El dicho, el que nada hace nada teme, no califica en los casos de la senadora de la UDI, Ena von Baer, y el candidato profesional a la Presidencia de la República, Marco Enríquez Gumucio, MEO. Antes bien, el que les calza a la perfección es: que tu mano derecha no sepa lo que hiciste con la izquierda.
En efecto, MEO salió del tribunal con una estrategia mediática cuidadosamente estudiada.
«He renunciado a mi derecho a guardar silencio. Le he planteado a la Fiscalía que mi declaración sea pública. A su vez, he aportado un conjunto de documentos que creo importantes para la investigación. Confirmo y reafirmo que he actuado de acuerdo a la ley, de manera legal», dijo a la jauría mediática que lo esperaba anhelante.
Lejos de dar luces sobre cuál fue el contenido del interrogatorio, el dos veces candidato presidencial apostó por desviar la atención hacia ese mismo terreno, apuntando a Sebastián Piñera, el ex mandatario cuya figura también está cuestionada: .
“Valoramos mucho la presión de la prensa, qué bueno que tengan interés, y ojalá también para las demás candidaturas que tuvieron campañas que están cuestionadas, la misma presión. Pero quiero decir también a Sebastián Piñera, que hay que debatir de los temas que importan al país. Me desafiaste, te desafié, te estoy esperando, yo espero que tengamos ese debate sobre los temas que le importan al país”.
Pero como antes se pilla al mentiroso que al cojo, distintos medios de prensa filtraron lo que en realidad sucedió en el interrogatorio, por cierto diametralmente opuesto
De hecho, El Mercurio consignó que el ex candidato presidencial «rehuyó algunas consultas de los fiscales» y «no autorizó» al Ministerio Público para «acceder a sus cuentas bancarias y así alzar voluntariamente el secreto bancario que las protege».
Esto significará que el equipo liderado por el fiscal regional de Valparaíso, Pablo Gómez, deberá evaluar en los próximos días la solicitud de alzamiento de las cuentas de ME-O, pero bajo orden judicial.
Para ello, deberán exponer ante un juez de garantía cuáles son los antecedentes con los que cuentan para sospechar que el ex candidato presidencial solicitó aportes de SQM a su campaña (ver recuadro), a cambio de facilitar facturas falsas de la empresa Cristián Warner Comunicaciones Publicidad y Marketing EIRL.
La Tercera informó que «el líder del PRO no concluyó su interrogatorio, ya que tras volver de un receso, se quejó de la forma en que se estaba desarrollando la diligencia, notificando que a partir de ese momento se acogía a su derecho a guardar silencio».
El diario La Segunda señaló que Enríquez-Ominami realizó inicialmente una «exposición» respecto a lo que su abogado, Ciro Colombara, «consideraba importante aportar a la investigación».
Su actitud cambió, sin embargo, cuando los fiscales Arias y Segura comenzaron a interrogarlo «sobre cómo se gana la vida». Entonces «la diligencia mostró sus mayores momentos de tensión», según el relato textual que hace el propio vespertino.
Frente a tales preguntas, y «a instancias» de Colombara, el dos veces aspirante a La Moneda se acogió a su derecho a guardar silencio, y «la negativa (a responder) se repitió cuando se le consultó por los medios de pago que recibe, si eran en efectivo o mediante depósitos, y en cuántas sociedades participa».
Después, «ante el reclamo del abogado, uno de los persecutores le aclaró que la dirección de interrogatorio la hacía el fiscal y no los interrogados, porque es una diligencia de investigación». .
«En ese punto la defensa del líder del PRO solicitó un receso» y, tras éste, el ex diputado y ex militante socialista simplemente «dejó de responder».
Luego «vino su negativa a dar autorización para levantar el secreto bancario de sus cuentas corrientes y a la revisión de sus cuentas de correos electrónicos», detalló La Segunda.
El mismo diario recordó que en una entrevista que le hizo a comienzos de este año, Enríquez-Ominami contó que repartía los gastos de su casa con su esposa, la periodista Karen Doggenweiler, y que la principal fuente de sus ingresos era la productora Rivas & Rivas Limitada, que creó en 1998 y a través de la cual recibe los derechos televisivos de series como «La Vida es una Lotería», que vendió a países como Argentina y Estados Unidos.
En dicha ocasión explicó que también era remunerado por clases y charlas que dicta en países extranjeros.
Una cosa es dejar en reserva la fuente de sus ingresos, pero otra muy distinta es señalar con su habitual soltura de cuerpo, que había renunciado su «derecho a guardar silencio», y que le había planteado a la Fiscalía que su declaración sea pública.
Ena von Baer rechaza alzamiento de su secreto bancario
La defensa de la senadora UDI Ena von Baer solicitó al Octavo Juzgado de Garantía de Santiago que rechace la petición de levantar el secreto bancario de la parlamentaria realizado por la Fiscalía.
El argumento, según el abogado de la senadora, Matías Balmaceda, es que «no existe denuncia ni querella alguna presentada por el SII en contra de la actual senadora».
El escrito consigna que el entonces Fiscal Nacional Sabas Chahuán «señaló que no se iniciaría investigación respecto de personas en contra de las cuales el Servicio de Impuestos Internos no hubiere presentado denuncia o querella de forma nominativa o en contra de quien resulte responsable».
Además, la defensa de la senadora hizo uso de su fuero parlamentario y asegura que bajo dicha condición «resultan del todo atentatorias en contra de la libertad de la senadora, en el entendido que la diligencia estaría afectando sus derechos fundamentales garantizados por la Constitución Política de la República y demás leyes especiales que rigen la materia».
Finalmente, argumenta que la senadora no ha sido notificada formalmente de la solicitud del Ministerio Público.
El 10 de diciembre el Ministerio Público pidió acceso a las cuentas bancarias de la senadora para determinar si recibió recursos desde las empresas Penta. En su declaración, Jovino Novoa, «mentor» político de Von Baer y primer condenado en este caso, admitió que le entregó $5 millones provenientes de las donaciones de Penta.
Además, aunque hasta ahora lo ha negado, están los correos de la propia Von Baer pidiendo ayuda financiera a Carlos Alberto Délano.
También se han conocido correos de su hermana Karina a Patricio Contesse, «presentándole» al nuevo y prometedor prospecto político de la derecha, que merecía apoyo por su «proyecto».