La incorporación de la tecnología en la industria de los alimentos y a lo largo de todos los procesos de la cadena de producción, distribución y consumo es una tendencia cada vez más creciente.
En la medida en que las innovaciones en materia tecnológica continúan surgiendo en todo el mundo, debemos esperar la aparición de nuevas herramientas y usos en toda América Latina, en especial en Chile, un país que sigue posicionándose como líder en adopción de nuevas tecnologías no solo en la región sino en el mundo.
Uso de robots en cocinas y en experimentos de entrega a domicilio
Algunos restaurantes comienzan a implementar el uso de robots en los procesos de elaboración de comidas, ya sea mezclando ingredientes, sirviendo cocteles o incluso preparando café.
Del mismo modo, han comenzado a surgir experimentos utilizando robots de entrega a domicilio, entre los cuales es pionero el robot autónomo empleado por Domino’s en Australia y Nueva Zelanda para hacer sus primeras pruebas de entrega de pizza.
Uso de aplicaciones en restaurantes
Desde aplicaciones para hacer y gestionar reservaciones en restaurantes, como Mesa o Degusta, hasta otras que permiten hacer pedidos desde la mesa del bar o del restaurante sin necesidad de llamar al garzón, diversas soluciones tecnológicas buscan facilitar la experiencia de visitar un restaurante y reducir los tiempos de espera y las incomodidades asociadas con la visita.
Expansión prevalente de los servicios de entrega a domicilio
Las compañías de entrega a domicilio como PedidosYa prestan servicio para una gama de cocinas y compañías cada vez más amplia, abarcando no solo grandes cadenas de comida rápida, sino también restaurantes más pequeños como Tip y Tap, que sirve clásicos chilenos como churrascos y lomitos.
Experiencias digitalizadas, como los kioscos de auto-servicio
En América Latina, las grandes cadenas de comida rápida como McDonald’s o Wendy’s han popularizado la implementación de kioscos de autoservicio, que permiten a los clientes elegir su pedido, personalizarlo y pagarlo directamente en interacción con la pantalla.
En países como Japón y Corea del Sur, este tipo de soluciones ya están popularizadas en distintos tipos de restaurantes, y la cadena Starbucks incluso permite hacer el pedido desde el teléfono móvil antes de entrar a la tienda, convirtiendo el dispositivo una suerte de kiosco de autoservicio de bolsillo.