Existe en los discursos políticos de la derecha una recurrente pronunciación con base a los aspectos económicos del país, ya sea para apoyar o rebatir iniciativas de orden legal o social. La derecha tiene aprendido el discurso neoliberal, el cual tiene entre sus principales características las siguientes a) abandono del compromiso del pleno empleo por el compromiso con la inflación, b) separación de la relación de los salario y el crecimiento de la productividad, c) jibarización de los estados y d) flexibilización de los mercados, principalmente el mercado del trabajo.
Este arco argumental fue el de consenso durante los 25 años después de terminada la dictadura. Lo que se conocía como economía política del capital se transformo en el pensamiento único y por esa vía hundió cualquier posibilidad de critica desde la economía política, mas particularmente desde la economía política del trabajo.
Entonces parece ser una necesidad ineludible que la izquierda reposicione la economía política del trabajo, pero no simplemente copiando o restituyendo las ideas que se tenían hace 40 años, debemos buscar una construcción para nuestra época, para nuestra Latinoamérica.
Por lo tanto el objetivo de este articulo es ayudar a construir, a través del estudio del concepto de Demanda Efectiva construido por Michal Kalecki1, los primeros cimientos de una economía política del trabajo para nuestros tiempos.
Vamos a partir evaluando el impacto de la demanda efectiva sobre la demanda de trabajo, para lograrlo vamos a mostrar que, para el aumento de la ocupación no hace falta la reducción de los salarios reales. Esto significa que el proceso de aumento de los salarios reales, nos lleva a un alza en la demanda de los productos y por tanto, un aumento en la demanda de los trabajadores y la reducción del desempleo.
Así, la subida del salario mínimo y el alza del salario medio van a tener efectos positivos sobre la actividad económica y la ocupación, contrariamente a lo que afirman los adeptos de la economía neoclásica.
Primero vamos a definir los componentes de la demanda efectiva como la inversión, el consumo y el gasto publico, pero en el corto plazo y simplificando la economía sin gasto públicos, tenemos que las variables mas importantes de la demanda serán inversión y consumo.
Michal Kalecki (1) estableció una relación que define los beneficios macroeconómicos, a base de unas ecuaciones sencillas, llego a la siguiente ecuación.
PIB= Salarios +Beneficios = Consumo + Inversión. [1]
Como Marx estableció, los trabajadores gastan completamente su salario, entonces :
Consumo sobre salarios = Salarios.
Simplificando llegamos a la famosa ecuación de Kalecki:
Beneficios = Consumo sobre beneficios + Inversión. [2]
Esto da paso a la siguiente afirmación de Kaldor, “los capitalistas ganan lo que gastan y los trabajadores gastan lo que ganan”, esto explica que los capitalistas son capaces de definir su nivel de consumo e inversión, lo que da paso a los beneficios que obtienen.
El problema de la actual recesión económica es que el consumo sobre los salarios ha bajado consistentemente, explicado principalmente por el bajo poder de negociación de los trabajadores, y por que los capitalistas están invirtiendo menos que lo que son sus beneficios, contrayendo el crecimiento económico en el mundo.
Ahora vamos a introducir la función de utilización, es la función de producción moderna en la economía Kaleckiana, la cual postula que no existen rendimientos decrecientes, al menos en tanto que y mientras que el coeficiente de utilización (2) de la capacidad de producción sea inferior a la utilidad.
Los rendimientos son constantes. Suponer que no estamos en la utilización plena de los recursos o sea un PIB mas bajo que el potencial, es una de los principales razones para llegar a soluciones distintas a las del pensamiento único del modelo neoliberal (3).
Recientemente el Banco Central de Chile fijo el PIB potencial del país en 4,5% y la economía chilena va a tener un PIB real de 1,8% a fin de este año, es claro que este supuesto, de no utilización plena de los recursos, es pertinente.
Dada esta función de utilización, un aumento del salario real nos lleva a un desplazamiento a lo largo de la curva de demanda efectiva de trabajo. La subida del salario real acarrea, por tanto, un nivel de ocupación mas elevado. Tenemos pues una proposición exactamente contraria a los preceptos sostenidos por los defensores del modelo neoliberal, este es un elemento constitutivo de la economía política del trabajo.
Pero esta es una paradoja, cualquier economista diría que por microeconomía un aumento de costos, como son los salarios, debería llevar a la empresa a un nivel menor de ocupación de empleo. El asunto es que lo que puede ser cierto a nivel microeconómico es falso a nivel macroeconómico, si todas o la mayoría de las empresas hacen lo mismo.
Pues si todos bajan sus coste a través de los salarios, mientras aumentan el margen de beneficios y conservan los precios a un nivel fijo, las empresas en su conjunto venderán menos productos, y no por eso van a subir sus beneficios.
La causa de esta reducción es la baja de la demanda global que acontece como consecuencia del cambio en el reparto de los ingresos, en detrimento de los asalariados, pues son estos lo que tienen una propensión a consumir superior a la de los receptores de beneficios o capitalistas.
Entonces es claro que, el aumento de los salarios reales permite una expansión de la demanda real global y, por tanto, un crecimiento de la producción y el empleo.
Mercado Laboral
Dada estas conclusiones, veamos como el tipo de estado que poseemos incide en la obtención de mejores o peores resultados macroeconómicos. El mercado del trabajo puede conducir a dos soluciones una con bajo empleo y bajos salarios y otra con alto empleo y altos salarios (4) , la situación mas verosímil va a estar determinada por el tipo de institucionalidad laboral (5) existente, donde se limite o no a las fuerzas del mercado laboral.
El análisis muestra que las fuerzas del mercado si son dejadas a su libre albedrío, tendrán tendencia a orientar la economía hacia el equilibrio bajo de pleno empleo, esto es, un equilibrio con débil salario real y con un nivel de ocupación y de producción. Para una población dada, eso implica que el nivel de vida alcanzado por esta población seria notablemente inferior al nivel de vida
que podría alcanzarse en el caso de un equilibrio alto, el correspondiente al salario real mas alto y al nivel de ocupación mas alto.
Este es el principal efecto del plan laboral de la dictadura que debilitó a los sindicatos, desvirtúo la negociación colectiva y desequilibro las relaciones laborales.
Entonces aparece el debate de el nivel de rigideces que debe tener una economía, la cual puede estar desprovista de rigideces o sea sin ningún tipo de regulación de las relaciones laborales, salarios o con un bajo nivel de reglamentación jurídica, todo esto enmarcado en una institucionalidad laboral flexible. En este caso las fuerzas de mercado van a empujar a la economía a un
equilibrio bajo empleo y bajos salarios, esto es lo que conocemos coloquialmente como la flexibilidad laboral que demanda el empresariado y las fuerzas de la derecha en Chile.
A diferencia de lo que piensan los defensores del modelo neoliberal, la acción combinada de la flexibilidad de precios y las fuerzas del mercado no conducen necesariamente al mejor de los resultados posibles. En una economía provista de rigideces, entendida como altos equilibrios en las relaciones laborales, alta regulación de salarios y con una adecuada legislación laboral, o sea con una institucionalidad laboral estable.
En nuestro caso, la presencia de sindicatos potentes que, en presencia de paro, impiden la caída de los salarios reales va a tener efectos benéficos en el empleo, la producción y el nivel de vida de los ciudadanos.
Pero un equilibrio de alto empleo y altos salarios, solo es posible mantenerlo con la acción permanente del estado. El estado debe intervenir para conservar los salarios reales altos inclusos en periodos de paro, a través de políticas salariales como el salario mínimo que presionen al alza los salarios en el resto de la economía, imponiendo salarios altos en el sector publico y adoptando leyes que favorezcan la constitución de sindicatos fuertes, capaces de contrarrestar el poder de las empresas.
Si hacemos un cuadro completo para describir un ciclo económico que le de sentido al arco argumental desde la economía política del trabajo, debemos partir por un crecimiento salarial real, el que propulsa la demanda efectiva , esta a través del consumo incrementa el empleo, esto incentiva a su vez un incentivo a la inversión, lo que trae un mayor crecimiento de la productividad.
Este es un ciclo virtuoso por que va encontrando equilibrios con mayores niveles de empleo y salarios. Este ciclo tiene su punto máximo cuando alcanzamos la producción plena en la economía y los aumentos salariales se cancelan con los aumentos en la inflación. El problema actual del ciclo esta atado a los bajos salarios que impiden que se inicie el ciclo virtuoso, el cual puede ser gatillado por una institucionalidad laboral mas rígida y un estado mas comprometido.
Este debiera ser el principio de construcción de un arco argumental de para la izquierda, donde evidentemente existe mucho mas que debatir, pero con un elemento central, debemos terminar con la hegemonía del pensamiento único.
La economía es una ciencia social en disputa.
(*) Economista
Notas
(1) Economista polaco que se especializó en macroeconomía y desarrolló tres años antes gran parte de los principios que sostendría John M. Keynes, principalmente el concepto de demanda
efectiva, pero desde una base marxista y no neoclásica. Es considerado como uno de los más grandes economistas del siglo XX.
(2) Si el coeficiente de utilización es menor a 1, existe espacio inutilizado de producción, si es igual a 1 la economía ocupa toda su capacidad de producción.
(3) Principalmente por que si no utilizamos toda la capacidad productiva un alza de salarios va a tener un bajo efecto sobre la inflación, lo que implica que el alza salarial sea real y no nominal.
(4) Cuando la oferta de trabajo tiene pendiente positiva, o cuando se curva sobre si mismo, producto de la primacía de los efectos ingreso o sustitución sobre la curva.
(5) Se entiende a la institucionalidad laboral, como todas las instituciones, leyes y regulaciones en torno al mercado laboral.