El 4 de octubre, la Corte de Apelaciones de Copiapó declaró admisible un recurso de protección presentado por la abogada Bárbara Salinas en contra de Minera Nevada SpA, nombre con el que opera en nuestro país la firma canadiense Barrick Gold, impulsora del proyecto aurífero Pascua Lama. En el libelo, la jurista acusa a la compañía de instalar, ejecutar y realizar obras no autorizadas por la Superintendencia del Medio Ambiente, en su resolución exenta N° 477 de mayo del año pasado.
Este dictamen, que surgió a raíz de una “autodenuncia” presentada por Minera Nevada SpA a inicios de 2012, establece que la filial de Barrick Gold quebrantó la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) que autorizó el proyecto.
Específicamente, la Superintendencia estipuló que Minera Nevada SpA no construyó los canales perimetrales y obras de mitigación de daños ambientales requeridos.
Entre paréntesis, el oficio 477 se firmó luego de que la Corte de Apelaciones de Copiapó ordenara, en abril de 2013, la paralización de Pascua Lama, gracias a un recurso presentado por comunidades diaguita.
Volviendo a la querella, la institución ambiental ordenó paralizar la totalidad de las actividades de la fase de construcción del proyecto, mientras no se ejecuten las obras de manejo de aguas. Se permitió, eso sí, la captación, transporte y descarga necesaria para implementar este requerimiento.
La respuesta de Minera Nevada SpA a la resolución 477 de la SMA fue que, adicional a la implementación de la paralización, se requiere la natural continuidad de 16 obras para “impedir que el proyecto sufra algún detrimento”.
Dieciséis acciones -entre las que se cuentan el sistema completo de supresión de polvo, la operación y mantención del incinerador y de las oficinas administrativas y reparaciones de la aeropista- que, según la querellante, “vulneran el derecho a la vida y a vivir en un ambiente libre de contaminación”.
La respuesta de Barrick no dejó conforme a la autoridad ambiental, que solicitó, mediante resolución exenta número 563, los motivos que fundan la manutención de dichas obras y actividades.
En un documento timbrado con el logo corporativo, Barrick contestó que la información requerida ya se había entregado.
La contestación de la Superintendencia de Medio Ambiente fue: “téngase por informado”, respuesta que, según la abogada Bárbara Salinas, “no representa una autorización formal de parte de la SMA”, por lo que a su juicio y de acuerdo a los antecedentes presentados, Barrick estaría incumpliendo la paralización de obras.
Estos antecedentes fueron expuestos ante la comisión de la Cámara que investiga el panorama ambiental del Valle del Huasco por los trabajos de instalación del Proyecto Pascua Lama.
En dicha presentación, efectuada el 11 de septiembre de 2013, también se acompañaron los antecedentes relativos a la supuesta falsificación de instrumento público y/o uso malicioso del mismo que habría cometido Barrick, para concretar la firma del tratado que viabilizó Pascua Lama en Chile y Argentina.
Cabe recordar, que estos hechos están siendo investigados por la Unidad de Delitos de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte.
Este miércoles se llevará a cabo la penúltima sesión de la comisión investigadora, instancia que ya elabora su informe final.
El grupo parlamentario posiblemente sume a su carpeta la reciente denuncia interpuesta por Greenpeace Chile ante la SMA, por posible alteración de fechas, ocultamiento de información y descargas ilegales en el río Estrecho por parte de Barrick, en la autodenuncia de comienzos de 2012.
Esta delación, junto a las ya expuestas y a otras que se podrían presentar, deberá ser ponderada por la comisión investigadora que indagó el comportamiento ambiental de Barrick en el Valle del Huasco.