por Iván Ljubetic Vargas (*).
El domingo 22 de junio de 1941, a las 3:15 de la madrugada se inició la llamada “Operación Barbarroja”.
Sorpresivamente y pese a un pacto firmado entre ambos países, Hitler ordenó la invasión de la Unión Soviética.
En un gigantesco frente de 1 600 km entre el mar Báltico u el Mar Negro, los nazis pusieron en marcha a más de 4 millones de hombres: 3,5 millones de alemanes y 1 millón de aliados aglutinados en 225 divisiones, junto a 4 400 tanques y 4 000 aviones.
Fue la operación terrestre más grande de la historia,
Avances nazis (junio-noviembre de 1941)
En un principio las defensas militares soviéticas se derrumbaron como estaba previsto. La Luftwaffe se encargó de destruir la mayoría de los aviones de las fuerzas aéreas soviéticas antes de que pudieran despegar.
Los alemanes derrotar rápidamente a las guarniciones soviéticas, sorprendidas por el ataque.
En medio de las derrotas iniciales, Stalin convocó a los soviéticos a la gran guerra patria y se transformó en el líder de la lucha contra los fascistas.
Las poderosas tropas nazis lograron grandes avances. Pero la heroica resistencia soviética las detuvo en las puertas de Leningrado, en las ruinas de Stalingrado y en las afueras de Moscú.
Desde Moscú se inicia el contraataque
El 6 de diciembre de 1941se desencadenó el contraataque soviético a ambos flancos de las líneas alemanas que amenazaban tomar Moscú en tenaza, en un frente de 450 kilómetros.
Con esta contraofensiva, dirigida por el general Zhukov se consiguió derrotar completamente a las tropas nazis.
Luego, los alemanes van de sorpresa en sorpresa.
Habían destruido millares de mediocres tanques rusos en el verano y el otoño de 1941 y he aquí que surge el tanque soviético T 34, admirablemente concebido y equilibrado, mejor blindado y más armado que cualquier máquina alemana; la Luftwaffe había pulverizado después del 22 de junio una infinidad de aviones soviéticos de limitada capacidad y de pronto los soviéticos empiezan a producir en serie el Yak I y los aviones de asalto Iliushin II, llamados Stormovik, temible instrumento que pronto lanzaría cohetes.
Primera derrota nazi en el frente oriental
Fue la primera derrota en el frente oriental para los nazis. Y tuvo fatales consecuencias. Causó desmoralización, en especial entre los reclutas.
Antes la nueva situación, el 19 de diciembre de 1941, Hitler asumió el mando de las Fuerzas Armadas.
La contraofensiva soviética que hizo retroceder el frente Centro unos kilómetros no impidió que los alemanes lograran progresos en el Sur. S
Se estabilizó el frente durante un buen tiempo. Esta posición se mantuvo, sin cambios importantes, durante todo el año 1942 y buena parte de 1943.
Comienza la gran contraofensiva soviética
En julio de 1943 comenzó la gran contraofensiva soviética a lo largo de todo el frente. Se prolongó hasta setiembre de ese año. Abarcó desde el Mar Báltico al Mar Negro, y alcanzó su máxima profundidad al sur de Moscú: 350 kilómetros.
Las fuerzas del Eje sufrieron pérdidas elevadas, pero pudieron detener el avance adversario. El Ejército Rojo marchó contra el Donetz y el Dniéper, tomando Jarkov.
Desde octubre de 1943 a abril de 1944, en el sur el Ejército Rojo reconquista Kiev y en el norte recobran las ciudades de Odessa y Smolensko.
Soviéticos rompen el cerco de Staligrado
Después de resistir heroicamente, desde el 23 de agosto de 1942, el ataque de la poderosa maquinaria bélica nazi, el 2 de enero de 1943 las fuerzas soviéticas rompieron el cerco de Stalingrado que embolsaba al 6º Ejército del General Paulus. Luego de una lucha enconada los alemanes se rindieron. En la primavera de1944, quedó liberado todo el territorio de la Unión Soviética.
De junio a diciembre de 1944, el Ejército Rojo realizó la gran ofensiva sobre el Vístula y ocupó Varsovia. Los gobiernos de Rumania, Bulgaria y Hungría, que eran aliados de los fascistas, pidieron el armisticio. Ello puso fin a la primera parte de la ofensiva soviética.
Empieza la ofensiva sobre Alemania
El 12 de enero de 1945 a las 1,30 horas, a lo largo de todo el frente, se inició la ofensiva contra Alemania. Se desató una lluvia de fuego. El bombardeo ininterrumpido duró hasta las 7 de la mañana. Los 250 cañones por cada kilómetro de frente arrasaron las líneas de defensa alemanas. En Baránov el 4º Ejército de tanques fue virtualmente destruido.
Del 14 al 17 de enero de 1945 tropas soviéticas al mando, mando del General Zhukov liberaron Polonia. En esa última fecha liberaron a los prisioneros que sobrevivían en el campo de exterminio de Auschwitz.
En el norte, en sólo 10 días, las fuerzas de Rokosovski llegaron a orillas del Báltico.
A fines de enero el Ejército Rojo cruzó el Oder entre las ciudades de Francfort y Küstrin, ciudad que quedó a punto de ser embolsada.
En el sur, los soviéticos, al mando de Koniev, avanzaron con igual ímpetu hasta los Montes Sudetes.
Comienza la batalla de Berlín
El 20 de abril, el mismo día que Hitler cumplió 56 años, la artillería soviética bombardeó Berlín.
Casi 300 000 hombres, al mando de Zhúkov, empezaron a rodear la capital alemana por el noreste y el este. Por el sur, 200 000 soldados, dirigidos por Iván Kónev, quebraban el flanco norte del Grupo de Ejércitos Centro. Al mismo tiempo, el Tercer Cuerpo de tanques era atacado por las tropas de Konstantin Rokosovski.
En la capital alemana los tanques soviéticos ya estaban llegando al anillo defensivo de la ciudad. Por el norte el Ejército Rojo había avanzado 15 kilómetros más allá del Oder.
El día 24 de abril Berlín quedó completamente sitiada. Hitler encargó al general Helmuth Weidling la defensa de la ciudad, mientras que por parte soviética los generales Kónev y Zhúkov encabezaban la captura de ésta.
El 25 de abril, el avance soviético permitió que los rusos y norteamericanos tuvieran el primer contacto cerca de Torgau, en las márgenes del río Elba.
Hacia el centro de la capìtal nazi
Las tropas soviéticas avanzaron desde los grandes ejes de avenidas, desde el sureste por la avenida Frankfurter, desde el sur por la avenida Sonnen, hasta llegar a las afueras del distrito de Charlottenburg.
Más al este los soviéticos penetraban en los suburbios de Treptow, Zehlendorf, y Reinickendorf, aplastando la resistencia de las tropas nazis y de las milicias improvisadas. Los soviéticos se enfrascaron en violentos combates urbanos con los defensores alemanes.
Hacia el 25 de abril los soviéticos ya habían entrado en los distritos berlineses de Marzahn, Neukölln y Lichtenberg, mientras que las tropas alemanas retrocedían hacia la zona de los edificios gubernamentales, perseguidos por el bombardeo tenaz de los soviéticos.
El 26 de abril el Ejército Rojo alcanzaba el barrio de Tiergarten y los límites del barrio de Kreuzberg, mientras tomaban el aeropuerto de Tempelhof y todo el barrio aledaño. El día 27 de abril los soviéticos rebasaron finalmente el anillo defensivo basado en el Metro de Berlín y sólo las zonas céntricas de la ciudad quedaron en poder de los alemanes.
El comienzo del fin
El 28 de abril los soviéticos avanzaron desde el norte acercándose peligrosamente al Reichstag, y al bunker de la Cancillería, en el que se encontraba Hitler. Los lugares donde la lucha fue más intensa fueron precisamente el Reichstag, el puente Moltke, y la Alexanderplatz. Para esa fecha los alemanes controlaban únicamente una franja de terrero de cinco kilómetros de sur a norte y quince kilómetros de este a oeste.
En la mañana del 29 de abril los soviéticos penetraron en los barrios más céntricos: Kreuzberg y en Mitte, y amenazaron directamente la Belle-Alliance-Platz y la avenida Unter den Linden. La línea del frente se situó a pocos metros de la Plaza Postdamer, penetrando como una cuña en el mismo centro administrativo de Berlín.
30 abril 1945: la victoriosa bandera roja
En la mañana del 30 de abril los soviéticos intensifican sus ataques sobre el centro de Berlín, alcanzando la Pariser Platz con la Puerta de Brandeburgo a la vista, apenas a unos centenares de metros de la propia Cancillería del Reich de Weidling.
La tarde del mismo día 30, Hitler y Eva Braun se suicidaron en el Führenbunker e inmediatamente después los dos cadáveres fueron rociados con gasolina y quemados en el patio trasero de la Cancillería del Reich por los ordenanzas y asistentes personales de Hitler.
En la tarde del 30 de abril las tropas soviéticas lanzaron su ataque sobre el Edificio del Reichstag. La lucha es brutal y los defensores alemanes se parapetaron bien en las ruinas; tras varias horas de salvajes combates dentro del edificio, soldados soviéticos se abrieron paso hacia el tejado y en la noche del día 30 hicieron ondear desde allí una bandera de la Unión Soviética
Rendición incondicional
Al amanecer del 2 de mayo, las tropas soviéticas lanzaron un asalto final hacia la Cancillería del Reich hallando muy poca resistencia.
El general Weidling rindió Berlín de manera incondicional el 2 de mayo, a las 8.45 horas y requirió por radio a los defensores alemanes que cesaran la lucha de inmediato.
Para esas horas los focos de resistencia alemana en la ciudad eran ya muy reducidos y la mayor parte de Berlín estaba bajo control soviético.
El 8 de mayo de 1945, a las 22,43 horas, el general Wilhelm Keitel, representando a Alemania nazi, firmó la rendición incondicional ante el Mariscal del Ejército Rojo Gueorgui Zhúkov, poniendo fin así a la Segunda Guerra Mundial en el continente europeo.
La contribución a la derrota del fascismo alemán tuvo doloroso costo para la URSS
Murieron 20 millones de soviéticos; fueron destruidos total o parcialmente 1.710 ciudades y pueblos, 70 mil aldeas, 32 mil empresas industriales, 100 mil koljoses y sovjoses, 65 mil kilómetros de líneas férreas, 3 mil parques de máquinas y tractores.
La URSS perdió casi el 30% de su patrimonio nacional.
(*) Historiador del Centro de Extensión e Investigación Luis Emilio Recabarren, CEILER