La afirmación de dirigentes sociales y vecinales, de concejales y diputados de las Comunas de Pedro Aguirre Cerda y Lo Espejo fue tajante: “Exigimos que el gobierno haga el tramo subterráneo del Rancagua Express en el paso por nuestros sectores y que no insista sólo porque el señor Sebastián Piñera quiera cortar la cinta antes de irse”.
Hace meses que de manera transversal, estando todos los sectores políticos de acuerdo, junto a la opinión de toda la ciudadanía de Pedro Aguirre Cerda y Lo Espejo (comprobada en consultas y en diversas manifestaciones), se viene planteando que el paso del tren rápido por esas Comunas genera problemas de conectividad, afecta al medio ambiente, impide acceso fluido a servicios públicos y de salud y no contempla el desarrollo de áreas verdes y mejor calidad de vida urbana en el sector.
Dirigentes vecinales plantearon que “no estamos en contra de este proyecto ferroviario, pero como ocurre en otras ciudades, planteamos que en este tramo debe ser subterráneo”.
Los representantes comunales, entre quienes están Claudina Núñez, alcaldesa de Pedro Aguirre Cerda, y Miguel Bruna, alcalde de Lo Espejo, plantean el problema de que por sus territorios vaya a pasar a nivel calle un tren a 160 kilómetros por hora cada cuatro minutos, incrementando el peligro de más muertes y accidentados, cuando en la actualidad la cifra de fallecidos en las vías supera los 170.
Durante más de un año las autoridades comunales, representantes sociales, junto a parlamentarios como Guillermo Teillier, Soledad Alvear y Pedro Browne, vienen reuniéndose con el Ministro de Transporte, planteando el tema en el Congreso, insistiendo en la viabilidad del tren subterráneo, pero las autoridades no dan respuesta y de hecho ya comenzaron labores para la construcción de la vía a nivel calle.
El diputado y candidato a senador por esa Circunscripción, Carlos Montes, planteó que “estamos exigiendo que haya estándares modernos y de acuerdo a nuestra realidad. En obras del barrio alto, ante reclamos o propuestas de vecinos, se gastaron alrededor de 500 millones de dólares más para mejorar las condiciones de los proyectos viables. Lo que pedimos acá no es más de 200 millones. Hay que considerar a las comunidades en este tipo de proyectos. Nadie se opone al Rancagua Express, que bueno por la ciudad de Rancagua, pero también hay que considerar los derechos y necesidades de los demás ciudadanos”.
El diputado Guillermo Teillier, que va a la re-elección por esas comunas, sostuvo que “todos los parlamentarios estamos de acuerdo en trabajar por el tren subterráneo. Pensamos que puede haber una modificación presupuestaria, no creemos que ahí esté el problema. Este es un proyecto para 100 años y sus afectaciones no pueden dejar de considerarse, porque no van a estar 100 años las personas sufriendo las consecuencias de un mal plan”.
El diputado Pedro Browne indicó que “este es un problema mayor que tiene que ver en cómo proyectaremos la ciudad hacia el futuro. Este es un proyecto segregador y eso es tremendamente relevante. No puede ser que primero se compran los terrenos, después se empieza a construir y al final se consulta a los ciudadanos; la cosas es al revés. El progreso sin dignidad es un retroceso”.
Sobre el tema también opinó Alejandro Sule, candidato a diputado por esa zona, donde señaló que “es urgente conminar al gobierno a parar esta obra. Piñera lo único que quiere es inaugurar este tren, dejarlo funcionando como obra de su administración, él quiere cortar la cinta”. Y llamó a que no se deje de reclamar al gobierno la suspensión de los trabajos.
Dirigentes comunales indicaron que “no queremos otro Aysén en estas Comunas, pero vemos que no nos escuchan, que van a empezar a construir y se van a topar con nuestra resistencia y con nuestras movilizaciones”.
Se anunció que las movilizaciones continuarán y los parlamentarios volverán a realizar gestiones para lograr el Tren Subterráneo por Pedro Aguirre Cerda y Lo Espejo.
