por Juan Martorano (*)
Hoy nos vamos a permitir alertar, a través de estas líneas, acerca del próximo sábado 23 de febrero, en las ciudades de Cúcuta, Colombia, y San Cristóbal, Venezuela, donde se está generando una operación de “falsa bandera”, con el fin de justificar una eventual incursión armada a territorio venezolano.
Se han obtenido los datos mediante fuentes de inteligencia social, y esperamos que los órganos a quienes corresponda, actúen en consecuencia.
La información versa sobre la convocatoria que grupos vinculados con la oposición venezolana han hecho a lumpen e integrantes de bandas criminales y hamponiles de Caracas y otros estados hacia San Cristóbal, en el estado Táchira.
Los mismos serían pagados en dólares con el fin de disparar a los efectivos de la FANB que resguardan los puestos fronterizos y contra de las personas que estarán recibiendo la “ayuda humanitaria” en la manifestación convocada por Guaidó para ese día.
Asimismo, cabe advertir que se han convocado a muchos jóvenes de todos los estados de la geografía nacional y especialmente de estados fronterizos, con el fin de originar un evento desencadenante de alto impacto, que origine una gran conmoción nacional.
Esa sería la señal para que se active el plan militar de agresión a Venezuela.
En ese orden de ideas, también se ha procedido a la convocatoria de muchas personas inocentes, los supuestos voluntarios anunciados por Juan Guaidó, y la mayoría de ellos provenientes de los estados occidentales del país (no olvidemos la “media luna” venezolana).
Estas personas, indudablemente requieren medicamentos y otros insumos, pero el plan es que serán utilizadas como víctimas en el marco de la agenda oculta que maneja la oposición para ese día.
Es evidente que al igual que el 11 de abril de 2002, están preparando todo un escenario mediático que deslegitime al actual gobierno que encabeza Nicolás Maduro para justificar el despliegue de una acción armada sobre el territorio venezolano, creando una supuesta zona liberada en el estado Táchira.
Tal y como varios analistas hemos advertido, y debido a que el primer plan fallo por razones ajenas a sus planificadores, ahora el ataque que se prepara se monta en base a estos supuestos que nos han llegado de igual manera:
1.- Guaidó declararía el 23 de febrero que “entrará la ayuda humanitaria por Cúcuta”.
2.- El ejército venezolano se encuentra apostado en la frontera.
3.- Cientos de venezolanos residentes en Colombia irían hacia la frontera el día sábado 23 para ingresar a Venezuela… Todos animados, apoyados y patrocinados por el Estado colombiano y EEUU (¿se podría decir que los llevan a una emboscada?).
4.- Existen paramilitares colombianos infiltrados entre los manifestantes venezolanos.
5.- Los camiones con “ayuda humanitaria” pretenderán entrar junto con los manifestantes.
6.- CNN, BBC, RCN, Caracol, y demás medios internacionales se encuentran apostados a los alrededores para filmar las puestas en escena.
7.- Se advierte sobre la posibilidad real de que el ejército venezolano impida la entrada de esta ayuda y de estas manifestaciones a territorio venezolano.
8.- Paramilitares y francotiradores apostados en la frontera del lado colombiano comiencen a disparar a mansalva a los mismos manifestantes y opositores al azar.
9.- Medios de comunicación filman esas escenas y las muestran al mundo. Las mismas serán presentadas como noticias de última hora de las fake news, que se han puesto a la orden del día, y con el siguiente titular: “Nicolás Maduro reprime a los manifestantes, ocasionando muchos muertos y heridos”.
10.- Esto evidentemente y por efecto cascada, generará un pronunciamiento internacional de diferentes instancias, sobre estas “acciones”.
11.- Es ahí donde EEUU envía a sus portaaviones para castigar a Maduro.
12.- La acción de invasión militar se pondría en marcha con paramilitares colombianos que se harán pasar por venezolanos.
Esto es solo una de las hipótesis, pero recordemos que cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia.
Tampoco podemos descuidar la fachada de la frontera por los lados de estados como Amazonas, Bolívar, con países como Guyana y Brasil; ni la fachada del Caribe, donde está el ABC del Reino de los Países Bajos, me refiero a las islas de Aruba, Bonaire y Curazao.
Y una tercera y última hipótesis, tendría que ver que se realicen maniobras de distracción en los corredores fronterizos antes mencionados, pero el verdadero ataque por parte de los ejércitos extranjeros y la toma sea la propia capital de la República, Caracas, ya que dicha ciudad es el centro de la disputa del poder político en la actualidad venezolana.
Si bien es en estados como Bolívar, Amazonas, Anzoátegui, Nueva Esparta, Monagas, Sucre, Delta Amacuro, Falcón, Zulia, algunas entidades donde se encuentran las mayores riquezas del país; nada harán las fuerzas que pretenden tutelar a Venezuela si no controlan la sede de las ramas del Poder Público Nacional. Por ello, primero deben controlar Caracas, para luego ir por el resto del país.
Máxima movilización y conciencia en estos momentos.
Calma, cordura y nervios de acero, pero sin dejar de lado el ímpetu y los puños calientes que se imponen ante el peligro que se cierne sobre la República.
Evidentemente, y como me lo indicó recientemente un camarada, estamos en plena hora de forja y de hornos.
(*) Abogado, activista por los Derechos Humanos, militante revolucionario y de la Red Nacional de Tuiter@s Socialistas
Fuente: Alainet