Las dudas en torno al tumor maligno que supuestamente aqueja al ingeniero comercial Rafael Garay, se acrecientasn por la venta de su flotilla de automóviles de lujo, concluida días antes de abandonar el país, el cierre de todas sus cuentas corrientes y tarjetas de crédito y una fiesta de despedida en un elegante cabaret de Providencia.
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En el mes de junio pasado, el economista publicó en su cuenta twitter que padecía de un glioblastoma, por lo cual renunciaría a sus labores para focalizarse en su enfermedad.
Se trata de uno de los tumores cerebrales más agresivos. Según Rodrigo Salinas, profesor asistente de neurología de la Universidad de Chile, “su agresividad tiene que ver con que crece más rápidamente, ocupando espacio en el cerebro y provocando mayores síntomas, los que varían dependiendo del lugar donde se aloje, su tamaño y qué tan rápido crezca”.
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El primer síntoma es un fuerte dolor de cabeza, seguido de confusión, trastorno de memoria, náuseas cambios en la personalidad, desequilibrios al caminar, problemas para hablar, incluso convulsiones del tipo epilepsia.
“Un glioblastoma en etapa avanzada que no responde a terapia inicial previa significa que tiene un tamaño suficiente para provocar síntomas de esta naturaleza. Es muy raro que pase inadvertido sin que provoque un cierto grado de déficit de algunas funciones neurológicas, confusión o trastorno de la memoria o del habla”, agrega el facultativo. .
Por su parte, Evelyn Benavides, neuróloga de la Clínica de la Universidad de los Andes, explica que los tumores cerebrales tienen un comportamiento incierto, por lo cual una persona puede vivir tres meses, y otras, unos años con esta enfermedad. Agrega que el glioblastoma es uno de los tumores con pronóstico más malo:
«Rafael Garay, a partir de lo que se ha conocido de sus actividades, estaría dentro de las personas que le ha ido bien con ese tipo de tumores. ¿Puede que tenga el tumor? Sí. ¿Puede estar cómo se ve? Sí. Pero es raro, porque no es la forma de comportamiento habitual de un tumor de esas características”.
La pasión por los autos de lujo
La historia del economista Rafael Garay suma otro capítulo. Ahora que tiene una orden de detención internacional de captura vigente por el presunto delito de estafa, se conoció que el chileno se deshizo de toda su «flota» de automóviles de lujo que tenía antes de salir del país.
Le gustan los automóviles a Rafael Garay. Tanto, que en una revista especializada -la de la Automotora Kaufmann- habla de ellos como su tercera pasión, además de la economía y del kudo.
Cuenta que sus favoritos son los Mercedes-Benz AMG, especialmente por su sonido característico, «que hace que para mí sea un placer absoluto manejarlos. De hecho, escucho música muy suave para estar atento al sonido del motor. Obviamente, cuando uno pone una tracción deportiva, el sonido se hace más fuerte».
Cuando le preguntan «¿cuál de tus autos es el preferido?», destaca el SL 63 AMG. «Tiene una conducción que es casi tipo sedán, muy suave, y si lo quieres exigir deportivamente, responde bastante bien. Además, es un convertible con techo duro, que me encanta. Para mí, es un auto muy completo».
Se refería a uno de sus seis autos, el Mercedes-Benz 2016 blanco. Tipo station wagon es el modelo GLE 63 AMG, hecho en Alemania. Lo compró el 4 de diciembre del año pasado. Lo tuvo 3 meses y 14 días. El 18 de marzo de este año se lo vendió a Kaufmann, que después de 2 meses y 26 días lo traspasó, el 13 de junio de 2016, al Banco Santander.
Otro de sus vehículos, de los cuales se deshizo antes de partir, son un Mercedes-Benz Station Wagon del año 2015, modelo GL63 AMG, color blanco, hecho en Alemania. Lo compró el 14 de abril del año pasado y lo tuvo durante 8 meses y 8 días. Lo vendió el 22 de diciembre pasado a la concesionaria oficial, que lo tuvo por 4 meses y 29 días. La concesionaria lo vendió el 20 de mayo a una particular, que lo posee hasta hoy.
Asimismo, tenía Jeep modelo Station Wagon Grand Cherokee 4×4 6.4 AUT, negro metálico, de Estados Unidos. Lo compró el 14 de diciembre pasado. Lo tuvo 3 meses y 4 días. Lo vendió el 18 de marzo a un particular, su dueño vigente.
Un Mercedes-Benz negro modelo AMG GT S, del año 2015, de Alemania. Lo compró el 14 de abril del 2015. Lo tuvo un año, 4 meses y 5 días. El 19 de agosto pasado lo traspasó a Kaufmann, que lo tuvo 18 días. A su vez, lo vendió a un particular, su dueño vigente.
También un Mercedes-Benz gris del año 2015, modelo SL63AMG, de Alemania. Lo compró el 2 de septiembre de 2014. Lo tuvo 1 año, 11 meses, 7 días y 23 horas. A partir del 10 de agosto de este año, Kaufmann figura como su propietario. Y su Jaguar del año 2015 , color blanco polar, del Reino Unido, modelo FTYPE 5.0, lo compró el 6 de marzo de 2015. Lo tuvo un año 3 meses y 3 días.
El 9 de junio de este año se lo vendió a un particular, quien lo tuvo 3 meses y 7 días. El 16 de septiembre, este lo vendió a Comercial de Automóviles Labbé.
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Cerró cuenta corriente el mismo día de la denuncia por presunta desgracia
El pasado miércoles 21 de septiembre, mismo día en que se presentó una denuncia por presunta desgracia en la Fiscalía Centro Norte, Garay sacó $ 3 millones, el saldo completo de su cuenta corriente. Fue el último movimiento que realizó.
El fiscal José Morales emitió una orden de captura internacional y ordenó el congelamiento de las cuentas bancarias. Sin embargo, el economista retiró los últimos recursos de su cuenta corriente el mismo día en que su ahora exabogado, Ángel Valencia, se dirigía a la Fiscalía Centro Norte a interponer una denuncia por presunta desgracia de su cliente.
Así lo revela el “listado de movimientos de moneda nacional” de Garay, donde constan los últimos giros realizados por el «experto» en economía y también excandidato a senador como independiente en la lista del PRO.
Según esos documentos, el miércoles 21 de septiembre la cuenta corriente de Garay registró un giro de $3.699.986, dinero proveniente de un cheque que había sido depositado el día anterior en una sucursal bancaria de Apoquindo. Desde ese día, su cuenta está en cero.
Los mismos informes revelan también que el ex director de Felices y Forrados recibió y giró importantes cifras de dinero en su cuenta corriente durante los últimos dos meses, incluidos los días en que supuestamente estaba en un tratamiento en el centro europeo del cáncer Gustave Roussy y los posteriores, fecha durante la cual su familia le perdió el rastro.
Eso sí, durante los últimos 50 días, entre sus giros existen varios pagos de cheques depositados a su cuenta. Uno por $43 millones el 4 de agosto; uno por $81 millones el 12 de agosto, otro por $72 millones el 18 de agosto y uno por $90 millones de pesos el 31 de ese mismo mes.
Junto a eso, los días en los que supuestamente estaba internado tratándose el cáncer, tiene diversos pagos cubiertos por su línea de crédito. Además, Garay tiene hoy todas sus tarjetas de crédito bloqueadas y una segunda cuenta corriente en el mismo banco sin dinero ni movimientos.
El economista supuestamente había partido a Francia el 4 de septiembre a someterse a un tratamiento de quimioterapia y su regreso estaba programado para el 14 de este mes, día desde el que se le perdió la pista. Posteriormente, la Cancillería ratificó que el mismo 21 de septiembre Garay solicitó un certificado de soltería en el consulado chileno ubicado en Bucarest, y luego que en los últimos días transitó en Francia, Tailandia, Holanda y Rumania.
En los últimos días se han conocido denuncias por estafa en su contra como socio de las empresas Think & Co y dos en las que participó durante 2014: Bourse Up y Capital Development, entre otras.
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Despedida en club nocturno
Francia, Tailandia, Holanda y Rumania es hasta ahora, según las policías, el periplo que ha realizado el conocido ingeniero comercial Rafael Garay, luego que se perdiera todo contacto con él desde el 14 de septiembre pasado.
Garay habría participado en una «fiesta de despedida» en el club nocturno Passapoga, ubicado en la comuna de Providencia. La jornada se habría desarrollado un par de días antes de su viaje a Europa, junto a amigos y varias de las bailarinas del local.
No es primera vez que se conoce de la relación del ingeniero con el personal del aludido local nocturno. A pocos días de la Navidad de 2007, Garay protagonizó un violento accidente en la comuna de Las Condes, en la intersección de la avenida del mismo nombre con Estoril. El profesional se vio involucrado en un triple choque automovilístico, tras el cual debió ser llevado a un centro asistencial.
El ingeniero comercial viajaba junto a tres bailarinas del mismo club nocturno Passapoga, quienes también resultaron heridas. Además, se reveló que el economista viajaba en evidente estado de ebriedad, pues su alcoholemia arrojó 2,3 gramos de alcohol por litro de sangre.
