Frustrado se mostró el presidente Sebastián Piñera, al ratificarse que el proyecto que prometía ser “la postal de Chile” había fracasado. Los brazos mecánicos, tableros basculantes, del puente Cau Cau de Valdivia fueron instalados al revés. El apuro por cerrar el gobierno con “proyectos relámpagos” y aquellos “emblemáticos” –como este- ha demostrado que de excelencia la actual administración tenía poco.
A fines de noviembre pasado, las autoridades hablaban sobre los avances del puente Cau Cau en Valdivia, de la marcha blanca desde enero y su puesta en marcha desde mayo. Sebastián Piñera, como ya es costumbre, alzó la voz y le puso énfasis al diseño de la obra diciendo que esta sería la futura postal de Chile. Frase que fue reiterada por la ministra de Obras Públicas, Loreto Silva, en un visita inspectiva a la zona.
Pero… ¿cómo vamos a presentar Chile con una estructura al revés?
Hace dos días la seremi de Obras Públicas de la Región de Los Ríos, Heidi Machmar, confirmó que se instaló erróneamente los brazos mecánicos del puente Cau Cau en la ciudad de Valdivia.
Acto seguido, la funcionaria señaló que hubo un error por parte de la empresa española Azvi, la cual instaló en el sector de la Isla Teja el brazo basculante que debería estar ubicada en el sector de Las Ánimas y viceversa.
Fue así como catalogó el error como un «problema de constructividad en los tableros basculantes», remarcando que la empresa deberá asumir los costos económicos del error.
Pero no se trata solamente de un error «técnico» y así lo dijo el el actual diputado y senador electo Alfonso de Urresti (PS), en declaración a Cambio21:
«Yo pedí formalmente investigaciones en relación al falso topógrafo que estaba a cargo de esta obra y que le habían dado carácter reservado a todo lo que estaba pasando respecto a la construcción del puente. Las autoridades regionales fueron y supuestamente corroboraron que estaba todo en orden y hemos visto un festival de declaraciones de la Seremi, la ministra de Obras Públicas, del Intendente y cada una ha sido contradictoria entre ellas. Esperemos tener una respuesta final que sea con una investigación de la Contraloría, que clarifique y dicte sanciones».
Por su parte el ex intendente de Los Ríos y actual diputado electo Iván Flores (DC) agregó:
«La información que tengo es que alguien cometió un error en la interpretación de los planos respecto de la carpeta de uno de los brazos. Además cambiaron de inspección técnica. En buena parte la obra era regional y entiendo que hace unos meses está a cargo de Santiago. Entonces descoordinaron a la región. Por un lado tenemos una responsabilidad técnica respecto a una solución equívoca, pero también una responsabilidad administrativa porque le sacan a la región la obligación de llevar sus propias obras y tercero la responsabilidad política, porque aquí nadie asume porque en definitiva cada voz dice algo diferente. Es una cadena de errores».
«En estos temas con licitaciones importantes con empresas internacionales, obviamente que tiene que haber un responsable. La ministra dijo que no tenía idea, la seremi tampoco, el subsecretario tampoco, entonces aquí alguien tiene que responder y tomar las responsabilidades políticas, pedir perdón o dar explicaciones, pero aquí no hemos escuchado nada. Hay que tomar medidas desde la Contraloría para que esto no se vuelva a repetir. Aparte de no tener una transparencia, están jugando con la letra chica, todo con pillerías», manifestó a Cambio21 el diputado DC, Pablo Lorenzini.
«La culpa no es del chancho…»
Si hay algo que ha sido una constante durante la administración de Piñera, han sido los chascarros. Tanto los particulares del presidente con las «piñericosas» y las fallas que se han presentado en diversos proyectos. El mandatario está frustrado, pues uno de los broches de oro para el cierre de su gobierno era la inauguración de esta obra única en el país y fracasó.
«Esto es muestra de la arrogancia de un gobierno que no escucha a sus funcionarios, que no escucha a los trabajadores ni a los parlamentarios. La arrogancia de creer que todas las obras son fundacionales, las más modernas y grandes. El gobierno creo que ha quedado casado en su propio discurso», sentenció el diputado De Urresti al expresar su opinión sobre el fondo del problema.
«Esto es una broma que se le contó a la ciudadanía. Yo entiendo que cuando se puso la primera piedra el 28 de diciembre, hace ya varios años, no se explicó bien que esto iba a ser una broma para terminar este gobierno. Claramente cuando escuché la noticia pensé en que algo está fallando en los gobiernos y en el país. No puede ser que obras emblemáticas del presidente, que cuestan decenas de millones de dólares simplemente no funcionen», concluyó por su lado el diputado Lorenzini.
Cabe recordar que, durante una visita inspectiva a la zona la ministra de Obras Públicas, Loreto Silva -y siguiendo la línea del presidente- aseguró que este proyecto correspondía a la futura postal de Chile en el extranjero. Ella hoy se lava las manos diciendo que los problemas presentados son absolutamente fuera de la responsabilidad del gobierno.
«Este proyecto no solo era emblemático para la región, sino que ha sido un proyecto que ha tenido privilegios en la lista de prioridades del gobierno como obra emblemática del país. Sin embargo, independientemente de cuán grave sea el problema que tenga hoy la instalación del puente, el mayor problema es que han ocultado información. Esto se supo hace casi un mes. Por la vía del rumor varios nos enteramos y en lo personal yo solicité información a los asesores y la respuesta fue que todo estaba bien», manifestó el electo diputado DC Iván Flores.
Fuente: Cambio 21