La canadiense Kinross dijo este lunes que apelará a una orden de la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) de cerrar unas instalaciones de extracción de agua en su yacimiento Maricunga que son clave para su operación.
La SMA dijo que ordenó la clausura definitiva de las plantas en el yacimiento aurífero Maricunga tras comprobar que debido a su operación se desecaron humedales ubicados en torno al complejo.
La empresa «responderá dentro de los plazos señalados por la ley, y tiene la intención de presentar una apelación ante el Tribunal Ambiental correspondiente», dijo Kinross en un comunicado.
«La Región de Atacama ha sufrido de una sequía prolongada durante muchos años, lo que resulta en una caída en los niveles de agua subterránea en la región, que no está relacionada con las operaciones», agregó.
Además explicó que Maricunga sigue operando normalmente pero que depende del agua de los pozos de Pantanillo para soportar su funcionamiento.
La resolución de la SMA aún debe ser confirmada por el Tribunal Ambiental de Santiago. Maricunga produce entre 230.000 y 250.000 onzas de oro al año.
