Acompañadas por la concejala Alejandra Placencia, apoderadas del Jardín Infantil Naranjitas de Ñuñoa denunciaron lo que consideran una actitud negligente del municipio en la reconstrucción de este establecimiento.
Carcomido casi por completo por una plaga de termitas, el recinto lleva más de dos años abandonado, y los niños Naranjitas fueron trasladados temporalmente a otro establecimiento que no cuenta con las condiciones necesarias.
En 2013, la entonces directora del jardín infantil levantó al alerta al Concejo Municipal, vía correo electrónico, solicitando ayuda urgente. Desde entonces, Placencia realiza gestiones con Junji para conseguir recursos que permitan reconstruir las dependencias, lo que hoy nuevamente se ve retrasado por la no entrega de documentación por parte de la Dirección de Obras Municipales.
La concejala señala que “ha sido una constante la actitud indiferente y negligente del municipio con los padres y apoderados, con los niños, con los trabajadores de este establecimiento, que necesitan una solución y llevan esperando más de tres años. Pensamos que el cambio de alcalde tatería buenas noticias para el Naranjitas, pero lamentablemente no ha sido así”.
Gracias a gestiones de la diputada Maya Fernández, el Ministerio de Bienes Nacionales, dueño original del terrero en que se encuentra el jardín de administración municipal, cedió este bien al municipio de Ñuñoa, para facilitar la postulación a recursos desde la Junji, organismo que siempre ha estado disponible a destinar los dineros necesarios para reconstruirlo por completo. Sin embrago, la autoridad comunal no ha cumplido con su parte para que esto se concrete.
El jardín Naranjitas está emplazado en el sector sur poniente de Ñuñoa, en la Población Exequiel González Cortés. Brinda educación preescolar a cerca de 100 niños y niñas, cuyas familias precisan de un jardín en su población, importante rol social que hoy se ve impedido de desempeñar.