Como nunca antes había sucedido, el Ministerio de Hacienda ofreció reajustar el salario mínimo en cero pesos, cuando la situación exige exactamente lo opuesto.
A pocas horas de que finalizara el plazo para ingresar el proyecto de reajuste, se propuso mantener el actual salario mínimo en 320.500 pesos, «dada la variación de 0 por ciento del IPC entre marzo 2020 y hoy».
El ministro Ignacio Briones explicó que el reajuste propuesto «es reflejo de la crisis económica y laboral que atraviesa el país, como consecuencia de la pandemia Covid-19».
El Ejecutivo había descartado la propuesta de los dirigentes de aumentar el sueldo mínimo de 320.500 a 400.000 pesos -como es el Ingreso Familiar de Emergencia-, arguyendo que implica un alza de 25 por ciento en medio de la mayor crisis económica en décadas.
«Mantiene el poder adquisitivo de los trabajadores; responde a la realidad de los miles que hoy buscan empleo; y es responsable con las pymes», dijo el ministro Ignacio Briones.
«La caída de la actividad económica nos sitúa en niveles similares a lo que el país tenía hace tres años, cuando el salario mínimo era de 291.426 pesos (…) En ese entonces la tasa de desempleo era del 7,3 por ciento, casi la mitad del desempleo registrado el último trimestre móvil mayo-julio, de 13,1 por ciento», argumentó Briones.
El titular de Hacienda sostuvo:
«Este reajuste mantiene el poder adquisitivo de los trabajadores; responde a la realidad de los miles de chilenos y chilenas que hoy buscan empleo; y es responsable con las pymes que hoy buscan recuperarse y que emplean a tres de cada cuatro trabajadores que ganan el mínimo».
Ajuste neoliberal
En suma, ajuste neoliberal en plena pandemia, con un efecto pro cíclico, que la profundiza; cuando la situación clama por una rápida transferencia de recursos a la población, para efectos de reactivación de la economía, como lo demostró el histórico diez por ciento de los fondos secuestrados por las AFP.
Así lo señaló la Presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa:
No basta con las políticas del Ingreso Mínimo Garantizado que ya están implementadas. No basta con proteger los empleos que es una materia altamente sensible y más aún después de la pérdida de 1,8 millones de empleos. Aquí también necesitamos la capacidad de consumo para que, efectivamente, Chile y la reactivación económica sea mucho más veloz. Y en eso, la palabra principal ya no solo la tiene el Gobierno. Hoy día también la tiene la CPC y el empresariado que se está escondiendo detrás del Ministerio de Hacienda para no permitir que los trabajadores y trabajadoras hoy día tengamos un reajuste digno”.
Agregó:
“La contradicción que el Ejecutivo ha planteado es empleo versus salarios. Si yo congelo los salarios entonces protejo el empleo. Nosotros decimos que esa no puede ser la contradicción. Todos vamos a tener que hacer esfuerzos, sin duda. Pero hasta ahora al único que no se le está exigiendo un esfuerzo mayor es al empresariado”.
“¿Quiénes han estado silentes en este debate? El empresariado, ellos no se han pronunciado. Los que han estado poniéndose todo el tiempo en la crisis, han sido los trabajadores y trabajadoras lo tenía a trabajar durante todo este tiempo porque aquí hay trabajadores que durante estos 6 meses han mantenido la economía, han participado los servicios esenciales”, añadió.
La presidenta arguyó que la CUT dio claras señales de flexibilidad:
“El Gobierno planteó en las negociaciones que están disponibles a revisar el ingreso mínimo garantizado. Nosotros planteamos que disponibles a hacer un mix entre el ingreso mínimo garantizado y el salario mínimo. Una política en general que uno podría decir que no es la política que plantean los sindicalistas. Cuando nosotros discutimos reajuste salarial no queremos que el Estado sea el que subsidie a las empresas, de hecho fuimos críticos del ingreso mínimo garantizado que se discutió mucho antes de empezar la pandemia”,
Concluyó:
«La señal del Gobierno es pedir nuevamente a los trabajadores que se vuelvan a apretar el cinturón, siendo que la realidad muestra -como lo evidenció el pago del 10% de las AFP- que cuando los trabajadores tienen capacidad de consumo eso impacta positivamente en la economía pero especialmente en las pymes”.
Para el diputado PC Daniel Núñez, el reajuste 0% del salario mínimo “es indigno”.
“El Gobierno de Piñera descarga todo el peso de la crisis sobre los trabajador@s”, indicó, añadiendo que “si se aprueba el impuesto a los súper-ricos, el salario mínimo puede subir a 350 mil con subsidio estatal”.
Giorgio Jackson (RD) en tanto calificó la situación como “surreal”.
“¿Qué tipo de «oferta» de nuevo sueldo mínimo implica un reajuste de $0 peso? “, se preguntó.
La CUT propuso aumentar el sueldo mínimo hasta los $400.000, al igual que el Ingreso Familiar de Emergencia.
El salario mínimo se analiza en Chile anualmente y se establece por ley para un período de 12 meses. Nunca antes había existido una situación similar a la actual, en que se propone el reajuste del cero por ciento.