Cinco miembros del clan Ossandón Larraín fueron formalizados esta mañana por delitos tributarios y omisión de declaración de la empresa Real State Golden Invesment (RSGI). María Soledad Larraín Troncoso; su cónyuge, Gabriel Ossandón Valdés; y sus hijos, Bernardo, María Teresa y Gabriel quedaron con arraigo nacional y firma mensual en la 16° Comisaría de La Reina.
La defensa de los miembros de esta familia pidió que se aplazara la cautelar desde el 1 al 30 de abril para María Teresa y Gabriel Ossandón Larraín.
El juez dio un plazo de 90 días para la investigación y acogió la petición de la defensa luego de que no se opusiera la parte querellante.
La formalización de cargos que realizó el fiscal José Antonio Villalobos se enmarca en la querella por fraude tributario que impuso el SII por un monto que superaría los US$330 millones. Esta acción judicial se produjo luego de una disputa interna en la familia por el patrimonio familiar.
“La planificación fraudulenta tuvo como finalidad que el patrimonio de la familia Ossandón-Larraín, que se encontraba radicado en sociedades domiciliadas y residentes en el país, a través de diversos actos jurídicos fuera acrecentando de manera ilícita y deliberadamente traspasado etre diversas sociedades creadas al efecto”, dice la querella del SII.
«No entiendo absolutamente nada». Fue la frase utilizada por los cinco miembros de la familia Ossandón Larraín formalizados hoy por delito tributario, luego que la Fiscalía de Delitos de Alta Complejidad Oriente indagara hechos denunciados por el Servicio de Impuestos Internos en diciembre del año pasado.
En la instancia, el fiscal José Antonio Villalobos les comunicó a María Soledad Larraín Troncoso; su cónyuge, Gabriel Ossandón Valdés; y sus hijos, Bernardo, María Teresa y Gabriel que son investigados por ilícitos registrados durante el año 2010 y cuya defraudación alcanza los $100 mil millones. Los hechos, de acuerdo a la exposición del investigador ante el 4º Juzgado de Garantía, tienen relación con la presentación de declaraciones maliciosamente falsas, previstas y sancionadas en el artículo 97 Nº 4 incisos 1º y 2º del Código Tributario.
Según detalló Villalobos, todos los imputados «de manera concertada y a través de diversas operaciones, lograron finalmente burlar impuestos al fisco de Chile por medio de diversas sociedades y maniobras que les permitieron no pagar los impuestos».
Los encausados escucharon atentos los cargos por los cuales son investigados por el Ministerio Público, sin embargo, insistieron en «no entender» los hechos que hoy pesan en su contra.
El tribunal decretó como medida cautelar para toda la familia el arraigo nacional y la firma mensual en la comisaría de La Reina, la que deberá cumplirse durante los 90 días de investigación fijados en primera instancia.
La causa se inició cuando otro de los hermanos, Manuel Ossandón Larraín, denunció al Servicio de Impuestos Internos presuntas irregularidades cometidas por personas que forman parte del clan y que habrían tenido como finalidad disminuir la carga tributaria que debía ingresar en arcas fiscales. Pese a ello, según indicó el fiscal Villalobos, éste también podría ser formalizado por el mismo delito que sus familiares, decisión que será adoptada luego de la declaración que el denunciante preste ante el ente persecutor penal.
Manuel Ossandón además, se querelló en 2012 por estafa y apropiación indebida en contra de su hermano Bernardo, acción que dejó al descubierto la disputa entre ambos por el destino de la fortuna de la familia.
Este caso, sin embargo -que llevó adelante la Fiscalía Centro Norte- fue sobreseído definitivamente luego que el Ministerio Público estimara que los actos detallados en la acción judicial no tenían mérito.
Dos años después y luego de la investigación realizada por el SII, en diciembre del año pasado el organismo se querelló ante el 4° Juzgado de Garantía contra las personas denunciadas y dio luz verda para que los fiscales Pablo Norambuena, Carlos Gajardo y José Antonio Villalobos imputaran a los aludidos los eventuales ilícitos.
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