A primera vista, la pregunta puede parecer de una sinceridad brutal y de una eventual falta de camaradería con la Senadora Carolina Goic, la candidata de mi partido, que ha anunciado que llegará hasta noviembre como opción de primera vuelta. Pero se trata de todo lo contrario.
Como mi partido me importa y como también me importa cuidar sus liderazgos, creo que es sano y necesario hacer estas preguntas en público, porque la política se hace de cara a la gente.
Todos saben que he sido férreo partidario de mantener el eje de centro izquierda de la Nueva Mayoría, que por lo demás, ha sido y es el centro por donde se toman buena parte de los acuerdos que han dado gobernabilidad al pacto. Por lo tanto, también he sido férreo defensor de las primarias como mecanismo esencial para dirimir acerca del candidato o candidata del bloque.
Esto, por supuesto, con el imperioso acuerdo programático que debe guiar todo lo anterior.
Entonces, pregunto de nuevo, ¿qué hacemos si no prende?
Ese es un escenario realmente inquietante porque sabemos – y es bueno dejarse de eufemismos o de autocomplacencia – que hay quienes creen que en ese caso hay que bajar la candidatura presidencial y buscar una salida negociada al tema del pacto parlamentario.
No estoy de acuerdo. Por un asunto ético y de práctica política. Primero, porque en esto no estamos haciendo trueque ni intercambiando algunas especies. Estamos hablando de liderazgos políticos, de proyectos ideológicos y de visiones de país. Carolina es uno de esos liderazgos de recambio para el PDC y para la política nacional en su conjunto, por lo que desde mi perspectiva sería bueno cuidarlo, proyectarlo y fortalecerlo al futuro.
Lo segundo y que tiene que ver con la práctica política, es que hemos sido hasta ahora un pacto que llega a acuerdos, que pese a las grandes diferencias sí es capaz de ser ordenado y disciplinado. Llevar las cosas a una negociación espuria donde se podría conjugar el peor escenario de buscar sólo los cupos parlamentarios, me parece algo francamente de mal gusto.
Este fin de semana la Junta Nacional terminará por definir qué acciones seguirá mi partido para enfrentar uno de los momentos más complicados por lo que ha atravesado el bloque de centro izquierda.
Y no deja de ser sintomática esta conjunción de eventos similares a los que vivimos antes; de hecho, hay que ser sinceros respecto la alternativa cierta de que la Presidenta Bachelet le entregue el gobierno a la derecha por segunda vez y eso pareciera no ser leído de una manera lo suficientemente seria ni por el gobierno ni por los partidos que han estado alentando el clima divisional.
La Junta va a hablar y es hora de que la DC tenga en mente todas estas cosas antes de decir una palabra.
Tenemos liderazgos, tenemos ideas, la clave está en cómo gestionar ambas cosas y cómo seducir a nuestros socios y a nuestro país para poner en práctica nuestra vocación por el servicio público.
(*) Senador de la DC por la IV Región de Coquimbo
Fuente: Radio Cooperativa