es posible que continúe el engaño a la ciudadanía. La única forma de hacer los cambios es con organización y construyendo”.
Otra de las demandas presentes en la marcha fue la campaña “Alto al Simce”, que pretende cambiar este examen de medición, ya que a juicio de los organizadores no contribuye a la calidad de la educación sino a la segregación.
Además, estuvieron presentes profesores y estudiantes de liceos de comunas como Renca, en procesos de cierre o fusión; proceso del que se ha responsabilizado al Gobierno y a las administraciones municipales.