A pesar de no contar con autorización de la Intendencia, esta mañan estudiantes secundarios y universitarios convocaron a marchas en varios sectores de la capital. Mediante carros lanza aguas y lanza gases, la policía impidió el libre tránsito de los manifestantes, alteró el flujo vehicular y peatonal en varios puntos de la ciudad, y detuvo a numerosos estudiantes que se desplazaban a rostro descubierto.
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El motivo de las movilizaciones es el rechazo por parte de los estudiantes a la reforma a la educación superior ingresada ayer a la Cámara de Diputados. Los estudiantes convocaron, además, a una marcha de carácter familiar para este domingo 10 de julio.
Al menos 30 personas resultaron detenidas.
Debido a que la marcha no fue autorizada por la Intendencia, los manifestantes se reunieron en pequeños grupos y buscaron acercarse a La Moneda y al Ministerio de Educación, producto de lo cual fueron dispersados por Carabineros.
Durante la manifestación, el vocero de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES), Diego Arraño, manifestó:
«Ya no dejaremos que ministros como la Delpiano sigan haciendo que la educación sea un bien de consumo, que sea un derecho social, nosotros lo hemos planteado en cada marcha (…) por eso pedimos su renuncia».
Las improvidadas columnas sólo avanzaban unos metros, cuando les caía la arremetida policial, que intentaba deisuadir a los asistentes con carros lanzaguas y lacrimógenos.
Pese a ello, una de la columna se reagrupó e intentó avanzar por la Alameda, en dirección hacia La Moneda, donde también se generaron disturbios.
A la altura del paseo Bulnes, pese a que la movilización comenzó de manera pacífica, al llegar a la Alameda, se gatillaron los incidentes.
Esa fue la tónica de la jornada de hoy, las cuatro columnas avanzaban y en ciertos puntos se producían los enfrentamientos con las fuerzas policiales. Incluso, en algunos sectores se intentaba levantar barricadas.
Se reportaron varios detenidos.
En esa línea, se informó de la detención de un camarógrafo de Televisión Nacional de Chile, el cual vio destruido su elemento de trabajo. Se trata de Gonzalo Carvajal, quien estaba grabando la protesta estudiantil .Ante dicha situación, Carabineros expresó las excusas correspondientes e informó que no se adoptó el procedimiento legal en su contra.
La movilización, según la Confech, obedece a que el proyecto de ley no profundiza la forma en la que se fortalecerá la educación pública, ni la regulación que existirá hacia los privados que hay en el sistema.
En esta línea, Camila Rojas, presidenta de la Fech, sostuvo que «la idea es sociabilizar nuestras demandas. Tenemos claro que es necesario interrumpir lo menos posible, la vida normal de los santiaguinos y santiaguinas».
Por su parte, el vocero de la Confech, Gabriel Iturra, ante la negativa de las autoridades, dijo que «nos vemos prácticamente en la obligación de salir a marchar. La irresponsabilidad es de la Intendencia que no da las autorizaciones. Es nuestro legítimo derecho».
La idea, según los organizadores, era que esta fuera una movilización distinta y cultural, que tenga el foco en la educación, por lo que llamaron a marchar de manera pacífica y evitando los episodios que muchas veces se presentan en estas iniciativas.
Los estudiantes convocaron a una jornada familiar para el próximo domingo 10 de julio.
Valparaíso: Marcha finalizó con 18 detenidos
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Por su parte, en Valparaíso, donde la manifestación estaba autorizada, las movilizaciones estudiantiles comenzaron en las afueras del Insuco en la avenida Argentina, luego en las afueras del Congreso y la marcha que finalizó con incidentes.
Estos se registraron en la Plaza Victoria y en avenida Errázuriz, y también hubo incidentes con personas que querían regresar hacia el Congreso. Finalmente hubo 18 detenidos.
El gobernador Jorge Dip dio cuenta que «según cifras entregadas por Carabineros, tuvimos alrededor de 1.700 participantes en la marcha. La mayoría de ellos respetaron el trazado y llegaron hasta la calle Edwards con Condell, como se había autorizados».
«Sin embargo, un grupo de alrededor de unos 200, fuera de trazado, intentó llegar por distintos lugares hasta el Congreso y fueron disueltos por Carabineros, ya que no estaban respetando el trazado. Producto de eso y de algunas escaramuzas menores que se dieron en la ciudad, tenemos un balance de 18 detenidos», detalló.
Aclaró que no hay registro de daño a la propiedad privada ni al comercio, por lo que realiza «un balance relativamente positivo».
Los organizadores aseguraron que alrededor de 10 mil personas marcharon en Valparaíso.