El Tribunal Oral en lo Penal de Coyhaique condenó 26 años de prisión efectiva a Mauricio Ortega, ex pareja de Nabila Riffo, por los delitos de femicidio frustrado, lesiones gravísimas y violación de morada.
El pasado 18 de abril, la Corte entregó el veredicto de culpabilidad de Ortega, en calidad de autor, de los delitos de femicidio frustrado y lesiones graves gravísimas; esto en relación con los hechos de la madrugada del 14 de mayo del año pasado.
El individuo fue también juzgado por otro episodio ocurrido el 5 de junio de 2015, cuando concurrió con un hacha hasta una vivienda donde Nabila se encontraba junto a sus hijos.
Respecto a este hecho fue condenado como autor del delito de violación de morada violenta, pero absuelto del delito de amenazas.
La Fiscalía pedía 12 años y 183 días de prisión por el femicidio frustrado y otros 12 años y 183 días por las lesiones graves gravísimas. Por la violación de morada solicitaba otros 540 días.
En definitiva, el tribunal dictó una pena de 12 años y 180 días para Ortega por el femicidio frustrado, otros 12 años y 180 días por el delito de lesiones graves gravísimas y 540 días por el delito de violación de morada violenta; lo que suma 26 años de presidio.
La Corte no condenó a Ortega al pago de las costas del juicio. A la sentencia hay que restarle los 349 días que el sujeto lleva ya tras las rejas.
El tribunal estuvo compuesto por los magistrados Rolando del Río, Pablo Freire y Mario Reyes.
En el fallo dado conocer hace dos semanas, los magistrados calificaron de «poco creíble» la versión entregada por Ortega, quien dijo que se había dormido por unos 15 minutos al interior de un auto en la madrugada del 14 de mayo de 2016, justo en el momento en que Nabila Rifo era agredida.
Además, se determinó que las llaves encontradas cerca del lugar de los hechos pertenecían a Ortega.
Respecto a los testimonios que señalaban la presencia de una tercera persona -alta y que vestía de negro- en el lugar de la agresión, el dictamen dice que esta se diluyó debido a las contradicciones de los testigos.
El juicio El juicio, que comenzó el 13 de marzo, tuvo su punto cúlmine con la declaración de Nabila Rifo, la cual generó alta expectación.
«Mauricio me pegó en la cabeza con una piedra muy grande (…) cuando me pega la primera vez, con el golpe, me botó al pasto y después me pega tres veces más», dijo en esa oportunidad.
El fallo fue valorado por el fiscal jefe de Coyhaique, Luis González:
«Es un fallo contundente. Las penas están aplicadas en los rasgos máximos. Por lo tanto, es lo que se solicitó (…) La convicción del tribunal está clara respecto de todos los delitos con los cuales se dictó veredicto condenatorio. Es un fallo sumamente contundente y sumamente importante por el tipo de delito y la gravedad de los hechos que contenía la acusación. Es un caso de una gravedad y una relevancia que lo transforma en un caso muy importante, (…) relevante, seguramente, para los que vienen».
