Sorpresa e indignación causó en redes sociales una fotografía de uno de los dueños de Penta, el empresario Carlos Eugenio Lavín, caminando relajadamente en las calles de París, donde actualmente se encuentra. Ello porque se está formalizado en el “Caso Penta” y se encuentra restringido en su libertad con la medida cautelar de arraigo nacional.
<script async src=»//pagead2.googlesyndication.com/pagead/js/adsbygoogle.js»></script>
<!– Banner Articulos –>
<ins class=»adsbygoogle»
style=»display:block»
data-ad-client=»ca-pub-2257646852564604″
data-ad-slot=»2173848770″
data-ad-format=»auto»></ins>
<script>
(adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});
</script>
Sin embargo, Lavín goza de permiso otorgado por el Octavo Juzgado de Garantía, tribunal que tramita la causa en su contra y en donde existe otra centena de imputados. Como se recordará, el empresario UDI está formalizado por delitos reiterados de fraude al fisco, soborno y otros ilícitos, relacionados al financiamiento ilegal que desde esa empresa se hacía a la UDI.
Esta empresa se «había practicamente comprado a la UDI» con sus platas sucias.
La fotografía, acierto de la cibernauta María Pilar Marambio, fue subida a la red social twitter junto al comentario:
«Así disfruta su arraigo nacional en Paris #carloslavin».
Lavín ha logrado rebajar de manera importante las medidas cautelares que se habían aplicado en un principio en su contra, que incluso lo llevaron a estar privado de libertad en el Anexo Cárcel Capitán Yáber.
El empresario fue considerado «un peligro para la sociedad» en la resolución que ordenó su inmediata internación en el anexo a cargo de Gendarmería de Chile el pasado siete marzo del año recién pasado.
Actualmente está sujeto a la cautelar de firma quincenal y arraigo nacional.
Justicia que se dilata no es justicia
<script async src=»//pagead2.googlesyndication.com/pagead/js/adsbygoogle.js»></script>
<!– Banner Articulos –>
<ins class=»adsbygoogle»
style=»display:block»
data-ad-client=»ca-pub-2257646852564604″
data-ad-slot=»2173848770″
data-ad-format=»auto»></ins>
<script>
(adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({});
</script>
Para el abogado querellante en esta causa por corrupción, Mauricio Daza, «no es de extrañar que Lavín haya obtenido el permiso, toda vez que no se encuentra cumpliendo una condena», sino que solo está sujeto a medidas cautelares de carácter preventivo. Lo anterior, para el profesional no implica de modo alguno que sea una señal en relación a la voluntad de los querellantes de llegar a un juicio oral que implique una eventual pena efectiva en contra del empresario.
«La voluntad nuestra es llevar esto rápido a un juicio oral, sino se va diluyendo la causa, no es un indicador (este permiso) sobre cuál va a ser el destino judicial del señor Lavín», señala a Cambio21 Mauricio Daza.
«Las medidas cautelares no pueden ser una sanción anticipada -asegura-, la sanción debe darse eventualmente como sentencia en un juicio oral y, en este caso, atendido el criterio aplicado por el tribunal al establecer las primeras cautelares a Lavín, tuvo en consideración la pena probable en caso de ser condenado y en ese momento se consideró cierta la posibilidad de que cumpla una pena efectiva de cárcel», espeta Daza.
Lavín no es el único formalizado asociado a casos de corrupción política que obtiene autorización del Octavo Juzgado de Garantía para ausentarse del país. Ya lo hizo con el exalcalde de Santiago, el UDI Pablo Zalaquett, imputado por el delito de “facilitación de facturas ideológicamente falsas” en el mismo “Caso Penta”.
Lo paradojal es que la autorización fue solicitada por Zalaquett para asistir a un partido del club Real Madrid en el estadio Santiago Bernabéu. El tribunal la concedió al igual que al dueño de Penta.
Fuente: Cambio 21
